6. Los soviets

8/10/2019 6. Los soviets

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Somos de barro, de vino, de maíz, de

sol africano, somos canto, grito, risas,

libertad.

El cantor del pueblo Alí Primera nos

deja un verso eterno:“La patria es el

hombre muchacho…”. Es la madre

tierra de todas las naciones, símbolo

de libertad y de paz. La Patria es la

mujer y el hombre constructores de la

Revolución Bolivariana que decantan

la historia, renueva y agudiza nuestro

pensamiento crítico para revertir el

lenguaje opresor que nos fue im-

puesto, y adelantar la responsabilidad

urgente que tenemos de rescatar las

raíces de la mezcla perfecta que es

Nuestra América.La Colección LA PATRIA ES EL HOMBRE,

a través de sus series, Pensamiento

crítico, Historia de Venezuela y Nues-

tra América, Memoria de las comunas,

Construyendo en comunas, Las

cosas más sencillas y El origen de las

palabras, abre brechas para debates,

reexiones y más atentamente a la

búsqueda de la conciencia de lo que

somos en realidad y no de lo que

alienantemente nos hicieron creer

que éramos. Esta Colección permite

sacar a la luz el pensamiento venezo-

lano, latinoamericano, caribeño y del

mundo, con el n de aportar desde la

dialéctica el salto a ese Estado So-

cialista en su completitud, partiendo

desde la concepción ideológica hasta

su tangibilidad en la sociedad.

Invitamos al pueblo venezolano a

rescatar nuestros orígenes, el orgullo

de nuestro mestizaje, la concienciade Patria Grande y a forjar el alma de

nuestro lenguaje liberador, Poder Po-

pular, comuna, comunidad, amistad,

propiedad común, hermandad y amor

al prójimo.



MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LASCOMUNAS Y PROTECCIÓN SOCIAL

————————————————

————————————————

Andreu Nin & John Reed

LOS SOVIETS

Investigación a cargo deComando Creativo

ISBN978-980-6755-13-0Depósito Legal lf783201330039

2da Edición: Venezuela - Caracas, octubre, 2012

© Andreu Nin & John Reed© Editorial La Estrella Roja

Dirección: 8va. Avenida de Altamira,entre 6ta. y 7ma. transversal, Quinta

Fundacredesa, Urbanización Altamira,Municipio Chacao, Venezuela.

[email protected]

CORRECCIÓN

Oleno León

D IAGRAMACIÓN

Omar García Aarón Mundo

D ISEÑO

Comando Creativo



ÍNDICEPresentaciónLos Soviets: su origen, desarrollo y funciones

Andreu Nin

Los Soviets en acción John Reed

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PRESENTALas masas no entran en el movimiento [revoluciona-rio], tanto en la práctica como en el aspecto subjeti-vo, sino por la fuerza de los acontecimientos.

Carta de Lassalle a Marx en 1854

El Soviet fue una forma de organización revolucionaria de la obrera. Surgió por primera vez en Rusia, de la necesidad que tuvlas masas trabajadoras de organizarse durante su primera revolula de 1905, período de crisis aguda de la autocracia zarista; perscomo fin la transformación inmediata y radical de todas las relacsociales.

Los Soviets nacieron a partir de las huelgas generales de 1905convulsionaron a la Rusia de los zares. Los trabajadores rusos comaron Soviets por razones económicas y políticas, al mismo tieLos obreros reclamaban a los patronos la jornada de 8 horas, perobién y en las mismas proclamas exigían la libertad de palabra, d

nión y de asociación; comprendían que la unión de los proletariosu única fuerza. La lección de la masacre del 9 de enero de 190conocido históricamente como Domingo sangriento, estaba frescla memoria del pueblo ruso: los obreros y campesinos habían pedefinitivamente su fe en el Zar y pedían la caída de la autocracia.

León Trotski, quien llegó a presidir el Soviet de Petersburgolas revoluciones de 1905 y de 1917, advertia que para tener autor



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sobre las masas, el Soviet tenía que instituirse sobre la base de una repsentación muy amplia. Trotsky señala que “al ser el proceso de produción el único nexo que existía entre las masas proletarias, desprovisde organización, no había otra alternativa sino atribuir el derecho drepresentación a las fábricas y los talleres”.

La diversidad de concepciones y corrientes revolucionarias dentdel proletariado –y a su vez dentro del Soviet– no representaba un prblema mayor para los marxistas rusos en 1905.

Para Vladimir Ilich Lenin, líder de la fracción bolchevique dePartido Obrero Socialdemócrata de Rusia (POSDR): “No obstante[estas diferentes concepciones en el seno del proletariado], para losnes de la lucha tenemos el deber de marchar juntos, conservando autonomía completa de los partidos […] No nos costará gran esfuerzsuperar sus inconsecuencias porque nuestras concepciones están respdadas por la historia y por la realidad cotidiana. Si en nuestros libros aprendieron a ser socialdemócratas [marxistas], lo aprenderán en nutra revolución”.

En Rusia, además del POSDR, influían sobre el proletariado losocialistas revolucionarios y los intelectuales pequeño burgueses relucionarios, ambas, corrientes antimarxistas. Es a ellos a quienes Lellama inconsecuentes.

Al estallar la Revolución de principios de 1917, muchas fábricquedaron sin los administradores y técnicos que las dirigían. Los ob

ros no tuvieron más remedio que tomar el control de estas fábricas no querían morirse de hambre. En muchos casos, por iniciativa de lmismos trabajadores, liberados ya de la convicción de la necesidad patrón como responsable de la producción, fueron expulsados los aministradores y técnicos lacayos. Se conformaron comités de fábriEstas experiencias al calor de la lucha dieron a los trabajadores rulos conocimientos y la formación que requerían para el manejo de



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producción industrial y de la distribución de los productos. Cotoma del Palacio de Invierno por los Bolcheviques, la industria rutuvo definitivamente controlada por los trabajadores.

La progresiva transformación de los Soviets hacia una instancperior de organización de los obreros y campesinos, determinadlas condiciones de lucha contra la burguesía y la autocracia, fue pcionando su estructura organizativa y sus funciones se fueron ampdo. Al principio los Soviets fueron simplemente comités de huelgmedida que la Revolución avanzaba, se fueron transformando en lganismos representativos de toda la clase obrera, los órganos de larrección y embrión del poder del pueblo, hasta convertirse, despula Revolución de Octubre de 1917, en la base de la forma soviétila dictadura del proletariado, dictadura proletaria cuya expresión primer Estado obrero de la historia de la humanidad, el Estado socta de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Los Sfueron las instancias del poder popular características de los rusos

Este libro contiene fragmentos de dos textos: Los Soviets: su odesarrollo y funciones, de Andreu Nin y Los Soviets en acción, deReed, periodista norteamericano. Ambos textos dan a conocer, dema clara y precisa, el desarrollo y función de las organizaciones bcuales los trabajadores rusos lucharon unidos contra la autocracia ta y contra la estructura económica de explotación que aquella rsentaba. El texto de Nin que editamos –advertimos que no son los

tos íntegros sino extractos de ellos– se enfoca en el origen de los Sy su desarrollo durante los acontecimientos de 1905. El texto de Reed hace énfasis en la forma de los Soviets después de la Revode Octubre de 1917.

J.P.



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LOS SOVISu origen, desarrollo y f Andreu Nin*

ORIGEN Y CARÁCTERDE LOS SOVIETS

La palabra rusa ‘Soviet’ significa sencillamente ‘consejo’ ota’. Sin embargo, es aún corriente la ignorancia del significadeste término a pesar de que la Revolución Rusa lo ha incorpdo definitivamente al vocabulario de todos los países. El térmpues, no tiene nada de misterioso, y el Soviet no es una creapropia exclusivamente del “alma eslava”, como pretenden los resados en hacer aparecer la gran Revolución de Octubre comfenómeno específicamente ruso, sino una forma de organizacicombate que la clase obrera rusa creó y que el proletariado de tlos países ha asimilado.

Es posible que una gran parte de las masas explotadas denozcan el verdadero sentido de este término, pero éstas saben fectamente que fue con la divisa de “todo el poder a los Soviets

el proletariado ruso abatió el régimen capitalista en 1917, y quelos Soviets como base, está edificando una nueva sociedad siplotadores. Y esto, añadido al odio profundo que la burguesía s* Andreu Nin (1892–1947): fue un importante dirigente del Partido Obrerode Unicación Marxista (POUM) durante la Guerra Civil Española. Vivió enMoscú en el transcurso de los años 20 donde conoció de cerca la experiencia degobierno popular de los Soviets.



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por la idea de los Soviets, basta para que las y los trabajadores todo el mundo comprendan que su emancipación está indisolublemente ligada al triunfo de esta idea.

Pero esta comprensión, dictada por el instinto de clase no bastaPara los obreros y campesinos españoles el problema de los Soviadquiere un carácter eminentemente práctico, puesto que sin lacreación de los mismos o de otros organismos análogos, su victorserá imposible. Es, pues, de una utilidad manifiesta que las mastrabajadoras tengan una idea clara del origen, desarrollo, funcionde esas organizaciones.

Los Soviets surgieron en el transcurso de la primera revoluciórusa, la de 1905. Su creación no fue debida a la iniciativa de ningún partido ni grupo político, sino que fue obra espontánea de lamasas durante el desarrollo de los acontecimientos revolucionarioLos Soviets no surgieron de una vez, con las formas relativamendefinidas que tomó octubre de dicho año, cuando el movimientoalcanzó su apogeo, sino que fue el resultado de la transformación los distintos organismos de combate creados en el curso de la luchSe producía un proceso muy original. “La historia –como dice el ecritor ruso Nevski– por medio de las masas obreras que la creabaparecía pasar de una forma de organización a otra, modificándolcada vez, eliminando unos elementos, introduciendo otros, ora simplificando, ora complicando la organización”. En unos puntos, sur

gieron Soviets como un desarrollo natural de los Comités de huelgcreados por los obreros ferroviarios. En otros, el desarrollo de lmismos Comités de fábricas y talleres. Así ocurrió, por ejemplen Ekaterinoslav, Rostov, Novorosisk, Kransnoyarsk, Kiev, LibaReval y otros puntos.

Dichos comités, que en un principio no perseguían otra mi-sión que dirigir el movimiento huelguístico, se transformaban



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paulatinamente, bajo el impulso de los acontecimientos revolunarios, en organismos representativos de toda la clase obrera,se ponían de acuerdo con los representantes de los distintos pdos proletarios estableciendo una coalición de combate. Un origual tuvieron los Soviets en Petersburgo. En un principio se traúnicamente de un sistema de representantes de fábricas, delegpor sus compañeros para tratar con los patronos, recaudar dinpara los huelguistas, etcétera, etcétera.

La aparición de estas organizaciones desempeñó un papelmenso en el desarrollo de la Revolución de 1905. Sin ellas, elvimiento habría escapado al control del proletariado, pues tes de su creación, al frente del movimiento, se hallaban onizaciones de carácter netamente burgués, que habrían desdo al movimiento, privándole de la hegemonía del proletari



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y subordinándolo a la dirección de la burguesía liberal. Sin estaorganizaciones creadas por el proletariado en el fuego de la luchel poderoso movimiento de 1905 no se habría podido transformaen insurrección.

Sea como sea, el hecho es que la clase obrera rusa creó una oganización completamente original que se distinguía de todas lademás organizaciones, tanto por el hecho de que fue iniciativa suyexclusivamente, como por los procedimientos empleados para screación y los fines para que fueron constituidos. Los Soviets socreados únicamente por las clases revolucionarias (obreros, campesinos, empleados); se constituyen, no de acuerdo con la ley, sinpor la vía revolucionaria, por la actividad directa de las masas eplotadas, y se transforman en instrumentos de la insurrección yen el embrión del futuro poder proletario. En realidad, son ya unpoder, la dictadura del proletariado en germen. “Obraban comosi fueran ya poder –dice Lenin– apoderándose por ejemplo, delas imprentas (Petersburgo), deteniendo a los agentes de la policque impedían que el pueblo revolucionario realizara sus derecho Actuaban como poder al incitar al pueblo a no dar dinero al gobierno. Confiscaban los fondos de este último (Comités de Huelgde Ferroviarios en el Sur) y los dedicaban a satisfacer las necesiddes del gobierno, del gobierno popular, revolucionario. “Los órgnos de poder descritos por nosotros –dice asimismo Lenin– era

la dictadura en germen, pues ese poder no reconocía ningún otropoder, ninguna otra ley, ninguna otra norma, procediera de dondeprocediera. Un poder limitado, extralegal, que se apoya en la fueza en el sentido más directo de esta palabra, es la dictadura. Pero fueza en que se apoya y aspiraba a apoyarse este nuevo poder, eno la fuerza de las bayonetas, no la fuerza del dinero ni de cuaquiera de las instituciones anteriores”.



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Nada de esto. El nuevo poder no tenía ni las armas, ni el diro, ni las antiguas instituciones. ¿En qué se apoyaba esta fuerzla masa popular. He aquí el rasgo distintivo fundamental de nuevo poder en comparación con los órganos del poder anterEstos eran órganos de poder de la minoría sobre el pueblo, sola masa de los obreros y los campesinos, aquellos eran los órgdel poder del pueblo, de los obreros y campesinos sobre la minsobre un puñado de agentes policiacos, de nobles y funcionaprivilegiados.

En un principio, los partidos obreros no se dieron cuenta la inmensa importancia de los Soviets. Hasta diciembre, cuala lucha tomó la forma de insurrección armada, no comprendron toda su profunda significación. Hubo incluso tentativas derepresentantes de dichos partidos para retirarse de los nuevosganos del nuevo poder revolucionario. Pero, sin embargo, loscheviques fueron los primeros en comprender la importancialos Soviets como órganos de la insurrección, como el marco apropiado para realizar el frente único de todos los elementos rlucionarios del proletariado, y así, a medida que los acontecimtos tomaban un carácter decisivo, eran los bolcheviques los desempeñaban el papel principal de los Soviets.

Lo que no ofrece la menor duda es que el proletariado rusocrear los Soviets, dio al proletariado internacional una nueva

ma de organización de la clase obrera. Los Soviets son, en realorganismos netamente revolucionarios, inconcebibles en la épde desarrollo pacífico y que persiguen como fin la transformainmediata y radical de todas las relaciones sociales. El prestigesa nueva forma de organización era inmenso entre la masa obrusa. Los trabajadores decían: “Lo que el Soviet diga, haremoen efecto, lo consideraban como su propio gobierno, y sus órd



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y decretos los llevaban a la práctica sin vacilar. Nunca ha existidorganización alguna que contara con una confianza tan ilimitadde las masas y que estuviera ligada con ellas de un modo tan estrcho. Los obreros en las fábricas elegían a sus diputados al SoviEstos debían dar cuenta de su gestión a sus electores y era cosa crriente que el diputado que no cumpliera a satisfacción de estos útimos la misión que le había sido confiada, fuera destituido y susttuido por otro. Como veremos más adelante, al estudiar las estructuras de los Soviets, veremos que casi todos ellos contaban con ucomité ejecutivo para el trabajo corriente; pero todas las cuestionimportantes eran ampliamente discutidas en las sesiones plenariaLos Soviets eran una organización de base y funcionamiento ampliamente democráticos.

Las funciones y el papel de los Soviets se modifican según lcircunstancias del momento. En un principio, como hemos vistono son más que simple comité de Huelga; más tarde, se convierteen organismos representativos de toda la clase obrera; luego, en óganos de la insurrección y en embrión del poder; finalmente, cola victoria de la Revolución proletaria, la forma soviética es la qtoma precisamente la dictadura del proletariado. La forma soviética de la dictadura del proletariado es, pues, la forma del proletariado organizado como poder estatal que da la posibilidad de ldominación política completa y se convierte en un poderoso ins

trumento de transformación social y política.



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LOS SOVIETS ANTESDE LA TOMA DEL PODER

El primer SovietEl primer Soviet surgió en Ivánovo-Vosnesensk.

Ivánovo-Vosnesensk es el centro más importante de la indutextil rusa. El movimiento obrero de dicha ciudad era uno demás antiguos del país. La influencia de las ideas socialistas erafuerte, pero el movimiento se distinguía por una característicapecial: la de que el papel directivo no lo desempeñaba el agitadfuera ni el intelectual, como ocurría a menudo, sino los elemede la propia masa obrera de la localidad. La masa, sin embargogeneralmente inculta, como ocurre a menudo en los obreros derama de la industria, la cual se ha distinguido siempre, en todopaíses, por las pésimas condiciones de trabajo.

El movimiento revolucionario de 1905 tuvo una repercusinmediata sobre esa masa de obreros explotados, sobre todo pproximidad de centros proletarios tan importantes como MoscOréjovo-Zúgeo, donde la fermentación revolucionaria había alzado el grado máximo.

El 12 de mayo estalló en Ivánovo-Vosnesensk la huelga deobreros textiles, que se transformó en una huelga general y de

peñó un inmenso papel en la historia del movimiento obrero ruEl 13, en la orilla de río Talki, en una asamblea de huelguistascual asistieron treintamil obreros, fue elegido un Consejo o Sode 110 delegados, designados para llevar a cabo las negociaccon los patronos y las autoridades en nombre de todos y para lrección de la huelga. Ese comité no era un comité de huelga ordrio, tanto por su forma de elección como por su carácter. Desd



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primer momento se estableció un estrecho contacto entre el Soviey el Partido Socialdemócrata, cuyo comité local inspiraba todas lresoluciones del nuevo organismo.

El Soviet, bajo la influencia de los acontecimientos que se desarrollaban en el país, adquirió rápidamente importancia extraordinaria y un carácter revolucionario definido. Su fuerza y su pretigio eran inmensos. En realidad, durante ese período existió ya eIvánovo-Vosnesensk el poder dual. No se podía imprimir nada enninguna imprenta sin la autorización del Soviet. Este se negó, poejemplo, a autorizar la impresión de un documento en que un representante de la autoridad se dirigía al nuevo organismo creadpor los trabajadores. Mientras que el Soviet sometía a su controla publicación de todos los documentos que emanaban de la clasenemiga, publicaba libremente todo lo que se le antojaba. La propaganda socialdemócrata, por ejemplo, se efectuaba absolutamente sin ningún obstáculo. El Soviet utilizaba libremente los local



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públicos, sin pedir permiso a nadie, para sus asambleas y mítEste derecho se lo había conquistado por la fuerza, y nadie ni pudo impedir que la clase obrera lo ejerciera, ni aun la mataorganizada del 3 de julio por las autoridades zaristas. Era, nralmente, el Soviet el que dirigía la huelga. No se admitía ninna negociación separada; nada podía volver al trabajo si no eraacuerdo del Soviet. Éste organizó el servicio de protección de lbricas y de los bienes de la ciudad, y durante todo el período enfue dueño absoluto de la ciudad, y durante todo el período en fue dueño absoluto de la población no se registró ni un solo actrobo o de saqueo. Fue precisamente cuando se disolvió el Sovieempezaron los asaltos a las tiendas.

El Soviet tomó decisiones de carácter netamente político, fueron transmitidas al ministro de la Gobernación en un mensque firmaron todos los diputados al Soviet, a cuya firma se añla de millares de huelguistas. En dicho mensaje se reclamaba bertad de palabra, de reunión y de asociación y la convocatoriuna asamblea constituyente. El Soviet exigió la formación de ubunal para juzgar a los responsables de las cargas de la fuerza ca contra los huelguistas el día 3 de julio, organizó comisionesrecolectar fondos para los pardos, destacamentos para guardafábricas, etcétera, etcétera. Inmediatamente después de su consción, se organizó una Mesa, compuesta de cinco miembros, que

un organismo indudablemente análogo a los Comités Ejecutielegidos en los Soviets que surgieron posteriormente en distipuntos del país.

Las asambleas plenarias se celebraban todas las mañanas nueve. Una vez terminada la sesión, empezaba la asamblea gral de los obreros, que examinaba todas las cuestiones relacioncon la huelga. Se daba cuenta de la marcha de esta última, de



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negociaciones con los patronos y las autoridades, etc. Después dla discusión, eran sometidas a la Asamblea las proposiciones prepradas por el Soviet. Luego, los militantes del partido pronunciabadiscursos de agitación sobre la situación de la clase obrera, y el mtin continuaba hasta que el público se cansaba. Entonces, la multitud entonaba himnos revolucionarios y la Asamblea se disolví Así repetía todos lo días.

Después de las matanzas del 3 de julio, las Asambleas se intrrumpieron durante dos semanas, y, al reanudarse, acudieron ya la primera reunión hasta cuarentamil obreros. A las Asambleas sguieron manifestaciones pacíficas y mítines en el centro de la cidad. El 25 de julio, el Soviet decidió dar por terminada la huelgen vista de que el hambre empezaba a reinar en los hogares obrery de que los patronos habían hecho concesiones considerables.

El día en que se dio por terminada la huelga, el Soviet deIvánovo-Vosnesenk se disolvió espontáneamente, pero los miembros del mismo siguieron desempeñando un papel de representantes de los obreros. En todas las fábricas éstos seguían considrándose como a sus “diputados”, y en todos los conflictos con ladministración actuaban como representantes de la masa obrera, los patronos aceptaban este hecho.

El Soviet de petersburgo

Petersburgo era no solamente la capital oficial del país sino elcentro del movimiento revolucionario. Era allí donde había el proltariado más activo y dotado de un espíritu de combate más ardiente. De allí partía la iniciativa, el pensamiento revolucionario incluso en los días de diciembre en que, mientras la capital permanecpasiva, en Moscú se desarrollaba una lucha sangrienta. Petersburgestaba ligado a mil hilos con el resto del país, y esta circunstancia



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ayudaba a asimilarse la experiencia de los demás centros proley los resultados obtenidos, a elaborarlos en su laboratorio revolnario, y dar, finalmente, en octubre de 1905, la forma más perfde organización, el Soviet de diputados obreros, que ejerció unfluencia enorme sobre el movimiento revolucionario de todo el

El Soviet surgió en el momento de la lucha revolucionaria aguda. La idea de su creación fue lanzada el 12 de octubre en Asamblea celebrada en el instituto Tecnológico. Pero las masarealidad, lo habían ido ya creando al desarrollar, desde los comzos de la Revolución, las distintas formas de representación ebricas y talleres. El 13 de octubre, el Soviet celebra su primeranión plenaria. Uno de los principales acuerdos adoptados por dprimera sesión es el de dirigir un manifiesto a todos los obrerobreras, en el cual, entre otras cosas, se dice:

No se puede permitir que las huelgas surjan y se extingan de unmodo esporádico. Por esto hemos decidido concentrar la direc-ción del movimiento en manos de un comité Obrero Común.Proponemos a cada fábrica, a cada taller y a cada profesión queelija diputados a razón de uno por cada quinientos obreros. Losdiputados de cada fábrica o taller constituyen el comité de fábri-ca o de taller. La reunión de los diputados de todas las fábricas ytalleres constituyen el comité general de Petersburgo.

Este manifiesto lleva la firma de: “Soviet de diputados de labricas y talleres de Petersburgo.” Al principio, los obreros, al elsus diputados, los consideran como sus representantes en el code huelga general, que se llama, ora “Soviet Obrero General”sencillamente “Soviet Obrero”, pero ya desde el primer momempieza a generalizarse el término “Soviet de diputados obre



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conocido ahora en todo el mundo, y que aparece ya en el primenúmero de lasIzvestias (las noticias), órgano oficial del Soviet.

Ni a un sólo de los participantes en el movimiento se le ocurría la inmensa importancia que tenía el papel que estaba llamadadesempeñar la organización a la cual mandaban sus representanteSin embargo, los militantes más conscientes comprendían perfectamente que no se trataba de un simple comité de huelga y que smisión era la huelga política, no sólo para conseguir la jornada lboral de trabajo de ocho horas, sino para luchar por la convocatorde la asamblea constituyente y la consecución de la libertad polític

A mediados de noviembre, el número de diputados al Soviet erde 562, delegados de 147 fábricas, 34 talleres y 16 sindicatos. Desos diputados, 508 representaban a las fábricas y a los talleres y a los sindicatos. En conjunto representaba a no menos de 250 miobreros, esto es, a la mayoría aplastante del proletariado de la captal. Al frente iban, como siempre, los metalúrgicos, que constituyela avanzada obligada del movimiento revolucionario. El número dsus diputados ascendía a 351; les seguían los obreros textiles, co57 diputados. Luego los tipógrafos, con 32; los trabajadores de madera, con 23, etcétera. Pero en el Soviet estaban representadoasimismo los empleados, los funcionarios de Correos y telégrafoslos partidos revolucionarios. De los 50 miembros que componían comité ejecutivo, 28 representaban a fábricas y talleres, 13 a los si

dicatos y 9 a los partidos socialistas. El Soviet de Petrogrado realiba –según la definición de Lenin– la unión efectiva de la socialdmocracia revolucionaria: en esto consistía su fuerza y su debilidaSu fuerza, porque agrupaba a todo el proletariado; su debilidad sveía neutralizada, hasta cierto punto, por las indecisiones y las valaciones propias de la pequeña burguesía radical.



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Petersburgo era en 1905 el centro de todos los acontecimieny en la capital misma, el Soviet era el centro de todo el movimto, y esto, ante todo, como ha dicho Trotski, “porque esta orgazación proletaria, puramente de clase, era una organización dRevolución como tal. El Soviet de diputados obreros –dice el fue su presidente– surgió como una respuesta a la necesidad obva, engendrada por el curso de los acontecimientos, de una orgzación que fuera una autoridad, sin tradiciones, agrupaba a todamasas dispersas de la capital, uniera a las tendencias revolucionen el proletariado, fuera capaz de iniciativa, se controla automámente a sí misma y, sobre todo, que pudiera surgir de bajo tierrveinticuatro horas”.

Ninguno de los partidos revolucionarios existentes, ningunolos sindicatos, poco numerosos por otra parte, que se habían fudo, podía desempeñar este papel. A pesar de la enorme influeque ejercía entre la masa obrera, los Bolcheviques y Menchevagrupaban de dos a tres mil miembros a fines de vera-no y de cinco a seis mil a fines de año. Con ayudadel Soviet, la socialdemocracia arrastraba a toda lamasa.

El Soviet era un centro que arrastraba a la or-ganización y a la lucha, bajo la dirección de la so-cialdemocracia, no sólo el proletariado, sino

también a los sectores pequeñoburguesesde la población.En el momento en que surgió

el Soviet, existía en Petersburgo laDuma Municipal, que era únicamen-te un órgano nominal de administra-ción municipal, cuyas facultades el



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gobierno zarista cercenaba sistemáticamente. Ese organismo era egido exclusivamente por la clase dominante. Uno de los primeros atos del Soviet fue presentar una serie de reivindicaciones a la DumMunicipal. Estas reivindicaciones eran las siguientes:

1. Tomar medidas inmediatas para regular el abastecimiento de lamasa obrera de la capital.

2. Conceder los edificios públicos para asambleas obreras.3. Abolir la concesión de locales y de subvenciones a la policía, lo

gendarmes, etc.4. Entregar dinero de la Caja Municipal al Soviet para el armamen-

to del proletariado de Petersburgo, que luchaba por la libertaddel pueblo.

Estas demandas fueron entregadas a la Duma, durante una delas sesiones de esta última, por una delegación especial del SoviNi que decir tiene que los miembros de la Duma permanecieronsordos a las reivindicaciones del proletariado. Prometieron examnar la cuestión en una sesión especial, pero la cosa no pasó de aqu

El programa político del Soviet estaba inspirado por la socialdmocracia. Sus consignas fundamentales eran el derrumbamiento dla autocracia, la asamblea constituyente, la república democráticala jornada laboral de ocho horas.

Dirigió tres huelgas, las generales de octubre y noviembre la de correos y telégrafos. Lanzó medio millón de proclamas, llvó a la práctica, por la vía revolucionaria, la jornada de ocho horen fábricas y talleres, proclamó la libertad de prensa y de reuniórealizándola por medio de la confiscación de las imprentas y de llocales públicos: organizó el auxilio a los obreros parados; se pual frente del movimiento que arrebató a la autocracia el manifiest



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su variedad. Pero más tarde, como ya se ha dicho, se compraron amas. La milicia estaba compuesta de seis mil obreros, la instituciófuncionaba normalmente de un modo abierto, hasta tal punto quelos periódicos publicaban los números de los teléfonos de los puetos de la milicia a los cuales podía dirigirse la población en caso necesidad urgente.

El 26 de noviembre fue detenido Jrustaliev, primer presidentedel Soviet. Este contestó con el siguiente acuerdo: “El presidendel Soviet de diputados obreros ha sido hecho prisionero por egobierno. El Soviet elige a otro presidente y sigue preparándospara la insurrección.” En efecto, fue elegido Trotski. Pero la viddel Soviet fue ya de breve duración.

El 2 de diciembre el Soviet dirigió un manifiesto al puebloinvitándolo a retirar el dinero de las cajas de ahorros y del banco del Estado, exigiendo el pago en oro. El llamamiento halló ugran eco en la población, lo cual representó un serio golpe para gobierno.

El Soviet se había convertido en una gran fuerza. Bajo su influencia se creaban organismos análogos en otras poblacione Acercábase el momento en que debía unirse con los campesinopara la acción decisiva, pero la democracia revolucionaria, reprsentada en el Soviet, y los grupos de la oposición burguesa liberse contentaron con la victoria de octubre y a espaldas del puebl

se entendieron con el zar. Este dio confianza y fuerza a la autocracia, la cual acabó por vencer. El día 3 de diciembre la fuerzpública cercó el edificio en que se hallaba reunido el comité ejcutivo del Soviet y procedió a su detención. Sus miembros fuero juzgados y condenados a la deportación a Siberia. Posteriormense realizaron tentativas para crear un “Soviet clandestino”; perla tentativa no tuvo éxito. Es verdad que siguió funcionando un



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comité ejecutivo, pero en realidad se trataba de una organizapuramente nominal que había perdido toda su fuerza y su prtigio. Ese comité ejecutivo fue detenido a su vez en la primade 1906. El Soviet de Petersburgo no fue, como el de Moscúórgano de la insurrección armada, lo cual se explica en gran ppor la influencia predominante que los mencheviques ejercíanel mismo.

El Soviet de moscúEl Soviet de Moscú surgió más tarde, incluso que algunos

provincias. Formalmente, empezó su existencia el 22 de novbre, pero la idea de su creación surgió ya en septiembre, durla huelga de tipógrafos que provocó un poderoso movimientosolidaridad de la clase obrera de Moscú, con mítines, manifestnes, choques con las tropas y barricadas. Los tipógrafos eligier



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comité que fue en realidad el embrión del futuro Soviet. En efectoese comité de huelga se convirtió en un organismo revolucionarique llevó a la práctica, por su voluntad, la libertad de reunión y dpalabra, organizó asambleas en locales públicos, consiguiendo depués su legalización, y presentando después una serie de reivindcaciones de carácter político. En un principio, cada taller eligió udiputado. Después se estableció la norma de un diputado por cadveinte obreros. El comité de tipógrafos se convirtió, en el curso dlos acontecimientos, en Soviet de Moscú. En los últimos días de sexistencia, éste contaba con doscientos diputados, que representaban a más de cienmil obreros, es decir, a la mayoría aplastante de clase obrera de Moscú.

La necesidad de crear el Soviet nació de la circunstancia de quexistiera un comité de huelga –que dirigía el movimiento políticcontra la autocracia– compuesta principalmente de elementos burgueses, con una reducida representación de los obreros. Lo mimo había debido hacerse en otras poblaciones, como por ejemploSamar y Kiev. Se hicieron distintas proposiciones de unificacióestimuladas incluso por una parte de los obreros, que estimabanimprescindible la colaboración de todos los esfuerzos para luchcontra el enemigo común. (...) El Soviet de diputados obreros representó un gran paso adelante en el desarrollo del movimiento, convirtiéndose en órgano de la insurrección. El Soviet de Moscú tom

una actitud mucho más decidida que el de Petersburgo con respectal armamento y a la labor de propaganda y organización entre losoldados. Funcionó incluso, aunque efímeramente, un Soviet de sodados, que no celebró más que una reunión. En el Soviet los socilistas revolucionarios y los mencheviques desempeñaron un papsecundario. El papel principal lo desempeñaron los bolcheviquecuya influencia era predominante, a pesar de que formalmente lo



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tres partidos tenían representación absolutamente igual en el coejecutivo (dos diputados cada uno).

Además del Soviet central existían Soviets en las barrdas, las cuales tomaron una participación muy activa en todmovimiento.

El Soviet se puso al frente de la insurrección de diciebre. La decisión de ir a la huelga general adoptada por el ParSocialdemócrata fue refrendada por el Soviet y las Asambleasrales celebradas en cada fábrica.

El Soviet gozaba, como en Petersburgo, de un gran prestentre las masas trabajadoras. En las elecciones de los diputadmismo participaba literalmente toda la clase trabajadora de Moque habitualmente acompañaba a los diputados a la primera nión en medio de un entusiasmo delirante. Para formarse una del entusiasmo de los trabajadores y de la participación de losmos en las elecciones, son muy características las palabrasnunciadas por un viejo fundidor del barrio de Lefórtovo, elepor sus compañeros. “Camaradas -decía- sólo ahora comprendfuerza que puede llegar a tener la unión de la clase obrera. He que en la acción colectiva en la lucha con nuestros enemigosburgueses, podemos obtener todos los derechos y todas las libdes. Yo, que ya soy viejo, ni tan siquiera podía soñar con ser elpara defender nuestros derechos obreros y llevar el título hon

de representante del Soviet de diputados obreros; pero creo qupodremos pasarnos de una lucha sangrienta con nuestros oprres, y por esto, vuestros elegidos os pedimos que sostengáis carmas en la mano vuestros Soviets de diputados obreros.”

Sin los Soviets, la organización del Partido no hubiera podarrastrar a las masas a la lucha armada ni crear aquella atmóde combate y de solidaridad que alentó a inmensas masas obr



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Los Soviets en provinciasLa mayoría de los Soviets de provincias fueron organizados e

noviembre y algunos incluso en diciembre, bajo la influencia inmdiata del que había sido creado por la clase obrera de PetersburgTanto éste como el de Moscú habían mandado, por otra parte, de-legados a provincias que fomentaron activamente la constitución ddichas organizaciones.

Claro está que la labor de estos representantes habría sido estéren el caso de no existir ya previamente condiciones favorables. Eefecto, ya desde mucho antes existían por doquier organizacioneembrionarias de las cuales surgieron más tarde los Soviets. Bajoinfluencia de los acontecimientos, del desarrollo de las huelgas, las agresiones de la fuerza pública, de la situación revolucionaria neral existente en el país, esas organizaciones embrionarias se furon transformando rápidamente. Y es que no hay nada tan fecundcomo la Revolución. La revolución ofrece un campo de acción inmenso a la actividad creadora de las masas, las cuales, en esas ccunstancias, llevan a la práctica en pocas horas todos los planesproyectos que los dirigentes del movimiento han meditado durantdías y semanas en sus despachos.

Se poseen pocos datos sobre el origen y el carácter de los Sovi

en provincias. Unos se acercan por su tipo al de Moscú, otros al dPetersburgo. En algunos sitios se convierten en el poder auténticoLos campesinos crean también, bajo la influencia de la alianza campesina, organismos revolucionarios de masas que en muchas ocsiones llevan asimismo el nombre de Soviets y se ponen en relacicon los Soviets obreros. Todos ellos disponen de grupos armadobien organizados y sujetos a una disciplina rigurosa.



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En muchos puntos, tanto patronos como autoridades trataoficialmente con el Soviet, al cual dirigen documentos oficiEn Kostromá, por ejemplo, bajo la presión del Soviet, la DuMunicipal concede un subsidio a los huelguistas y mil rublos los parados. Bajo esa misma presión las autoridades se vieron gadas a poner en libertad a cuatro obreros que habían sido detdos. Las mujeres –y no fue ésta una de las características menoportantes del movimiento– tomaban una participación activísen la vida de los Soviets.

Donde éstos tomaron un carácter más acentuadamente revlucionario convirtiéndose, en realidad en órganos del poder, en Siberia. Esto se explica, sobre todo, por la influencia de losdados que regresaban del frente del extremo oriente, que contuían Soviets de soldados y establecían un estrecho contacto los organizados por los obreros. En Krasnoyarsk, por ejempl

Soviet procedió a la expropiaciónde los ferrocarriles y de la tierra ycolocó enteramente bajo su controlel servicio de correos y telégrafosMedidas de análogo carácter fue-ron tomadas en otros puntos deaquella región. En algunos puntos,los elementos reaccionarios consi-

guieron temporalmente desorga-nizar el movimiento, pero la masaobrera reaccionaba enérgicamentereduciendo al silencio y a la inac-tividad las bandas de “cien negros”.

En general, los Soviets de pro-vincias ejercían el control absoluto



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sobre las imprentas y la prensa. Cuando no publicaban un órganopropio, se editaba un boletín del Partido Socialdemócrata ObreroRuso, que lo reemplazaba, y que trataba las mismas cuestiones coel mismo espíritu. Cada Soviet que surgía convertíase en un central cual acudían los obreros e incluso los campesinos de los pueblvecinos a exponer sus quejas y a buscar consejo.

No existe una lista completa de los Soviets de diputados obreros que funcionaron en Rusia durante la Revolución de 1905. Conrespecto a los Soviets de Campesinos y Soldados, los datos que poseen son todavía más incompletos. Sin embargo, lo que se puede afirmar sin ningún género de dudas es que desempeñaron ungran papel. Todos los documentos de la época lo atestiguan de umodo irrefutable. No obstante, cuando en 1927 la oposición comunista rusa preconizaba la creación inmediata de Soviets en Chiny, en apoyo de su criterio, recordaba el papel desempeñado por dchas organizaciones en la Revolución Rusa de 1905, Stalin, para jutificar su política menchevique de infeudación del proletariado Kuomintang burgués, afirmaba con su proverbial desprecio de lverdad histórica que en 1905 no había surgido más que dos o treSoviets cuya influencia en el desarrollo de los acontecimientos hbía sido casi nula. Ahora bien, entre mayo y octubre se constituyron Soviets, además de Ivánovo-Vosnesensk, Petersburgo, Moscen las siguientes poblaciones: Novorosisk, Rostov, Samara, Kie

Chitá, Irkustk, Krasnoyarsk, Kostromá, Sártov, Mitischí, TverOriéjovo-Zúyevo, Viatka, Ekateringburg, Nadéjadino, VódkinoOdesa, Nikoláiev, Kremenchuck, Ekaterinbug, Yúsovka, MariúpoTanganrog, Bakú, Bielostok, Smoliensk, Libau y Réval.

Hay que tener en cuenta que esta lista, como hemos hecho yanotar, es muy incompleta, y que el número de Soviets creados fumucho mayor. A pesar de todo, esta lista incompleta da una ide



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de la magnitud del movimiento. Los Soviets no surgieron en región determinada, sino en toda la inmensidad de la tierra rutanto en el norte como en el sur, en el centro del país, como enlejanas regiones de Siberia, aunque, naturalmente, los que despeñaron el papel más importante fueron los de Petersburgo yMoscú.

Estructura de los SovietsLa fábrica era la ciudadela general de los Soviets. Las no

de elección variaban mucho según las poblaciones, pero en tpartes participaban en la elección de los diputados absolutamtodos los obreros, sin excepción ni restricción de ninguna clasetrabajaban en el establecimiento. En Petersburgo y Moscú se gían diputados por cada 500 obreros; en Odesa, uno por cada 1en Kostromá, uno por cada 25; en otros, no había ninguna fordefinida. En todo caso, los Soviets representaban en todas parla mayoría aplastante de la clase obrera, y en Petersburgo, MosEkaterinburg a la casi totalidad. Su prestigio era tan grande qualgunas poblaciones pretendieron elegir Soviets incluso los pequcomerciantes.

¿Cómo se organizaron? En Petersburgo, Rostov, Novorosisotras localidades se procedió a elegir inmediatamente Sovietnerales; en Moscú, Odesa y otros puntos se elegían paralelam

Soviets de barriada. En Moscú, éstos mandaban representanterectos al Soviet general o central: en otras localidades se proprimeramente a elegir Soviets de barriada, cuya reunión formaSoviet local.

Por regla general se designaba un comité o Comisión Ejecuo una Mesa de discusión. El presidente, el secretario y otros caimportantes eran elegidos por la Asamblea General del Soviet.



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Se creaban órganos auxiliares, tales como comisiones de ayuda los parados, de organizaciones de mítines, secciones de publicciones y propaganda, de hacienda, etcétera. Y allí donde dirigían insurrección o se convertían en órganos de poder, se creaban gruparmados o milicias y se procedía al nombramiento de los jefes de instituciones que el Soviet tomaba bajo su control (correos, telégrfos, ferrocarriles). Algunos tales como el Soviet de Krasnoyarsk yChitá, en cuya constitución, como hemos visto, desempeñaron unpapel tan importante los soldados que regresaban del frente, disponían de fuerzas armadas considerables.

No todos los Soviets contaban con prensa propia. Algunosutilizaban prensa legal o la del partido. Lasizvestias (Noticias) seimprimían –como hemos visto– tomando posesión de las imprentas. Todos los Soviets lanzaban hojas y proclamas que ejercían uextraordinaria influencia desde el punto de vista de la agitación

En general, no había ninguna norma fija de organización.Las formas de la misma, así como su carácter y funciones, se ibconcretando según las circunstancias.(...)

LOS SOVIETS COMOÓRGANOS DE PODER

Los Soviets y la revolución de febreroLa Revolución de 1905 fue vencida, pero la clase obrera no pedió ni por un momento la esperanza en la victoria. Como se hadicho repetidamente, la insurrección de 1905 no fue más que unensayo general de la Revolución de 1917. En 1905 las masas eraaún inexpertas; el partido Bolchevique empezaba únicamente a fomar sus cuadros. Habían surgido los Soviets en numerosos punto



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del país, pero no existía una acción coordinada entre ellos. Setentó convocar un congreso general de los Soviets, cuya reuhubiera podido tener inmensa trascendencia, pero la cosa no pde proyecto. Por otra parte, si bien en muchos puntos los camsinos acudían a los Soviets en demanda de apoyo, no existió lnexión debida entre el movimiento proletario y los levantamiedel campo. Hemos visto también que sólo en Siberia y de una nera efímera en Moscú, se constituyeron Soviets de soldados. Testas circunstancias contribuyeron poderosamente al fracaso dRevolución. Pero este fracaso no tenía nada de sorprendente. Eprimera vez que el proletariado ruso se lanzaba a la lucha en escala contra la autocracia. El proletariado en la experiencia de aprender. Y se puede afirmar que la lección de aquellos graacontecimientos no cayó en el vacío. La experiencia de los Sode 1905 desempeñó, en 1917, un papel de primer orden. A pesalos doce años transcurridos, la idea de los Soviets seguía vivacorazón de los obreros rusos y así, cuando en febrero de 1917obreros y soldados de Petrogrado se lanzaron a la calle y derruron el poder secular de la autocracia, la idea de los Soviets rescon nuevo vigor.

Como es sabido, el zarismo fue derribado por un movimieespontáneo de las masas trabajadoras. Por una serie de circuncias, y muy particularmente a consecuencia del hecho de que e

momento de estallar la Revolución las figuras más eminentesbolchevismo se hallaran en la cárcel, en la deportación y en etranjero, el movimiento se halló sin dirección, y el poder, en vepasar a la clase trabajadora, pasó a las manos de la burguesía, rsentada por la Duma de Estado, esa misma burguesía que cuandiniciaron los acontecimientos, incitaba al gobierno del zar a ahel movimiento en sangre. La Revolución se efectuó sin los So



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pero el mismo día en que la burguesía liberal procedía al nombramiento del Gobierno Provisional, se constituía el Soviet de diputados obreros de Petrogrado. Bajo el impulso de los acontecimientola organización, creada en 1905 y destruida por la autocracia victriosa, surgía nuevamente.

Por las circunstancias que hemos mencionado más arriba, en esprimer Soviet, como en todos los que surgieron aquellos días en catodo el país, los bolcheviques ejercían una influencia secundaria. apoderó de la dirección de dichos organismos la pequeña burguesradical, los mencheviques y socialistas revolucionarios que represtaban, con su fraseología rimbombante y huera, la ideología confusa, los anhelos y aspiraciones indefinidos de los primeros momentde la Revolución. El orador brillante se llevaba fácilmente a las mtitudes y el representante pequeño burgués no pasaba, como siempre, de la fraseología revolucionaria, para hacer en realidad el juede los enemigos del proletariado. Lo más lógico era que los dirigetes de los Soviets se hubieran puesto al frente de la Revolución y etregado el poder a la clase obrera, con cuyo único esfuerzo había siposible destruir la autocracia. Pero, temerosos ante el movimiento las masas, consecuentes, por otra parte, con la opinión que habíasostenido siempre de que hallándose la Revolución en su fase demcráticoburguesa el poder había de pasar naturalmente a la burguesía, lo entregaron sumisamente a esta última. Y la burguesía –ni qu

decir tiene– se apresuró a aceptar el encargo con el fin de hacer todlo posible para decapitar la Revolución y evitar que las masas arrtraran en su impulso a los privilegiados de la propiedad agraria y la burguesía industrial. El Soviet se limitó a mandar a uno de sus rpresentantes, Kerenski, al gobierno provisional y a nombrar una cmisión de control, encargada de vigilar la actuación de este último



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Pero la Revolución tiene su lógica, y a pesar de todos losfuerzos de los dirigentes, los Soviets se desarrollaron con un ímirresistible, y gobernar contra ellos se hizo cada vez más difícilcircunstancia creó lo que se ha venido a llamar dualidad de podes decir, la existencia paralela de dos poderes: el de la burguespresentado por el Gobierno Provisional, y el de las masas trabajras, representado por el Soviet; la historia de la Revolución entbrero y octubre no es más que la de la pugna entre estos dos podSegún la correlación de fuerzas, esto es, según la mayor o la mpujanza del proletariado y de la burguesía, la lucha toma uno u carácter: ora el Gobierno Provisional ataca y el Soviet se ve obla ceder, ora es éste el que toma la ofensiva y aquél el que se ve pdo a hacer concesiones. Relatar en detalle los episodios de esta ltan rica en enseñanzas, nos obliga a salirnos de los límites quehemos impuesto y a dar a este trabajo un carácter distinto del le hemos asignado. Al lector que quiera estudiar fundamentalmese período interesantísimo, lo remitimos a la magníficaHistoria dela Revolución Rusa , de Trotski, publicada recientemente en españoNuestra misión ha de reducirse a señalar el desarrollo, en líneanerales, de los Soviets, hasta convertirse en órganos del poder.

¿Cuál era la actitud de los Bolcheviques respecto al nuevo men? Los elementos dirigentes que se hallaban en Petrogrado momento de la Revolución no supieron comprender, desde el pri

momento, la importancia de los acontecimientos. Estos, en redad, los cogieron desprevenidos y la insurrección fue obra direclos militantes de base. Ya triunfante la Revolución, los nuevosmentos que habían llegado de la deportación –y muy especialmStalin y Kámenev– practicaron una política netamente oportuta. Esclavos del esquema de la “dictadura democrática de los oros y campesinos”, preconizada por Lenin desde 1905 y superad



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por los acontecimientos, se atrincheraron en sus antiguas posicionespropugnaron una política que consistía en no salirse del marco de Revolución democrático-burguesa y apoyar al Gobierno Provisionen la medida en que éste realizara dicha Revolución.

Lenin llegó a Rusia el 3 de abril y puso fin a esas vacilaciones; tanto él, que se hallaba en Suiza, como Trotski, que estaba e América, coincidieron en la apreciación de los acontecimientos. Y se dio el caso curioso de que los dos grandes jefes de la Revolucique durante años habían estado separados por su diferencia de aprciación de la Revolución Rusa, coincidieron en el momento decisivmientras que la “vieja guardia bolchevique”, sin comprender nada las enseñanzas del maestro, adoptaba una actitud inequívocamentoportunista.

Lenin, ya desde su retiro a Suiza, apreció desde el primer momento el verdadero carácter de los acontecimientos. Al recibir la nticia de la Revolución de Petrogrado, y del nombramiento del gobieno provisional, escribía:

La composición de este gobierno no tiene nada de casual. Setrata de representantes de la nueva clase que ha subido al poderpolítico en Rusia, la clase de los terratenientes capitalistas y de laburguesía, que dirigen económicamente nuestro país desde hacemucho tiempo, y tanto durante la Revolución de 1905-1907,como en el período de contrarrevolución del 1907-1914 y, sobretodo, con particular rapidez durante la guerra de 1914-1917 se haorganizado con rapidez extraordinaria políticamente, tomandoen sus manos la administración local, la instrucción pública, laDuma, los comités industriales de guerra, los distintos congre-sos, etc., etc. Esta nueva clase se hallaba ya “casi completamen-te” en el poder en 1917; por eso basaron los golpes asestados alzarismo para que éste se desmoronara, cediendo el sitio a la bur-guesía. La guerra imperialista, que exige una tensión de fuerzas



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inverosímiles, ha acelerado hasta el punto la evolución de laatrasada Rusia, que “de una vez” (en realidad aparentemente)hemos alcanzado a Italia, a Inglaterra casi a Francia y obte-niendo un gobierno “parlamentario”, “de coalición”, “nacio-nal” (este es propio para seguir la guerra imperialista y enga-ñar al pueblo). Al lado de este gobierno –que en el fondo no esmás que un simple criado, desde el punto de vista de la guerra,de las “firmas” de las multitudinarias Francia e Inglaterra– hasurgido un nuevo gobierno, no oficial, poco desarrollado aún,relativamente débil, un gobierno obrero que expresa los intere-ses del proletariado y de los elementos más pobres de la pobla-ción urbana y rural: el Soviet de diputados obreros y Soldadosde Petrogrado.

De esta apreciación de la situación se desprende toda la táca seguida con rigurosa consecuencia por Lenin. Este, al llegPetrogrado, resuelve contra la posición adoptada por los dirigedel partido y desarrolla sus ideas fundamentalmente en sus fam“tesis de abril”, que sirvieron de base a toda la actuación postdel partido y los condujeron al poder. He aquí las ideas esenles de dichas tesis; después del derrumbamiento de la autocracpoder ha pasado a manos de la burguesía. La guerra sigue sieuna guerra imperialista, y por esto el proletariado no puede tensin traicionar al socialismo. Hay que “explicar pacientemente”masas que es imposible terminar la guerra de un modo verdad

mente democrático sin derrumbar al capitalismo. La particularicaracterística del momento consiste en la dualidad de poderesque “al lado del Gobierno Provisional, gobierno de la burguese ha formado otro gobierno, en estado aún muy embrionarioimportancia creciente cada día: los Soviets de diputados obrersoldados. No se puede otorgar ninguna confianza ni prestar ayo al Gobierno Provisional: todo el poder, de abajo a arriba, h



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pertenecer a los Soviets. En el período actual el partido bolcheviqestá en minoría. La mayoría de los Soviets pertenece a los menchviques y socialistas revolucionarios, que se hallan bajo la influende la burguesía, que la sostienen, que temen romper con los capitalistas y tomar el poder en sus manos. Para el período inmediato, consigna “todo el poder a los Soviets” no significa todavía la dictdura del proletariado, sino que equivale a exigir el poder a manos la democracia perqueñoburguesa, con el fin de separarla de la buguesía. Mientras estamos en minoría, hay que poner al descubiertla política conciliadora de los partidos pequeñoburgueses, explica las masas sus errores, y, mediante una labor paciente y tenaz entlos obreros, soldados y campesinos, conquistar su confianza, coquistar la mayoría en los Soviets”. Lenin confiaba convencer a lmasas de la razón que asistía a los bolcheviques, y una vez obteniresultado, llevarlas a la conciencia de la necesidad de la dictadudel proletariado como única fuerza capaz de poner fin a la guerrimperialista y solucionar la crisis económica del país.

La experiencia había de demostrar de una manera brillante la justeza de la táctica preconizada por Lenin, que venció rápidamete las resistencias con que tropezaba y consiguió que la inmensmayoría del partido aceptara su punto de vista. Paso a paso, loBolcheviques van poniendo al descubierto el papel de menchevques y socialistas revolucionarios y conquistándose la confianza

las grandes masas. Uno tras otro, los Soviets van cayendo en mnos de los bolcheviques. Este magnífico resultado se obtiene nde una manera mecánica, sino por la aplicación acertada de untáctica justa. El coronamiento de esta paciente labor es conquistde la mayoría en el Soviet de Petrogrado. Este hecho tiene su importancia decisiva para el porvenir de la Revolución. Petrogrado el centro del movimiento revolucionario del país; es allí donde



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halla concentrado el proletariado más consciente y combativRusia. Petrogrado es, por otra parte, la capital. La conquistaSoviet de esta última había de tener una importancia decisiva, yefecto, la tiene. A partir de aquel momento, la Revolución tomritmo acelerado. El Gobierno Provisional va perdiendo todospuntos de apoyo. El movimiento de las masas se hace irresistLos campesinos exigen la tierra, sin más demoras y aplazamieTodo el mundo pide la paz y la constitución de un gobierno vederamente popular. Este gobierno no puede ser más que el deSoviets, la consigna “Todo el poder para los Soviets”, lanzadalos Bolcheviques, es sostenida ahora por millones de obreros, sdos y campesinos. El proletariado de Petrogrado, corazón y cerde la Revolución, arde de impaciencia. Los dirigentes del PaBolchevique preparan febrilmente la acción decisiva. El Sovicomo en 1905, el centro en que converge todo el movimientocreación del comité Militar Revolucionario indica que de la de la propaganda se pasa ya a la de organización. El comité MRevolucionario concentrará en sus manos la dirección técnicamovimiento.

Todo está maduro para la toma del poder. Falta sólo fijarmomento de la acción. Después de dudas y vacilaciones se defijarlo, de acuerdo con la proposición de Trotski, para el día ense reúna el Segundo Congreso de los Soviets. Así, a la toma vio

del poder, dirigida y organizada por el Soviet de Petrogrado, sela consagración del acto de fuerza por el voto y el consentimienlos representantes de toda la masa trabajadora de Rusia.



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idea de los Soviets es patrimonio de todo el proletariado internanal. Es evidente que la Revolución proletaria tendrá distintas mlidades en los demás países, pero está fuera de duda –la experirusa lo demuestra de un modo irrefutable– que no podrá prescide organizaciones substancialmente iguales a los Soviets.(...)



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LOS SOVIETS E John Reed*

Entre el coro de insultos y falsedades dirigido contra los Sorusos por parte de la prensa capitalista se puede escuchar unaestridente que grita con una especie de pánico: “¡No hay gobien Rusia! ¡No hay organización entre los trabajadores rusos!funcionará! ¡No funcionará!”

Es la táctica de la calumnia.Como todo auténtico socialista sabe, y como los que hem

visto la Revolución rusa podemos atestiguar, existe actualmenMoscú y en todas las ciudades y pueblos de Rusia una estrucpolítica enormemente compleja, sostenida por la mayoría del pblo y que funciona tan bien como ningún otro gobierno popurecién nacido ha funcionado jamás. Los trabajadores de Rusiaconstruido a partir de sus necesidades vitales una organizaciónnómica que está evolucionando hacia una verdadera democrindustrial.

El Estado Soviético está basado en los Soviets –o Consejos

trabajadores y en los Soviets de campesinos. Estos Consejos tituciones características de la Revolución Rusa– se originaro1905, cuando durante la primera huelga general de los trabajado* John Reed (1887–1920): fue un reconocido periodista y activista estadoun-idense quien presenció los sucesos de la Revolución de Octubre, en 1917. Suobra Cien días que estremecieron al mundoes un relato detallado de estos acon-tecimientos.



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las fábricas de Petrogrado y las organizaciones obreras enviaron dlegados al comité central. Este comité de huelga fue llamado consejo de diputados obreros. Convocó la segunda huelga general en otoño de 1905, mandó organizaciones a toda Rusia y por un brevlapso de tiempo fue reconocido por el gobierno imperial como einterlocutor autorizado de la clase trabajadora revolucionaria rusa

Con el fracaso de la Revolución de 1905, los miembros deConsejo huyeron o fueron deportados a Siberia. Pero ese tipo dunión resultó tan sorprendentemente efectiva como órgano políticque todos los partidos revolucionarios incluyeron un consejo de dputados obreros en sus planes para un futuro levantamiento.



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EL ESTADO SOVIÉTICO Al menos dos veces al año se eligen delegados de toda Rus

para el Congreso de Soviets Panruso. Teóricamente estos delegadse eligen por designación popular directa; en las provincias uno pcada 125 mil votantes; en las ciudades uno por cada 25 mil; sin embargo, en la práctica, son normalmente elegidos por los Soviets prvinciales y urbanos. Se puede convocar una sesión extraordinardel congreso en cualquier momento, a iniciativa del comité CentraEjecutivo Panruso, o a petición de los Soviets que representen utercio de la población trabajadora de Rusia.

Este órgano, formado por unos 2 mil delegados, se reúne en lacapital en forma de gran Soviet y decide sobre los asuntos esenciade la política nacional. Elige un comité Central Ejecutivo, como comité Central del Soviet de Petrogrado, que invita a los delegadode los comités centrales de todas las organizaciones democráticas

Este comité Central Ejecutivo de los Soviets Panruso aumentado es el Parlamento de la República Rusa. Está formado por una350 personas. Entre los congresos panrusos es la autoridad suprema, pero no debe actuar al margen de las líneas dictadas por el últmo congreso y es absolutamente responsable de todos sus actos anel siguiente congreso.

Por ejemplo, el comité Central Ejecutivo puede, y lo hizo, or-denar que se firmara el tratado de paz con Alemania. Pero no pud

hacer que este tratado vinculara a Rusia. Sólo el Congreso Panrustiene poder para ratificar el tratado.El comité ejecutivo Central elige entre sus miembros once dele

gados como presidentes de comités a cargo de los diferentes depatamentos del gobierno, en el lugar de los ministros. Estos delegadpueden ser destituidos en cualquier momento. Son absolutamente responsables ante el Comité Central Ejecutivo. Los delegado



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los Soviets, pero contra los bolcheviques. Esto es un absurdo. LSoviets son los órganos de representación más perfecta de la clatrabajadora, eso es verdad, pero son también las armas de la dictadura del proletariado, a la que todos los partidos anti-bolcheviquese oponen encarnizadamente. Así, la disposición de la gente a adhrirse a la política de la dictadura del proletariado no sólo se mide plos miembros del Partido Bolchevique –Partido Comunista, comoahora se llama–, sino también por el crecimiento y actividad de loSoviets locales de Rusia.

El ejemplo más notable de esto lo encontramos entre los campesinos, que no tomaron la dirección de la Revolución, y cuyo prmer y casi exclusivo interés en ella fue la confiscación de las granfincas. Los Soviets de diputados campesinos no tenían al principiprácticamente otra función que la solución del problema de la tierraFue el fracaso en la solución a este problema el que volvió la atencide la gran masa de campesinos hacia las razones sociales que hab

tras este fracaso –eso, unido a la propaganda conti-nua de la izquierda de los partidos revoluciona-

rios socialistas y bolcheviques, y a la vuelta alos pueblos de los soldados revolucionarios–.

El partido tradicional de los campesinoses el Partido Socialista Revolucionario.

La gran masa inerte de campesinos

cuyo único interés era su tie-rra y que nunca había tenidofuerza luchadora ni iniciati-va política, al principio re-chazó tener algo que vercon los Soviets. Sin em-

bargo, aquellos



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campesinos que participaron en los Soviets pronto despertaronidea de la dictadura del proletariado. Y casi invariablemente ingron y se convirtieron en partidarios del gobierno soviético.

En el Comisariado de Agricultura de Petrogrado hay un mde Rusia, salpicado de alfileres rojos. Cada uno de esos alfilerpresenta un Soviet de diputados campesinos. La primer vez quemapa, fijado en el viejo cuartel general de los Soviets de campeen Fontanka, los puntos rojos se esparcían diseminados por el vpaís, y su número no aumentaba. En los primeros ocho meses dRevolución, habíavolosts , uyezds , provincias enteras, de hecho, don-de sólo una o dos grandes ciudades y quizás unos cuantos puedispersos tenían un Soviet de campesinos. Sin embargo, despde la Revolución de Noviembre podías ver a toda Rusia enrojante tus ojos, a medida que pueblo tras pueblo, condado tras cdado, provincia tras provincia, se levantaba y formaba su Conde campesinos.

En el momento de la insurrección bolchevique podría habeelegido una asamblea constituyente con una mayoría anti-soviéUn mes después esto habría sido imposible. Yo vi tres convencpanrusas de campesinos en Petrogrado. Los delegados llegabla gran mayoría de ellos revolucionarios socialistas de la dereComenzaba la sesión –y siempre eran sesiones violentas– bapresencia de Avksentiev o Peshekhanov. En pocos días se desp

rían hacia la izquierda y serían dominados por seudo-radicales cTchernov. Poridonova sería elegida presidenta. Entonces la minconservadora se escindiría y montaría una convención alternaque en pocos días acabaría en nada. Y la mayoría enviaría delepara unirse a los Soviets en Smolny. Esto pasó cada una de la v

Nunca olvidaré la conferencia de campesinos que tuvo lua finales de noviembre y cómo Tchernov luchó por el control



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perdió, y esa maravillosa marcha de proletarios encanecidos por polvo que marchaba hacia Smolny a través de las calles nevadacantando, con sus banderas rojo-sangre ondeando en el viento heldo. Era noche cerrada. En los escalones de Smolny cientos de hombres trabajadores esperaban para recibir a sus hermanos campesiny, bajo la débil luz, las dos masas, una descendiendo y la otra acendiendo, se fundieron rápidamente y se abrazaban, y lloraban, aplaudían.

Los Soviets pueden aprobar decretos que supongan cambioeconómicos fundamentales, pero deben llevarse a cabo por las prpias organizaciones populares locales.

La confiscación y distribución de la tierra, por ejemplo, se dejen manos de los comités de la tierra de los campesinos. Estos comtés de la Tierra fueron elegidos por los campesinos a propuesta dpríncipe Lvov, el primer jefe del gobierno provisional. Con respeca la cuestión de la tierra, fue inevitable llegar a un acuerdo, segúel cual las grandes haciendas debían ser fraccionadas y distribuidentre los campesinos. El príncipe Lvov pidió a los campesinos queligieran comités de tierra, que no sólo debían determinar sus propias necesidades agrícolas sino también medir y hacer avalúo de grandes fincas. Pero cuando estos comités de la tierra intentarofuncionar, los propietarios los habían detenido.

Cuando los Soviets tomaron el poder, su primera acción fue

promulgar el decreto de la Tierra. Este decreto no era siquiera uproyecto bolchevique sino el programa de la derecha (o moderaddel Partido Socialista Revolucionario, desarrollado a partir de vrios centenares de peticiones de campesinos. El decreto abolió pasiempre los títulos privados de la tierra o recursos naturales de Rusy dejó a los comités de tierra la tarea de distribuir la tierra entre lo



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campesinos, hasta que la asamblea constituyente resolviera fmente la cuestión.

Tras la disolución de la asamblea constituyente, el decretohizo definitivo.

Aparte de estas pocas proposiciones generales y de una secestablecida para emigración de la población excedente en vecindsuperpoblados, los detalles de la confiscación y la distribución s

jaron enteramente a los comités locales de la tierra. Kalagayev, mer comisario de agricultura elaboró un detallado conjunto de repara guiar a los campesinos en su acción. pero lenin, en un discante el Comité Central Ejecutivo, persuadió al gobierno que dra a los campesinos llevar el asunto de una manera revolucionaconsejando solamente a los campesinos pobres que se organiz



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contra los campesinos ricos (“Dejad que diez campesinos pobrese enfrenten a cada campesino rico”, dijo Lenin).

Por supuesto ningún campesino podía poseer su tierra, noobstante, podía tomar lo que la tierra le ofrecía y tratarlo comopropiedad privada. Pero la política del gobierno, actuando a través del comité local de la tierra, es desalentar esta tendencia. Lcampesinos que quieren convertirse en propietarios pueden hacerlo, pero no son ayudados por el gobierno. Por el contrario, alos campesinos que cultivan cooperativamente se les dan crédtos, simientes, herramientas, y formación en técnicas modernas

Adscritos a los comités de tierra hay expertos en agricultura silvicultura. Para coordinar las prácticas de los comités locales,elige de entre ellos un órgano central, conocido como el ComitPrincipal de la Tierra, que se encuentra en la capital, en estrechcontacto con el comisariado de agricultura.

Cuando estalló la Revolución de Marzo, los propietarios yadministradores de muchas plantas industriales, o bien las dejaron o fueron expulsados por los trabajadores. En las fábricas dgobierno, donde el trabajo había estado mucho tiempo a mercedde burócratas irresponsables designados por el zar, se dio espcialmente esta situación.

Sin directores, encargados y en muchos casos ingenieros ycontables, los trabajadores se encontraban enfrentados a la alte

nativa de continuar trabajando o morir de hambre. Se eligió uncomité, con un delegado de cada “sección” o departamento; estcomité intentó dirigir la fábrica... Por supuesto, al principio, éstpareció un plan sin futuro. Las funciones de los diferentes departamentos podían coordinarse de esta manera, pero la falta dformación técnica por parte de los trabajadores produjo algunoresultados grotescos.



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Finalmente se celebró la reunión del comité en una de fábricas, donde un trabajador se levantó y dijo: “Camarad¿por qué nos preocupamos? La cuestión de los técnicos extos no es difícil. Recordad que el jefe no era un técnico expeel jefe no sabía ingeniería, química o contabilidad. Todo lo hacía era poseer. Cuando quería ayuda técnica, contrataba hobres que se la proporcionaran. Bien, ahora nosotros somos jefes. ¡Contratemos ingenieros, contables, etc., que trabajen nosotros!”

En las fábricas estatales el problema era comparativamte simple, porque la Revolución destituyó automáticamente“jefe” y realmente nunca lo substituyó por otro. Pero cuandocomités de delegados de fábrica se entendieron a las fábricapropiedad privada, fueron duramente combatidos por los proptarios de las fábricas, la mayoría de los cuales estaba establedo contactos con los sindicatos.



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En las fábricas privadas, además, los comités de delegados erproducto de la necesidad. Después de los tres primeros meses de Revolución, durante los cuales la clase media y las organizacionproletarias trabajaron juntas en una armonía utópica, los capitalistas industriales comenzaron a temer el poder creciente y la ambción de las organizaciones trabajadoras –igual que los propietarien el campo temían al comité de la tierra y los oficiales a los comide soldados y a los Soviets–. Durante aproximadamente la primerparte de junio comenzó la campaña más o menos consciente de todla burguesía para detener la Revolución y descomponer las organzaciones democráticas. Empezando por los comités de delegados fábrica, los propietarios industriales planeaban barrerlo todo, includos los Soviets. El ejército estaba desorganizado, se desviaban sumnistros, municiones y comida, y se entregaban posiciones reales a alemanes, como Riga; en el campo, se persuadió a los campesinpara que guardaran el grano y provocaran desórdenes que dieronlos cosacos una excusa para “restaurar la paz”; y la industria. Mimportante que todo lo demás, la maquinaria y el propio funcionamiento de las fábricas fueron saboteados, el transporte aún mádestrozado y las minas de carbón y metal y las fuentes de materiprimas dañadas lo más posible. No se ahorraron esfuerzos para crrar las fábricas y rendir a los trabajadores, a fin de que volvieransometerse al viejo régimen industrial.

Los trabajadores se vieron forzados a resistir a esto. El comité delegados de fábrica reaccionó y tomó el mando. Por supuesto, principio, los trabajadores rusos cometieron absurdos errores, comse ha dicho a todo el mundo una y otra vez. Pedían salarios imposbles, intentaron llevar a cabo procesos de manufactura técnicamencomplicados sin experiencia suficiente, en algunos casos incluso dieron al jefe que volviera bajo sus propias condiciones.



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Pero tales casos son una ínfima minoría; en la mayoría deplantas los trabajadores eran lo bastante ingeniosos como parcapaces de llevar la industria sin los jefes.

Los propietarios intentaron falsificar los libros, ocultar pediel comité de delegados de fábrica se vio obligado a encontrar fode control de los libros. Los propietarios trataron de robar piezalas máquinas; así, el comité tuvo que reglamentar que nada dentrar o salir de la planta sin permiso. Cuando la fábrica iba arrar por falta de combustible, materias primas o pedidos, el code delegados de fábrica tenía que enviar hombres a través de mRusia a las minas, o al Cáucaso por aceite, o a Crimea por algoy los trabajadores habían de enviar delegados a vender el prodDurante el paro de los ferrocarriles, los agentes del comité tuvique llegar a acuerdos con el sindicato de ferroviarios para el tporte de cargas. Para defenderlo contra los huelguistas, el cotuvo que asumir la función de contratar y relevar a trabajadore

Así, el comité de delegados de fábrica fue una creación danarquía rusa, forzada por la necesidad de cómo aprender a dila industria para que, cuando llegara el momento, los trabajadrusos pudieran asumir el control real con pocas fricciones.

Como ejemplo de la forma en que las masas trabajaron junestá el asunto de las 200 mil cargas de carbón, que se sacarolas carboneras de la flota de combate báltica en diciembre y fu

transferidas por los comités de marinos para mantener en funnamiento las fábricas de Petrogrado durante la carestía del carbLa factoría Obukhov era una planta de acero que fabricaba

ministros para la armada. El presidente del comité de Obukhera un ruso-americano, de nombre Petrovsky, bien conocido acomo anarquista. Un día el encargado del departamento de tordos dijo a Petrovsky que el departamento habría de cerrar debi



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la imposibilidad de obtener ciertos pequeños tubos usados por unfábrica del otro lado del río, cuya producción se había contratadpara dentro de tres meses. El cierre del departamento de torpedosignificaba que 400 hombres se quedarían sin trabajo.

–Conseguiré los tubos– dijo Petrovsky.Fue directo a la fábrica, donde en vez de buscar al director s

dirigió al presidente del comité de delegados de fábrica local.“Camarada” –dijo– “si no tenemos tubos en dos días nuestro

departamento de torpedos tendrá que cerrar y 400 de los chicosquedarán sin trabajo”.

El presiente pidió sus libros y descubrió que tres plantas privadas cercanas habían encargado varios miles de tubos. Él y Petrovsvisitaron inmediatamente estas tres plantas y llamaron a los presdentes de sus comités de delegados de fábrica. En dos de las fábricresultó que los tubos no se necesitaban inmediatamente; y al dísiguiente se entregaron los tubos a la fábrica Obukhov, y el depatamento de torpedos no cerró.

En Novgorod había una fábrica textil. Al estallar la Revoluciónel propietario se dijo a sí mismo: Tenemos problemas. No podremoobtener beneficios mientras esta revolución continúe. Cerremos negocio hasta que la cosa se acabe.

Así cerró la fábrica y él, los empleados de las oficinas, los qumicos, ingenieros y el director tomaron el tren a Petrogrado. Al d

siguiente los trabajadores abrieron la fábrica. Pero esos trabajadoreran quizá un poco más ignorantes que la mayoría de los trabajadores. No sabían nada de procesos técnicos de manufactura, sobrla contabilidad, dirección o venta. Eligieron un comité de delegados de fábrica y encontraron cierta cantidad de combustible y materias primas almacenadas, dispuestas para la manufactura de tede algodón.



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No sabiendo qué se hacía con la tela de algodón una vez facada, primero se proveyeron en cantidad suficiente para sus flias. Después, como algunos telares estaban estropeados, envia un taller de maquinaria cercano a un delegado, que propusotregar tela a cambio de asistencia técnica. Hecho esto, llegaronacuerdo con la cooperativa local para proporcionar ropa a camde comida. Llevaron incluso el principio del trueque al extremcambiar piezas de tela por combustible con los mineros de carde Jarkov, y por transporte con el sindicato de ferroviarios.

Pero finalmente saturaron el mercado local de tela de algoy entonces chocaron con una demanda que el paño no podía safacer el alquiler. Esto sucedía en los días del Gobierno Provisicuando aún existían propietarios. El alquiler había de pagarsedinero. Así que cargaron un tren de tela y lo enviaron, a cargo ddelegado a Moscú. El delegado dejó el tren en la estación y recla calle. Entró en una sastrería y preguntó si el sastre necesitaba

–¿Cuánta?– Preguntó el Sastre.–Un tren– Contestó el delegado.–¿A qué precio?––No lo sé. ¿Cuánto pagas normalmente por la tela?El sastre consiguió la tela casi regalada y el delegado, que

ca había visto tanto dinero junto, volvió a Novgorod enormemcontento.

Así era como en toda Rusia los trabajadores estaban adqriendo la formación necesaria en los fundamentos de la prodción industrial e, incluso, la distribución, para que cuando llela Revolución de Noviembre pudieran ocupar sus puestos en laganización del control obrero.

En junio de 1917 se celebró la primera reunión de comitésdelegados. En este momento los comités apenas se habían exten



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fuera de Petrogrado. Fue una reunión notable, formada por los delegados de la actual base, la mayoría de ellos bolcheviques, algunanarco-sindicalistas; y su razón de ser era la protesta contra las táccas de los sindicatos. En el mundo político los bolcheviques repetíque ningún socialista tenía derecho a participar en un gobierno dcoalición con la burguesía. La propia reunión de delegados de comtés adoptó la posición de tener la misma actitud hacia la industria.

En otras palabras, los empresarios y los trabajadores no tieneningún interés en común; ningún trabajador con conciencia de clase puede ser miembro de una mesa de arbitraje o conciliación salvpara hacer saber a los empresarios las demandas de los trabajadorLa producción industrial ha de estar absolutamente controlada polos trabajadores.

En un primer momento los sindicatos lucharon encarnizada-mente contra los comités de fábrica. Pero los comités, que estabaen posición de asumir el control de la industria, consolidaron y extendieron su poder fácilmente. Muchos trabajadores podían no ver necesidad de sindicarse, pero todos ellos veían la necesidad de parcipar en la elecciones del comité que controlaba sus trabajos de forminmediata. Por otra parte los comités de delegados reconocían el valde los sindicatos; no se empleaba a ningún trabajador nuevo a menque pudiera mostrar un carné de sindicato; eran los comités de delgados los que aplicaban localmente los reglamentos de los diferen

sindicatos. En este momento los sindicatos y los comités de fábritrabajaban en perfecta armonía cada uno de ellos en su ámbito.La propiedad privada de la industria no está aún abolida en

Rusia. En muchas fábricas el propietario aún mantiene su título, se le permite cierto beneficio limitado en su inversión, con la condición de que trabaje por el éxito y el aumento de la extensión de empresa; pero se le ha quitado el control. Aquellas industrias cuy



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propietarios intentan cerrar la puerta a sus trabajadores, o por el de o la fuerza, tratan de obstaculizar las operaciones de la plantainmediatamente confiscadas por los trabajadores. Las condiciolas horas y salarios de todas las industrias, de propiedad privadatatal, son uniformes.

La razón para esta supervivencia de un semi-capitalismo enEstado proletario reside en el pasado de la vida económica de Rel Estado capitalista altamente organizado circundante y la necede producción industrial inmediata en Rusia, para combatir la psión de la industria extranjera.

El agente por el que el Estado controla la industria, tanto el trabajo como en la producción, se llama Consejo de ControTrabajadores. Este órgano central, situado en la capital, está cpuesto por delegados elegidos de los consejos del control de losros locales, los cuales están formados por miembros de comitédelegados de fábricas, delegados sindicales profesionales e ingetécnicos y expertos. Un Comité Ejecutivo Central dirige los asude cada localidad, compuesto por trabajadores comunes, pero layoría trabajadores de otros distritos, para que sus decisiones estbres de cualquier interés sectorial. Los consejos locales recomial Consejo Panruso la confiscación de las fábricas, informan slas necesidades de combustible, materias primas, transporte y t jos en sus distritos, y ayudan a los trabajadores en el aprendizaje

dirigir las diferentes industrias. El Consejo Panruso tiene autorpara confiscar plantas y para igualar los recursos económicos ddiferentes localidades...

Si no hubiera sido por las organizaciones democráticas que tían ya antes de la Revolución, no hay duda de que la RevoluRusa se habría estancado hace mucho tiempo.



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La organización comercial ordinaria de distribución había sidtotalmente destrozada. Sólo las sociedades cooperativas de consumdores conseguían alimentar al pueblo, y su sistema ha sido adoptadhace tiempo por los municipios, e incluso por el gobierno.

Antes de la Revolución había más de veinte millones de miembros en sociedades cooperativas en Rusia. Esta es una forma muy ntural para los rusos, por su parecido con la primitiva cooperación dvida rural de Rusia durante siglos.

En la fábrica Putilov, donde están empleados más de cuarentamil trabajadores, la sociedad cooperativa alimentó, albergó e inclso vistió a más de cien mil personas, proveyéndose del vestido Inglaterra.

Es este el carácter de los rusos el que olvida la gente que pienque Rusia no puede tener ningún gobierno porque no hay fuerza central; y cuya imagen mental de Rusia es un comité servil en Moscdominado por Lenin, Trotsky, y mantenido por mercenarios de laGuardia Roja.

Más bien es cierto todo lo contrario. Las organizaciones que hdescrito se reproducen en casi todas las comunidades de Rusia. Yuna parte considerable de Rusia se opusiera seriamente al gobiernsoviético, los Soviets no durarían ni una hora.



NOTAS del LE

6. Los soviets

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