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  • San Martin Historia del Siglo de la Violencia

    I armas I libro n? 34

  • aunque era el primer piloto de un Mus- tang que volaba sobre Berln, se no sera el da de su victoria area. Metiendo gases a fondo hasta la mxima potencia, sobre- pas al Messerschmitt haciendo a su pi- loto un ademn ofensivo. El alemn os- cil las alas y se lanz en un largo picado hacia las nubes.

    Pero ese da habra otros pilotos de los Mustangs que veran Berln y dembaran aviones alemanes. El teniente Charles Anderson descendi y ech una mirada a la ciudad a travs de un pequeo agu- jero entre las nubes, pero inmediatamente se le echaron encima seis Focke-Wulf:l90. Rpidamente, busc refugio entre las nu- bes, esper unos momentos y volvi a salir. All estaban an.10~ 190, de modo que se zambull de nuevo en las nubes y emprendi el regreso a la base.

    El capitn "Cowboy" Megura, persi- guiendo a un caza alemn se encontr de pronto sobre un aerdromo en las afueras de Berln. Vio un Junkers Ju-52, le dispa- r una breve rfaga y observ cmo esta- llaba en llamas entonces tambin l re- gres a la base. El teniente Paul S. Riley pudo colocarse por la cola de un caza ale- mn, dispar y el alemn entr en picado. Al seguirle en su picado hacia el suelo, se le empa el parabrisas y tuvo que aban- donarlo, elevndose de nuevo.

    Blakeslee reuni sus dispersos cazas y los condujo de regreso a Inglaterra. No haba sido precisamente una misin espectacular ni tampoco productiva, pero la mera presencia de los Mustangs sobre la capital del Tercer Reich tena su signifi- cacin. Terminada la guerra, el mariscal del Reich, Hermann Goering declar a la prensa, en relacin con la presencia de los cazas de escolta:

    "La primera vez que sus bombarderos aparecieron sobre Hannover con escolta de cazas empec a preocuparme. Cuando esto ocurri sobre Berln, supe que la partida estaba perdida."

  • El mes de septiembre de 1939 vio a los ejrcitos de Hitler invadiendo y aplastan- do a Polonia en la primera de sus campa- as blitzkrieg. Concluida la conquista de la pequea nacin, Hitler volvi su aten- cin a occidente, donde los ejrcitos de Francia y Gran Bretaa se parapetaban tras la reputada como inexpugnable Lnea Maginot.

    Durante la ocupacin de Polonia, la Luftwaffe alemana adquiri fama inme- diatamente; las actuaciones del caza Messerschmitt 109, del bombardero en picado Junkers Ju-87 y del Heinkel 11 1 dominaron los titulares de los peridicos durante aquellas semanas y la terrorfica campaa que se llevaba a cabo desde los cielos encoga el corazn de las naciones . aliadas de Europa.

    La Roya1 Air Force dispona de varias escuadrillas de Hawker Hurricanes y Su- permarine Spitfires, pero no en nmero suficiente para cubrir sus necesidades a largo plazo. Francia tena ya contratada la adquisicin de cierto nmero de cazas Curtiss Hawk 75 de los Estados Unidos

    y estaba haciendo lo posible para conse- guir ms. Cuando las comisiones de com- pra de arqbos pases visitaron los Estados Unidos en el invierno de 1939-40 ya estaba listo el escenario para la genera- ciH 'y nacimiento del North American P-5 1 Mustang.

    Los ingleses adquirieron varios cientos de aviones Curtiss P-40 y con el fin de aumentar la produccin de aviones se les haba sugerido que podran intentar proveerse de cazas de la joven North American Aviation Company. Con esta idea, los ingleses enviaron a sus repre- sentantes de la comisin de compras a James H. "Dutch" Kindelberger, presi- dente de la North American Aviation, para tratar de contratar con su compaa la construccin de aviones Curtiss.

    Kindelberger era un hombre con visin de futuro que haba seguido de cerca el

    El aerodon5mico y funcional morro de un Mustang con motor Mertin.

  • Kindelberger vendi el Mustang a los ingleses cuando no era ms que una idea y se cancel el encargo de varios cientos de P-QO.

    desarrollo de la aviacin militar en Euro- pa y comprendi desde el principio de la guerra que los aviones que se construan en los Estados Unidos no seran capaces de competir con los cazas alemanes que ya estaban en accin.

    Cuando la comisin de compras brit- nica present su plan a Kindelberger en abril de 1940, 10 rechaz: comprenda que su equipo de ingenieros podra salir adelante con un avin de caza de nueva marca que sobrepasara al P-40; en cam- bio, inform a la comisin que l podra construir un nuevo caza y ponerlo en pro- duccin en el mismo plazo que le llevara equiparse para la fabricacin del Curtiss. Lee Atwood, vicepresidente de la North American. expuso a los representantes

    N britnicos la 'propuesta el nuevo

    El diseo del avin, denominado por la North American NA-73, estaba previsto para que pudiera montarse a base demu- chas partes fabricadas por separado, in- corporando procedimientos que permi- tan producirlas en masa. Se utilizaban tambin nuevos sistemas que daran al avin unas caractersticas de vuelo sobre- salientes, pero lo que convenci definiti- vamente a los ingleses fue la promesa de la North American de que podra produ- cir un prototipo en 120 das. Tras la de- bida deliberacin, los ingleses aceptaron el proyecto, incluida la condicin de los 120 das y lo denominaron "Mus-

    .. ,... \ tang" ("1. Kildelberger y Atwood regresaron in-

    mediatamente a la fbrica de Inglewood, en California, y pusieron a trabajar en el proyecto al grupo encargado de los planos estructurales. Tan pronto como se tuvie- ron Listos los estudios y datos prelimina-

    l avin. El anteproyecto era obra de Ray- (*) Mustang es el nombre que se le da en 1 mond )i. Rice, ingeniero jefe Y el diseo 10s Estados Unidos a cierto caballo cimarrn, ( de Edgar Schmued. pequeo, pero resistente y veloz. (N. del T.)

    res se enviaron por correo areo a la comi- Arriba: "DU~CW Kindelberger m n su "ahi- sin britnica er: Nueva York y Kindel- jado" Abajo: El diseador del P-51: Edgar berger obtuvo de ellos la autorizacin S~hmued. para la construccin del avin tres sema- nas despus de su regreso a Califomia.

    Se prescindi de los usuales trmites burocrticos y rdenes oficiales. La co- municacin se estableci directamente I entre oficinas o de palabra y se inici la construccin de un modelo a escala na- tural que se encarg a los tallistas tan pronto como se dispuso de los datos ne- cesarios. Tambin se confeccion en caoba un modelo a escala 114 para el tnel aerodinmico.

    El proyecto bsico exiga la utilizacin de un motor de cilindros en lnea con el fin de obtener un morro afinado y un rea frontal de mnima resistencia. Se hizo evidente en seguida que para este diseo el nico motor de fabricacin norteamericana que reuna estas condi- ciones era el Allison V-17 10 de doce ci- lindros con refrigerante lquido.

    Se dise una toma o conducto de aire que se instalara bajo el fuselaje para facilitar la corriente de aire al radiador,

  • que iba colocado detrs de la cabina, den- tro del fuselaje. Esto consuma algo de potencia, no slo debido al empuje nece- sario para forzar la salida de la corriente de aire caliente sino tambin por reducir la lnea aerodinmica.

    Una innovacin que se incorpor al proyecto fue el flujo laminar o superficies aerodinmicas de baja resistencia. En tanto que las superficies aerodinmicas convencionales tendan a incrementar las turbulencias cuando su rea frontal se vea sometida a las ondas de choque, el espesor mxirno'del ala de flujo laminar se desplaz bastante hacia atrs, prolon- gndose en un borde de salida en forma de gota de agua. Esto daba lugar a un flujo 'del aire ms fluido a lo largo de la mayor inclinacin del borde de ataque hasta el punto de mayor espesor, antes de romperse en la zona de flujo turbu- lento que aumentara la resistencia aero- dinmica. De este modo se reparta ms la presin que origina la sustentacin del ala. El perfil del ala de flujo laminar per- mita al aire alcanzar las presiones necesa- rias en ms del doble de la superficie alar total que en tipos de ala ms convencio- nales. De esta manera se reducan las ondas de choque pudiendo alcanzarse mayores velocidades con mayor fluidez. Por entonces, el ala de flujo laminar no se haba experimentado y se acord que si este nuevo tipo de plano de sustenta- cin no cumpla como se esperaba, sera reemplazado en el plazo de treinta das por otro convencional.

    Cuando el modelo de caoba fue in- troducido en el tnel aerodinmico para las pruebas en el Instituto Tecnolgico de California se tema que el nuevo tipo de ala fuera inadecuado y, aunque la resis- tencia aerodinmica fue la ms baja regis- trada, las caractersticas en cuanto a pr- dida de sustentacin resultaron malas. Se modific el modelo y se volvi a meter en el tnel una semana despus y tam- poco entonces los pequeos flecos de seda pegados a la superficie del plano se comportaron satisfactoriamente. Los in- genieros aerodinmicos de la North Ame- rican empezaron a sospechar que el tnel

    La toma de aire bajo el fuselaje del Mustang, cuyo objeto era facilitar el flujo de aire para el radiador.

  • me- Las notables caractersticas del primer mi- Mustang dieron lugar a un pedido de

    ines 320 por parte de la RAF, pedido que fue autorizado por los Estados Unidos con la condicin de que el quinto y el dcimo de los que se construyeran fuesen entregados al centro de pruebas de la Fuerza Area del Ejrcito norteamericano, en Wnght Field. Desgraciadamente, all estuvieron criando polvo, prcticamente olvidados, durante muchos meses.

    Kindelberger puso sus cadenas de mon-

    puerto de Liverpool el primer Mustang, designado Mark 1 por la RAF. El aparato

    , pruebas preliminares e inform haber ob-

  • I Ii Arriba: U n Mark I de la RAF. Los observadores ingleses velan con dudas, al principio, las cifras ' q u e , sobre sus actuaciones, se atribuian a sus P-51. Abajo: El Messerschmitt B f 109. Hubo durante la guerra confusiones trgicasdebido a la similitud de perfil entre el caza alemn y el Mustang. r Se encontr que, en accin, los pilotos tendlan a confundir el Messerschmitt B f 109 con el P-51 Mustang. La figura muestra las siluetas del B f 109F y el P-51B. Observando estas siluetas es fcil destacar las diferencias: fuselaje relativamente ms largo, puntas de los planos redondeadas y forma diferente de los pianos de cola (con aletas compensadoras) del B f 109; aspecto ms macizo y tubos de escape del P-51. Sin embargo, durante el combate, en que el reconocimiento tiene que ser ins- tantneo y slo por medio de una rpida ojeada a un avin que se aproxima, probablemente desde la direccin del sol o a travs de las nubes, los pilotos podan engaarse por evidentes similitudes: ambos estaban provistos de motor en lnea con refrigerante lquido, eran monoplazas de reducido tamao, monoplanos de ala baja, afinamiento progresivo de los bordes de ataque y salida de las alas y empenajes similares. De perfil, los dos tenan un fuselaje parecido, especialmente en la parte de la carlinga y los distintivos de nacionalidad probablemente slo se velan en el lt imo momento, cuando ya serla demasiado tarde para corregir una identificacin errnea.

    tenido una velocidad en vuelo nivelado a 4.200 metros de altura de 625 kilme- tros por hora. Durante las pruebas oficia- les para la RAF el piloto de pruebas al- canz en picado ms de 800 kilmetros por hora y en vuelo nivelado de calibra- cin se apunt 700 kilmetros por hora. Esto pareca acabar con las dudas de los observadores acerca de las posibilidades del Mustang en relacin con la velocidad.

    Un problema particular que se presen- t entonces fue el del reconocimiento, pues las lneas generales del Mustang en vuelo se parecan a las del Messersch- mitt 109. Haba que preparar tan rpida- mente como fuera posible carteles de re- conocimiento que fueron enviados a todos los observadores y bases de la Royal Air Force. Adems, como una pre- caucin ms, cada Mustang que sala de fbrica con destino a las Islas Britnicas, llevaba pintada a lo largo de la cuerda del

    ala una banda amariila de un pie de an- cho. A pesar de estas precauciones, el perfil del Mustang dara lugar a problemas hasta el fin de la guerra, como ms de un piloto de caza pudo atestiguar.

    A pesar de todo, los ingenieros de la North American haban producido un excelente caza, la RAF estaba totalmente satisfecha con lo que se ofreci y el Mus- tang estaba ya listo para el combate.

  • Debido a la falta de velocidad ascensio- nal y pobres caractersticas a gran altitud del motor Allison, la ItAP releg al nuevo Mustang a operaciones con el Mando de Cooperacin del Ejrcito. Los pilotos y dems personal de esta unidad pertene- can a la RAF, pero a efectos tcticos es- taban agregados al ejrcito. El objeto de los aviones asignados a este mando era la destruccin de las comunicaciones enemigas, transportes, movimientos de tropas, barcazas, embarcaciones meno- res y almacenamientos de campaa de combustible o municiones. Para llevar a cabo estas operaciones el Munstang volaba a muy baja cota, variando entre la de las copas de los rboles hasta unos 1.800 metros. Haba dos razones impor- tantes para mantener tan bajos niveles de vuelo: en primer lugar haca muy difcil a los cazas enemigos la maniobra de picar sobre ellos para atacarlos; en segundo lugar la baja altitud y la velocidad del Mustang hacan muy poco efectivo el fuego antiareo y, por ltimo, el avin quedaba fuera del alcance de deteccin del radar enemigo.

    La alta velocidad y sensibilidad a los mandos del Mustang hacan de l un avin excelente para este tipo de opera- ciones. Como buen ejemplo de stas se describe la misin de apoyo efectuada por dos Mustangs durante el ataque de los comandos britnicos al puerto de Dieppe el 19 de agosto de 1942:

    "Ambos cazas, con sus cortas y an- chas alas casi rozando el agua, saltaban entre los palos de las embarcaciones y las crestas de las olas como piedras planas que se hicieran rebotar en la superficie del mar. Rociones de agua salada salpicaban el vientre y los planos de los aparatos a medida que se lanzaban rugiendo hacia el continente. Al acercarse a la costa, ga- naron altura para salvar los acantilados y los oscilantes palos de una flotilla de embarcaciones costeras; desde la playa se abri fuego contra eiios, pero los Mus- tangs se internaron sobre tierra esquivan- do el fuego de la artillera antiarea ale- mana buscando sus puntos de referencia.

    Mustang Mk IA, armado con caiones para mi- siones de apoyo a tierra e interceptacin. La sustitucin del motor Allison por el Merlin permiti al P-51 pasar al primer plano del material volante.

  • Arriba: En los ataques a "cota cero" demostr notables xitos. Abajo: Adiestramiento de pilotos en California en la extremadamente peligrosa tcnica del vuelo a baja cota. Sus intrucciones rezaban: "Penetrar sobre tierra hasta la carretera 'Z'; patrullar so-

    bre dicha carretera 'Z' desde el punto 42 hasta el punto 38. Informar de cual- quier accin del enemigo. No entablar combate con aviones enemigos a menos que sea necesario. Atacar si el avance ene- migo lo aconseja. Mantener altitud cero".

    Los pilotos comprobaron sus cartas, tomaron una carretera semejante a una estrecha cinta parda y picaron hasta unos cuatro metros de altura sobre ella. Hacia ellos se alzaron remolinos de polvo cuan- do nivelaron el vuelo a ras de suelo y se lanzaron rugiendo a lo largo de su sinuosa ruta. De pronto apareci ante ellos una columna de tropas. Al mismo tiempo, los alemanes vieron a los Mustangs y se ano- jaron a las trincheras a ambos lados de la carretera en medio de gran confusin. Para evitarlos, los pilotos tuvieron que tirar de palanca, viraron y, en pronun- ciando picado apuntaron hacia el suelo de nuevo, con los motores a todo gas. Los alemanes estaban saliendo de las trincheras y sacudindose el polvo cuando los Mustangs cayeron sobre ellos con to- das sus ametralladoras centelleando. Los

    El FW-190, un valioso oponente para el Mustang.

    hombres gritaban y caan como bolos en una bolera mientras el polvo se alzaba de la carretera en pequeos surtidores. De- jando tras de si su surco mortal, los Mus- tangs desaparecieron.

    Cuando los aviones empezaban a ganar altura describiendo crculos sobre el pun- to 38, una voz de alarma restall en la radio: " iTALLYHO! (*) Parecen Focke Wulfs, procedentes del Norte. Vamos por ellos".

    Los Mustangs apuntaron el morro ha- cia el suelo y entonces vieron otro Focke Wulf acercndoseles por la cola. El chato 190 inici un picado tendido y largo, pero los Mustangs se pegaron al suelo y abrieron sus gases al mximo. El piloto alemn renunci al ataque y se alej.

    (*) Voz de montera para sealar la presen- cia de la pieza, utilizada por los aviadores alia- dos para indicar el avistamiento de aviones ene- migos. (N. del T.)

  • La instalacin de una cmara fotogrfica en los P-51 de la RAF hizo posible el importantf- simo trabajo del reconocimiento fotogrfico en Europa.

    Cumplida su misin, ambos cazas se ele- varon en pronunciado viraje. Entonces el Focke Wulf apareci frente a ellos; uno de los Mustapgs descendi de nuevo hacia el suelo mientras el otro ganaba altura para ponerse por la cola del ale- mn. Cuando la distancia se redujo a unos 150 metros, el piloto del Mustang abri fuego y barri al 190 de morro a cola. Entonces, para culminar la victoria apa- reci del cielo un Spitfire picando sobre el alemn, rematndolo con fuego de ca- n. Del Focke Wulf brot un chorro de llamas y humo y se estrell contra el suelo. Los Mustangs se reunieron y pu- sieron rumbo a casa.

    A uno de los Mustangs de esta misin le fue arrancado por la artillera anti- area pesada enemiga un trozo de unos tres pies de largo de su plano izquierdo. El piloto abri gases a tope y corri

    hacia su base. Tom tierra con unos se- ' tenta kilmetros de exceso de velocidad sobre lo normal; como la pista no era su- ficientemente larga, redujo la velocidad lo mejor que pudo antes de meter los frenos a fondo, lo que hizo al avin hin- car el morro, doblndose la hlice, pero el piloto result ileso y el Mustang fue reparado muy pronto.

    Durante este perodo, los Mustangs hicieron un magnfico trabajo en el cam- po del reconocimiento fotogrfico. Utili- zando una cmara montada detrs del piloto, recorrieron las costas holandesas y francesas y obtuvieron excelentes fo- tografas a baja cota de las instalaciones enemigas. Esta constante vigilancia de- mostr ser inestimable no slo en los ata- ques de comandos, como en el caso de Dieppe, sino muy especialmente en la ingente tarea de mantener informados a los jefes aliados sobre las defensas cos- teras durante el planeamiento de la inva- sin del continente en junio de 1944.

    Las instalaciones ferroviarias y los trenes de carga son objetivos de la mayor importancia.

  • A fines de 1942 los Mustangs empeza- ron una nueva fase en su lucha contra los alemanes: esta vez se trataba de destruir locomotoras. Los pilotos tenan prohi- bido disparar contra trenes de pasajeros por temor a herir a civiles de pases ocu- pados, pero los trenes de carga eran blan- cos legtimos.

    El 13 de octubre de 1942, el oficial aviador H. H. Hilis y el suboficial F. J. Champlin, de la RCAF (Real Fuerza A- rea Canadiense) cruzaron la costa francesa al norte de El Havre sorprendiendo una gran mquina que tiraba de cuarenta va- gones de carga y veinte cisternas. Al dis- parar contra la locomotora, sta empez a dejar salir grandes columnas de vapor hasta producirse una gran explosin. A finales del mismo mes, Hills averi otro tren, pero su avin fue alcanzado por fuego de artillera ligera antiarea y tuvo que regresar penosamente con el empenaje literalmente hecho trizas.

    Desde el momento en que entraron en combate los Mustangs asombraron a los ingleses por su capacidad de reci6ir duros castigos sin que ello les impidiera regresar. En palabras de un piloto que vol este avin en sus primeros das: "Estos aero- planos son asombrosos. Siempre parecen dispuestos a llevarnos a casa. Son lo mejor del mundo para el trabajo que tenemos que hacer con ellos".

    Las previsiones optimistas sobre la au- tonoma del Mustang 1 se comprobaron en octubre de 1942 cuando una escuadri- lia de la RAF vol entre 1.1 00 y 1.300 ki- lmetros para atacar objetivos sobre el canal Dortmund-Ems, en Alemania. Se inici el ataque sobre Holanda, donde dispararon sobre un campamento militar. Continuando hacia el interior de Alema- nia, barrieron una fbrica en los almace- namiento~ petrolferos de Lathen; cru- zando el canal obtuvieron impactos en algunas barcazas y dejaron ardiendo a un mercante en el Zuiderzee.

    Tal vez esta larga expedicin fue pro- movida por el ingenio del teniente J. Lew-

    Un Mustang de la Fuerza Area Canadiense. La Fuerza Area del Ejercito de los Estados Unidos qued tan gratamente impresionada por la capa- cidad del Mustang que se reserv una parte im- portante de la produccin inicial para su propio Uso.

  • de reconocimiento en Europa, la Fuerza Area del Ejrcito hizo modificar la ma- yora de los suyos para trabajos fotogr- ficos. Estos aviones fueron designados originalmente como P-5 1-1NA y se les dio el nombre de "Apache". Sin embargo, la designacin del avin una vez modifi- cado fue F-64 y el nombre de "Apache" pronto dio paso al ya consgrado por los ingleses de "Mustang".

    Todo el mundo haba quedado muy impresionado por el xito del famoso bombardero en picado alemn Ju-87 "Stuka". Hasta que con el tienlipo se de- mostr que el Stuka no era oponente para cualquier buen avin de caza, tuvo SU poca y los boletines de noticias de los primeros aos de la guerra dejaron su huella tambin en las mentes de 10s man- dos militares. No fue una excepcin la Fuerza Area del Ejrcito de los Estados Unidos.

    En la primavera de 1942 se haban aprobado crditos para un bombardero en picado que ,sera utilizado en la inva- sin del Norte de Africa. Los diseos que

    kowicz, urt piloto polaco de la 309 Es- dad: por esta notable proeza fue repren- cuadrilla. Este oficial tena el ttulo de dido y felicitado al mismo tiempo. Su ingeniero y en su tiempo libre haba es- hallazgo hizo posibles misiones de mayor tudiado el mnimo consumo de combus- alcance para los Mustangs. tible del avin en relacin con las revolu- En noviembre de 1942 la 309 Escua- ciones por minuto y la presin de admi- drilla polaca fue transferida al sur, a Gat- sin en el motor para obtener la mxima wick, donde se le asignaron misiones de autonoma. Sus clculos mostraron que el reconocimiento de las fortificaciones ene- Mustang era capaz de volar desde su base migas en el sector de El Havre-Boulogne. en Escocia hasta Noruega y regresar. Desde su nueva base, los Mustangs salan

    En diversas ocasiones haba expuesto por parejas para llevar a cabo sus misio- el resultado de su estudio al Mando, pero nes. El cruce del Canal se haca en vuelo no obtuvo respuesta. El 27 de septiembre rasante; una vez alcanzada la costa, el de 1942 empendi un vuelo por propia gua de la pareja ascenda a 300 metros iniciativa para demostrar su teora. Lew- y tomaba fotografas con una cmara kowicz despeg de Escocia, vol a No- de gran distancia focal. Su pareja sola ruega, atac instalaciones enemigas en la volar por encima a fin de mantener la regin de Stavanger y regres sin nove- vigilancia sobre posibles cazas enemigos.

  • A-36 destacados en un campo del Norte de Africa. Los restos de sus ocupantes testifican las cualidades del .Mustang.

    Se montaron flaps accionados hidruii- camente en el borde de salida de los pla- nos, se instalaron soportes para bombas bajo las alas y se mont el motor Aliison V-17 10-87, que haba demostrado sus altas caractersticas a altitudes por debajo de los 3.600 metros. Las pruebas demos- traron el xito de la modificacin y se contrat la construccin de 500 aviones en esta versin, que se design como A-36.

    Otros cazas, modificados para efectuar bombardeos planeados, no podan efectuar picados verticales; el A-36, con sus frenos aerodinmicos de picado poda descender hasta el suelo con un ngulo de noventa grados. Mientras que los frenos de picado convencionales estaban provistos de flaps con orificios circulares, los del A-36 eran ranurados dndoles una apariencia, ms bien, de parrilla. El choque de la corriente de aire a travs de esta parrilla proporcio- naba al avin una de sus armas ms valio- sas, que era s u pavoroso chillido: comen-

    zaba en un bajo gemido, al abrir los fre- nos, e iba aumentando hasta un aullido desgarrador,en el momento de soltar las bombas. Cuando el A-36 se arrojaba sobre su vctima sta quedaba ensordecida por un alarido que le helaba la sangre.

    El A-36 lleg al Norte de Africa de- masiado tarde para la campaa de Tnez. Cuando se recibi y entr en servicio en los Grupos de Cazabombarderos 27 y 86, se estaba procediendo al asalto areo de la isla de Pantelaria. Estas operaciones empezaron en junio de 1943 y los bom- bardeos en picado de estos aviones se revelaron inmediatamente como un xito rotundo.

    Normalmente, los A-36 orbitaban sobre su objetivo a unos 3.500 metros. Entonces adoptaban una formacin en cadena y picaban uno tras otro sobre el blanco. Las bombas se lanzaban aproxima- damente a unos mil metros a una velocidad entre 450 y 550 kilmetros por hora, uti- lizando los flaps de picado al mximo. So- la hacerse la recuperacin a unos 500 me- tros. El avin demostr ser un bombar- dero de mucha precisin, capaz de alcan- zar cualquier blanco terrestre.

    Con sus dos ametralladoras de calibre

    .50 en el morro y las otras dos en cada plano, el A-36 era tambin un avin for- midable para el ataque rasante una vez terminada su misin como bombardero. Volaba rozando el suelo y, antes de que pudieran darse cuenta de ello, estaba en- cima de las columnas de tropas o de las instalaciones enemigas, con el agudo ulu- lar de su potente motor.

    Como consecuencia de los intensos bombardeos y ataques rasantes, la isla de Pantelaria capitul a fines de junio de 1943. Los A-36 fueron inmediatamente trasladados a las bases areas en la isla para operar contra objetivos situados en Sicilia, como preparacin para la invasin de la gran isla, bastin del Mediterrneo.

    El 10 de julio de 1943, las tropas alia- das desembarcaron en Sicilia. Sobre ellas volaban todos los aviones disponibles para apoyarlas y entre ellos los A-36, que con sus ametralladoras alineadas para concen- trar el fuego entre 200 y 225 metros, de- mostraron su eficacia contra el enemigo.

    Una operacin tpica es la llevada a cabo por el capitn Roger Miller. Volaba

    en una misin de apoyo a tierra cuando se vieron algunas columnas motorizadas. "Cada camin llevaba veinte o veinticinco hombres" -relataba Miller-, "probable- mente alemanes, que abrieron nutrido y certero fuego antiareo. No cre que pu- diramos contarlo, pero salimos de aque- llo sin novedad. Despus vimos un tren transportando carros de combate sobre vagones plataforma en una trinchera de ferrocarril, cerca de Aeia. Hicimos tres pasadas para asegurar el blanco. Fue una larga y no precisamente agradable tarea. Despus regresamos para caer sobre una columna de camiones. Poco despus vola- mos sobre otra locomotora que tambin arrastraba vagones plataforma con carros. Disparamos contra los carros y la mqui- na hizo explosin. Era algo realmente digno de verse. La locomotora se convir- ti en una nube de vapor. Unos tres kil- metros ms all encontramos otra loco-

    precauciones defensivas en la cabeza de playa siciliana.

  • El North American A-36 Invader, que era el desarrollo como bombardero en picado del P-51 Mus- tang. Estaba provisto de frenos aerodinmicos de picado bajo los planos, pero durante el combate se llevaban retraidos. Las entregas empezaron en septiembre de 1942 y, despus de haber entrado 500 en servicio, terminaron en marzo de 1943. Entraron en accin por primera vez en Sicilia e Italia en 1943. Efectuaron 23.373 misiones, lanzaron 8.014 toneladas de bombas, destruyeron 17 aviones enemigos en tierra y 84 en el aire, contra 177 propios. Motor: Allison V-1710-87 en Ilnea, 1.325 HP a 1.000 metros.Armamento: Seis ametralladoras Browning MG 53-2 de 5 pulga- das y dos bombasde 225 kilogramos. Velocidad: 570 kmlph "limpio" y 500 kmlph con dos bombas a 1.500 metros. Techo: 7.600 metros. Alcance: 880 kilmetros. Peso vaco/cargado: 2.76014.850 kilogramos. Envergadura: 11.35 metros. Longitud: 9.80 metros. Para fines experimentales, se en- treg a Inglaterra un A-36.

    Abajo: El A-36 "lnvader", conocido como "la muerte susurrante" por los alemanes, a causa de su silencioso motor Allison.

    motora ms con seis carros y rodeada de caones. Vimos saltar al maquinista apre- suradamente y tambin la volamos".

    El mismo da, en otra misin poste- rior, el teniente J. B. Walton y el otro A-36 que formaba pareja con l atacaron un convoy de unos setenta y cinco ca- miones. El camin que iba en cabeza se precipit a la cuneta para escapar a sus atacantes pero Walton le dispar una ro- ciada de proyectiles. A l bordear la falda de una montaa vio otros dos camiones llevando unos treinta hombres cada uno.

    Los soldados empezaron a saltar en el preciso momento en que Walton abra fuego sobre ellos. Entonces vio una 18co- motora: apunt hacia ella y apret el botn de fuego. Un blanco directo en la caldera la dejb parada soltando vapor por una hilera de agujeros. Entonces em- pez a producirse cierta reaccin anti- area contra los cazabombarderos norte: americanos. Waltoi? atac el emplaza- miento artillero desde el sector muerto de la montaa y bam a los simientes con una corta rfaga. Despus aument la velocidad y se alej.

    Desde su primer combate, los A-36 fueron dados a conocer al pblico como P-51. Esto era inaceptable para los pi- lotos de los cazabombarderos que no que- ran ser confundidos con pilotos de P-5 1 ' o Mustangs. Trataron entonces de encontrar un nuevo nombre ms acor- de con las misiones que estaban llevando a cabo y despus de varias sugerencias se acept la del teniente Robert Walsh:

    -Por qu no llamarle "Invader" (invasor)? Ahora mismo se est utilizando para invadir Sicilia; cualquier da, no

    Este A-36, volando sobre el Vesubio, muestra la similitud de perfil con el Bf 109.

  • dentro de mucho, estaremos invadiendo Europa.

    El nombre fue aceptado por los dems pilotos e hizo fortuna poco despus re- cibi la sancin oficial y el A-36 ya qued como Invader.

    Los A-36 no entablaron combate con cazas enemigos sobre Sicilia a menudo, pero el capitn Tom Thomas fue uno de los pocos que tuvo esta oportunidad. Iba al frente de un grupo de A-36 cuando apareci un solitario caza alemn. Tho- mas se situ rpidamente por su cola y abri fuego, pero de pronto advirti el humo de las trazadoras y empez a reci- bir impactos en su propio avin. Tir de palanca hacia si desesperadamente para ganar altura y salt del aparato a slo 300 metros: su paracadas tuvo el tiempo justo para abrirse antes de engancharse en un edificio mientras l tocaba tierra en la caja de un camin. Inmediatamente se vio rodeado de italianos, por lo que no pudo hacer otra cosa que rendirse. Le condujeron a un hospital con quemaduras en la cara y piernas y una pierna fractu- rada, pero como los italianos no pudieron trasladarle despus a la pennsula, pudo ser liberado por los aliados cuando toma- ron Palermo.

    A medida que los aliados proseguan su aplastante avance sobre Sicilia los grupos de A-36 fueron siendo trasladados a bases avanzadas en la isla. Desde stas, los Invaders podan internarse ms pro- fundamente sobre territorio enemigo y prestar mayor apoyo a las fuerzas de tierra. Curiosamente eran avudados en gran manera por los sicilianos, que no simpatizaban con los alemanes. En nu- merosas ocasiones los paisanos seala- ban a los rasantes aviones aliados las po- siciones enemigas camufladas, que eran as atacadas por los cazabombarderos.

    Los pilotos aprendieron a aprovechar al mximo el elemento sorpresa en el ataque a instalaciones de tierra. Ms de un piloto aprendi a su costa que los alemanes eran muy certeros con las ametralladoras y artillera* ligera anti- area. La regla de oro pareca ser. nunca jams volver a dar una segunda pasada a menos que se haya llegado a la destruc- cin total en la primera.

    A fines de agosto de 1943 la campaa de Sicilia haba concluido y se iniciaron los ataques contra la Italia continental en preparacin de la invasin.

    En la maana del 3 de septiembre, las tropas aliadas pisaron las playas de Italia y los grupos de A-36 volaban cubriendo la cabeza de playa, bombardeando empla- zamientos artilleros y atacando blancos de superficie.

    No hay ninguna misin ms difcil para un avin monomotor que el apoyo directo a tierra. el enemigo dispara contra el con todo lo que tiene a mano, incluso fusiles y pistolas y estos aviones deben ser capaces de aguantar el mayor castigo para sobrevivir a tal oposicin y volver con su piloto a la base. Pues el A-36 era excepcional en este sentido.

    En cierta ocasin, un A-36 que atacaba a un blanco terrestre volando a slo doce metros de altura produjo la violenta ex- plosin de su objetivo. No haba otra al- ternativa, de modo que vol a traves de la metralla y el piso de la cabina se vio perforado por granadas que, afortunada- mente, no alcanzaron al piloto. Los pla- nos resultaron acribillados y a los alerones les falt poco para quedar arrancados de cuajo; en las alas se vean agujeros de ms de quince centmetros de dimetro mien- tras que el revestimiento metlico estaba arrancado y retorcido. Haba agujeros en toda la extensin de las alas y la punta del plano derecho estaba parcialmente arrancada, colgando y doblada hacia arri- ba. Los estabilizadores de cola quedaron doblados hacia arriba y llenos de perfo- raciones, el borde de ataque del izquierdo haba desaparecido por completo; los elevadores y el timn todava podan con- trolarse, pero el mando de alabeo fue cali- ficado de "perezoso"; la carlinga estaba llena de humo y apenas podan verse los instrumentos, pero el piloto pudo adver- tir que el altmetro marcaba 350 metros. Despus de volar unos cuarenta kilme- tros el motor se par, de modo que el piloto abandon el avin y salt en para- cadas. Al llegar al agua empez a nadar hacia tierra, pero fue recogido por una lancha italiana y trasladado a una peque- a isla prxima a la costa donde fue reci- bido por paracaidistas norteamericanos que, pocos das antes, la haban ocupado.

    Pero no todos los pilotos tuvieron tanta suerte. Una patrulla de cuatro In- vaders atacaba una fila de vagones de carga situados en una va muerta cuando al ser alcanzados por las seis ametrallado- ras de uno de ellos se produjo una tre- menda explosin. Al parecer los vagones

    Arriba: Los desembarcas aliados en la Italia continental son seguidos del acopio de grandes canti- dades de pertrechos. Abajo: Un pequeo ejemplo del estado en que, amenudo, regresaba el ro- busto P-51.

  • estaban cargados de municiones y el avin se desintegr en pleno vuelo. Tan violenta fue que sus compaeros resul- taron tambin acribillados y maltrechos, pero les acompa la suerte lo suficiente para que pudieran regresar.

    Tampoco sobre Italia se vieron envuel- tos los Invaders en combate con cazas enemigos sino muy rara vez, principal- mente debido a que los A-36 se dedicaban al bombardeo en picado y ataque rasante y a menos que el enemigo intentase inter- ceptarlos, raramente llegaron a ver cazas alemanes. No obstante la Luftwaffe haba sufrido lo suficiente a manos de los A-36 como para darse cuenta de que era un for- midable adversario a baja cota. Los In- vaders podan alcanzar mayor velocidad y eran ms maniobrables que los cazas alemanes y a menudo se beneficiaron de ello; sobre la cabeza de playa de Salerno se apuntaron ms de una docena de cazas alemanes a costa de una sola prdida en combate areo.

    Poco despus de la invasin se design a cuatro pilotos de Invader para llevar a cabo una misin ciertamente desacos- tumbrada: cierto nmero de paracaidis- tas norteamericanos haban quedado co- pados y desabastecidos y para auxiliarles volaron el teniente J. B. Walton y tres pilotos ms de la 524 Escuadrilla de caza- bombarderos; los bultos conteniendo v- veres y municiones fueron slidamente empaquetados y sujetos a los soportes de las bombas, quedando los aviones tan pe- sadamente cargados que apenas podan despegar. Una vez confirmada la situa- cin de las tropas cercadas, los A-36 se abatieron sobre la posicin y dejaron caer sus cargas con exacta puntera. Re- forzados con los suministros que tan de- sesperadamente necesitaban, los paracai- distas pudieron resistir hasta que un grupo de refuerzo pudo abrirse paso, combatiendo, hasta ellos; de este modo se encontr una nueva misin para los ver- stiles Invaders.

    El 10 de septiembre de 1943 la activi- dad del 27.O Grupo de cazabombarderos alcanz su plenitud en Salerno, donde las tropas norteamericanas que desem- barcaban necesitaban ayuda. Tres divisio- nes blindadas alemanas estaban dirigin- dose hacia aquella zona, en un desespera- do intento de arrojar al mar a las fuerzas invasoras: se arm con bombas y muni- ciones a los A-36 que los machacaron

    una y otra vez con bombas y ametralia- doras a medida que se acercaban por la carretera, con tan notable xito que aquel da se le concedi al 27.O Grupo la citacin como "Unidad Distinguida".

    Estas misiones de apoyo a tierra conti- nuaron efectundose por los pilotos de los Invaders durante la ocupacin de An- zio, ya en ruta hacia Roma, y se prolon- garon hasta que a principios de la prima- vera de 1944 en que sus ya gastados avio- nes fueron reemplazados por los P-47, mucho mayores y ms pesados, que fue- ron aceptados de mala gana por los pilo- tos. Todos aquellos que haban volado con los Invaders no olvidaran nunca sus fieles A-36 que tantas veces les haban llevado al combate y de regreso a la base, ni tampoco los alemanaes olvidaran aquellos "demonios aulladores" que les haban rociado de bombas.

    Cuando se constituy inicialmente en Inglaterra la Octava Fuerza Area no se tom seriamente en consideracin el pro- blema de la escolta de cazas para los bom- barderos pesados. Para ser exactos, en 1942, el geherai Arnold, comandante ge- neral de la Fuerza Area del Ejrcito, en- vi un telegrama al general James E. Che- ney manifestando que se enviaran a Gran Bretaa cinco m p o s de caza: dos para la defensa del ~ & e - d e Irlanda y tres como fuerza de ataque contra la aviacin ale- mana. Pero cuando se fueron aplicando los planes a las operaciones de los B-17 que despegaban desde las Islas Britnicas se decidi cambiar los planes tcticos, de modo que los cazas norteamericanos ser- viran de escolta a los bombarderos hasta donde alcanzase su radio de accin; desde este punto la defensa de los grupos de bombarderos se confiara al vuelo en for- maciones cerradas defensivas.

    En la primavera de 1942 Cheney supo que los nicos modelos de cazas disponi- bles para las operaciones iniciales de los B-17, que estaban a punto de llegar, se- ran los Curtiss P-40 y Be11 P-39 y abriga- ba serias dudas de que estos tipos de avio- nes pudieran cumplir su misin como es- coltas, por lo que expuso el problema al mariscal del Aire de la RAF, Portal, su- giriendo que se equipara a las unidades de caza norteamericanas con Spitfires: tambin le comunic el envo de un n- mero equivalente de P-40 al Prximo Oriente para cooperar con los ingleses. Consideraba que el Spitfire era el caza

    ms logrado de la guerra, el ms Capaz Arriba: Los P-47 Thunderbolts, reemplazados de adaptarse a su misin de proporcionar por 10s A-36 en Italia en la primavera de 1944. cobertura a las misiones de bombardeo Abajo: Mariscal del Aire Sir Charles Portal. dentro de su alcance.

    El consejo de Portal fue tomado en consideracin y cuando el 31 Grupo de Caza, el primero en llegar, estuvo en In- glaterra en junio de 1942 fue dotado de Spitfires y empez su adiestramiento para el combate. Poco despus empezaron a llegar elementos del l.m Grupo de Caza con aviones P-38 y, permitindoles con- servar sus propios aviones, se incorpora- ron al adiestramiento intensivo de com- bate bajo tutela de la RAF.

    El 17 de agosto de 1942 doce B-17 del 97 Grupo de Bombardeo efectuaron su primera misin de bombardeo desde su base en Inglaterra. Protegidas por una fuerte escolta de Spitfires de la RAF, las "Fortalezas Volantes" atacaron las con- centraciones enemigas que se organizaban en Rouen y Sotteville, en Francia, y aun- que fueron vistos tres Messerschmitt 109, no hicieron ningn intento de atacarles. El xito de esta misin estimul el opti- mismo en crculos norteamericanos y el

  • gar, 10s alemanes estaban tanteando las formaciones de bombarderos para deter- minar su capacidad defensiva; en segundo, estas misiones con escasa penetracin estaban fuertemente escoltadas y 10s ale- manes no tenan intencin de entrar en

    36

  • gran motor "Pratt and Whitney", con su marcada tendencia a tragarse el combus- tible. Inicialmente se importaron de los Estados Unidos tanques lanzables de 750 litros de capacidad, hechos de papel resinado, que se fijaron al vientre del avin, pero no resultaron satisfactorios, principalmente debido a que no poda aspirarse el combustible de ellos a alti- tudes superiores a los 7.000 metros; tambin se vio que tenan prdidas y causaban gran resistencia aerodinmica al avin. Los P-47 se las arreglaron con aquellos tanques hasta que se fabricaron en Inglaterra otros tanques de papel de 400 litros de capacidad que estuvieron disponibles en julio de 1943. Estos nue- vos tanques tenan una configuracin presurizada, pero no comenz su produc- cin en cantidad hasta septiembre de 1943.

    Durante los meses de verano los gm- pos 4, 56 y 78 volaron con los P-47 y lle- varon el peso de las misiones de escolta, llevando a cabo una excelente tarea sobreponindose a los inconvenientes iniciales del Thunderbolt y llevando la guerra area sobre el territorio enemigo hasta el lmite de su autonoma, pues los creadores de la ofensiva area combinada deseaban llevar hasta lo ms profundo del territorio enemigo el programa del bombardeo estratgico, donde no poda llegar el P-47; todo lo que podan hacer con los medios de que disponan era enviar escolta de cazas acompaando a los bombarderos, tenindolos que abandonar a sus propios medios despus para que continuasen hasta sus objetivos. Ms tarde se enviara una nueva escolta para incorporarse a los bombarderos en su regreso para dejarlos con seguridad en sus bases britnicas.

    En vista del aumento de los ataques de bombarderos aliados, la Luftwaffe empez tambin a aumentar su actividad en el Oeste y se le dio primera prioridad a la produccin de cazas, de modo que entre el primero de enero de 1943 y el 1 de noviembre del mismo ao la fuerza de caza de la Luftwaffe en el frente oc- cidental pas de 670 a 1.660 aviones. La Luftwaffe cre seis sectores de caza diurna entre Trondheim y Hendaya y de- sarroll un sistema de radar muy eficiente para advertir la aproximacin de los avio- nes aliados. Se reagrup a los pilotos para destinar a los mejores y ms experimenta-

    dos a la defensa area del Gran Reich y muchos de los ms vetepnos fueron tam- bin trados a la patria desde el frente de Rusia para reforzar su defensa. Cuando los P-47 empezaron a aventurarse sobre Alemania comenzaron los combates a- reos importantes y tambin aumentaron las prdidas de bombarderos. El 17 de abril de 1943, 106 bombarderos norte- americanos atacaron Brem~n, de los cuales se perdieron diecisis, en una de las primeras misiones en las que penetra- ron los Thunderbolts sobre Alemania.

    En junio de 1943, el VI11 Mando de Bombarderos se arriesg sobre Alemania sin escolta de cazas y sufri grandes pr- didas: de los sesenta B-17 que atacaron Kiel el 13 de junio fueron derribados veintids, debido principalmente a los duros ataques de los Messerschmitt 109, G r u ~ ~ e : Unidad normal de caza Focke Wulf 190, Messerschmitt 110 e (dividida en "Staffeln" de incluso Junkers Ju-88, que atacaron a las formaciones de bombarderos con cre- ciente intensidad. Los cazas daban sus estruendosas pasadas adelantando a las formaciones de bombarderos, en tanto que los bimotores Messerschmitt 110 y Junkers Ju-88 disparaban contra los bom- barderos sus caones de 20 milmteros desde fuera del alcance de las ametralla- doras de stos. Ocho das despus caye- ron otros diecisis bombarderos en el ataque a la planta de caucho de la 1. G. Parben en Huls, en el valle del Ruhr.

    El VI11 Mando de Bombardeo volvi al ataque sobre Oschersleben y Kassel el 28 de julio, encontrando tenaz oposi- cin enemiga, como consecuencia de la cual se perdieron veintids B-17 y estas prdidas hubieran sido, sin duda, mayo- res, de no haber contado con la defensa que les proporcionaron ciento cinco P-47, provistos, por primera vez, de tanques su- pletorio~ lanzables, lo que les permiti salir a su encuentro a 400 kilmetros de la costa inglesa. Estos cazas soreprendie- ron a un grupo de unos sesenta aviones enemigos persiguiendo a los maltrechos bombarderos y consiguieron derribar nueve de ellos antes de romper el con- tacto.

  • Arriba: LOS B-17, resultaron muy maltratados en la incursin sobre Kiel en junio de 1943. Abajo: Algunos fueron bastante afortunados como para regresar a pesar del grave castigo recibido. I deros B-17, que seran escoltados por dieciocho escuadrillas de P-47 y diecisis

    de Spitfires de la RAF hasta donde se lo permitiera su autonoma; cuando les abandonase su escolta, los bombarderos proseguiran solos hacia su objetivo diri- gindose despus a las bases norteameri- canas en el Norte de Africa. Aunque los resultados del bombardeo fueron muy buenos, las "Fortalezas Volantes" estu- vieron bajo constantes ataques casi desde el momento en que les dejaron los cazas de escolta hasta que, para sorpresa del enemigo, continuaron hacia el Medite- rrneo. De los 127 bombarderos que par- ticiparon en la operacin fueron derri- bados veinticuatro. Tres horas y cuarto despus de la salida de la fuerza de bom- bardeo contra Regensburg, despeg otra, compuesta por 230 Fortalezas destinadas a bombardear las fbricas de cojinetes de Schweinfurt; ambas misiones se escalo- naron de manera que los cazas que regre- saran de escoltar la primera pudieran re- postar para escoltar la segunda; sin em- bargo, esto tambin dio tiempo a los

    cazas de la Luftwaffe para tomar tierra, reaprovisionarse de combustible y muni- ciones y salir de nuevo al aire. De la fuer- za atacante sobre Schweinfurt se perdie- ron treinta y seis bombarderos, dando, pues, un total de sesenta prdidas como balance del da. Esto representaba el 19 por 100 de la fuerza atacante en am- bas misiones y de no haber continuado una de ellas hasta Africa, las prdidas, sin duda, hubieran sido an mayores, al tener que combatir durante el regreso hasta el punto donde podan ser protegidos de nuevo por su escolta.

    La escolta de gran alcance pudo de- mostrar su capacidad el 27 de septiembre de 1943 cuando los P-47 pudieron acom- paar a los bombarderos durante todo el camino hasta Emden. Con la ayuda de tanques supletorios lanzables de 280 li- tros los Thunderbolts pudieron hacer el viaje completo a Alemania; las prdidas de bombarderos bajaron a slo siete de los 244 que realizaron el ataque. Por su parte, los P-47 reivindicaron la destruc- cin de veintin cazas enemigos a cambio de slo dos propios.

    En tanto que los cazas podan acom- paar a los B-17 B-24, las prdidas eran relativamente ligeras pero, en cuanto los bombarderos se aventuraban solos en te- rritorio enemigo, ascendan vertiginosa- mente. El punto ms alto se alcanz en octubre de 1943 durante el regreso de los B-17 de las fbricas de cojinetes de Schweinfurt: el da 14 de este mes se en- viaron 29 1 B-17 en dos divisiones de For- talezas; ambas cruzaron juntas la lnea de la costa, separadas unos cincuenta kil- metros, escoltadas por los P-47 hasta don- de su combustible se lo permiti y desde all prosiguieron solas. Cuando esta fuerza se retiraba, en las proximidades de Aquis- grn, a unos 400 kilmetros de la costa britnica, la Luftwaffe atac en oleadas.

    Tom parte todo tipo de avin capaz de efectuar una interceptacin y los bom- barderos soportaron un terrible castigo en pasadas sucesivas en ambos sentidos; los bimotores se colocaron por la cola de las Fortalezas y dispararon granadas con- tra la formacin: incluso se intent el bombardeo aire-aire. Bajo el fuego anti- areo y los ataques de la caza, aquel da cayeron sesenta bombarderos del VI11 Mando, otros diecisiete sufrieron graves averas y 12 1 ms recibieron otros daos. Los archivos del Alto Mando alemn con-

  • El espacio sobre una base de cazas de la Octava tas relativas a los daos recibidos por el pios del otoo de 1943, 10s Thunder- Mando de Caza, William K ~ ~ ~ ~ ~ , consi- Fuerza Area en Inglaterra; los Mustangs se objetivo, ste slo experiment un retraso "lts podan gui soslayar esto por medio de un acuer- salen de la formacin para tomar tierra. temporal en su produccin. mucho, hasta 600 kilmetros. do segn el cual el apoyo y proteccin

    recio P-47 haba cumplido la dura a 10s bombarderos pesados se consideraba La Octava Fuerza Area se encontraba tarea de batir a la Luftwaffe en 10s cie- como misin de todas las uni- ahora frente a una decisin radical: PO; dra continuar la campaa de bombardeo los, hasta all donde le permita llegar su dades de caza norteamericanas basadas diurno frente a tran tremendas prdidas? autonoma, pero ya, su ra- en Gran Bretaa. Prcticamente, los p-51

    firmaron slo la prdida de treinta y ocho Sin cazas de escolta, las prdidas haban dio de accin era suficiente. de la Novena Fuerza Area perteneceran cazas de la Luftwaffe y veinte averiados. llegado a ser prohibitivas. Podra dispo- En de 1943 Ueg al este- durante algunos meses al VI11 Mando de Afortunadamente los Thunderbolts del nerse de algunos P-38, pues sus tanques de la guerra la pfimera unidad de Caza. "111 Mando de Caza y los Spitfires de la supletorios les permitan un radio de caza Mustang; sin Para RAF salieron al encuentro de la maltre- accin mximo de 350 kilmetros, pero di"usto Mando de Caza, fue

    fuerza y 10s escoltaron hasta Ingla- incluso con los tanques de 400 litros, asignada a la recin transferida Novena terra. A pesar de las previsiones optimis- con los que ya poda contarse a p h c i - Fuerza Area. El general jefe del VIII

    44 45 1

  • tren

  • El avin que acababa de llegar a Ingla- terra como original caza de escolta de gran alcance proceda del maridaje de la clula del Mustang de la North American con el motor Rolls Royce Merlin cons- truido por la Packard Motor Corporation. La Packard haba negociado el comienzo de la fabricacin de este motor durante el verano de 1940, cuando Inglaterra buscaba ansiosamente la ayuda norte- americana para la adquisicin de aviones y motores. En un edificio que no se uti- lizaba, la Packard empez a instalar sus cadenas de montaje en Detroit, para la produccin del motor Merlin XX. El mo- delo inicial de este motor, del tipo "V" y doce cilindros en lnea, fue designado por la Fuerza Area del Ejrcito norte- americano como V-1650; los primeros empezaron a salir de las lneas de montaje en septiembre de 1941 y se utilizaron para el avin Curtiss P-40-F.

    Las pruebas del Mustang Mark 1, efec- tuadas por el Mando de Caza de la RAF haban dado por resultado reconocer que la autonoma y maniobrabilidad del avin eran excelentes, pero que lo que en reali- dad necesitaba para mejorar sus caracte- rsticas a gran altitud era el motor Merlin. El comandante Tommy Hitchcock, en- tonces agregado areo norteamericano en Londres empez a insistir en que se hi- cieran las modificaciones oportunas en el avin norteamericano para instalarle el motor ingls.

    En la primavera de 1942 se entregaron cuatro Mustangs a la factora de Hucknall de la Rolls Royce, donde se hicieron las modificaciones oportunas para acoplar el motor Merlin al avin; las exigencias de refrigeracin del nuevo motor necesita- ban un radiador mayor, tambin la toma de aire tuvo que modificarse instalando una bajo el motor, semejante a la del Spit- fire y para compensar la mayor potencia del motor Merlin, de 1.500 caballos, se cambi la hlice por otra Roto1 de cuatro palas.

    Las pruebas hechas por los ingleses co- menzaron en octubre de 1942 y los re- sultados fueron impresionantes. Las cifras finales de las caractersticas del avin

    El XP-515, un P-51A modificado para montar el motor Rolls-Royce construido por Packard. Posteriormente ya no se construyeron ms Mustangs con motor Allison.

  • l ! Arriba: Mustangs recin salidos de fbrica en Los Angeles, esperando para su embarque. Abajo: Lineas de montaje en la fbrica de Dallas. Los Mustangs procedentes de sta ostentaban la

    ' i designacin P-51-C-NT. I2

    mostraban una velocidad mxima de 695 kilmetros por hora a 6.700 metros, con el sobrealimentador abierto al mxi- mo y el piloto ingls estaba entusiasmado por lo que se refera a sus cualidades en el aterrizaje; en lo nico que todava era aventajado por el Spitfire era en el radio de evolucin, que permita a ste volver sobre s mismo en un crculo ms cerra- do. Los resultados de las pruebas se en- viaron inmediatamente a la US Army Air Force y a la North American Aviation. Simultneamente, los ingenieros de la North American haban montado el motor Merlin fabricado por la Packard en el Mustang, a modo de prueba y como consecuencia se firm un contrato por la US Army Air Force con aquella firma para la adquisicin de 400 Mustangs con motor Merlin, que seran designados como P-5 1 B-1 NA. Aunque al principio, los Mustangs con motor Merlin se tena previsto que se llamasen P-78, despus de haber instalado este motor en dos Mustangs se decidi que no se construi- ran ms con el motor Allison, por lo que se abandon esa designacin.

    El primer vuelo de pruebas del 'caza norteamericano modificado tuvo lugar el 30 de noviembre de 1942 con el piloto de pruebas de la North American, Bob Chilton, a los mandos. Se inform de sus excelentes cualidades de vuelo, pero el avin se vio obligado a tomar tierra a los cuarenta y cinco minutos de vuelo de- bido a recalentamiento del motor. Era necesario efectuar modificaciones en el radiador por lo que no se volvieron a hacer pruebas hasta diciembre de 1942; los resultados finales mostraron una velo- cidad mxima de 700 kilmetros por hora a 9.000 metros comparadas con los 620 kilmetros por hora del motor Alli- son a 2.600 metros. La mejora en todos los aspectos era tan notable que se or- den la produccin en masa del avibn. El P-5 1B-NA se producira en la North American de Inglewood, California, y se abri una nueva planta en Dallas, Texas; el avin salido de esta ltima se le desig- nara P-5 1 C-NT.

    El 4 de noviembre de 1943 se present en el aerdromo de Greenham Commons en Berkshire, un grupo de jvenes pilotos norteamericanos. Formaban el 345 Grupo de Caza de la Fuerza Area del Ejrcito de los Estados Unidos y la inmensa mayo- ra de ellos no tena experiencia de com-

    bate, sino que acababan de finalizar su adiestramiento en los Estados Unidos en los Be11 P-39 Airacobras. Segn haba sido costumbre con todos los grupos an- teriores a ellos, esperaban que se les da- ran Republic P-47, pero a su llegada a Greenham Coomons se les comunic oficialmente que eran el primer grupo norteamericano en el teatro de operacio- nes europeo que sera dotado con el nue- vo modelo del P-5 1 B Mustang.

    Los pilotos comenzaron a despedirse de inmediato de los P-5 1 A de los grupos de Reconocimiento 10' y 67 O, lo que se termin prcticamente en una semana. El 1 1 de noviembre llegaron los cinco pri- meros P-51B y tan pronto como los pi- lotos comprobaron sus caractersticas, se entregaron por completo al nuevo Mus- tang. Hacia mediados de noviembre el grupo se traslad a la base de Boxted, cerca de Colchester, en Essex, donde re- cibieron los restantes aviones y comenza- ron un programa de adiestramiento in- tensivo. Los ojos de la plana mayor de la Octava Fuerza Area estaban puestos esperanzadamente en esta nueva unidad de caza de la Novena Fuerza Area, pues con su gran alcance de 900 a 1.000 kil- metros, aquellos aviones podran inter- narse en Alemania lo suficiente para es- coltar a los bombarderos hasta cualquier objetivo previsto.

    Despus de slo unas pocas semanas de adiestramiento operativo, el 354 Grupo se prepar para su primera operacin de tan- teo sobre la costa belga y Paso de Calais, que tendra lugar el 1 de diciembre. Al frente de este vuelo fue el veterano jefe del 4.O Grupo de Caza, el coronel Don Blakeslee, con veinticuatro Mustangs que condujo sobre las aguas del Canal y a lo largo de la costa, donde pudieron ver por primera vez los feos negros bullones de humo producidos por las explosiones de las granadas antiareas. La misin slo dur una hora y veinte minutos, sin in- terceptacin ni incidente ninguno, pero las superficies de algunos de los Mustangs mostraron las perforaciones de la metra- lla, de modo que poda decirse que el grupo haba recibido oficialmente su bau- tismo de fuego.

    Despus de otra corta misin en la zona de Amiens el 5 de diciembre, el 11 del mismo mes realiz su primera es- colta a los bombarderos sobre Emden. Hubo encuentro con aviones enemigos,

  • pero no se registraron bajas; no obstante, el Grupo tuvo su primera prdida al no poder regresar a la base uno de los aviones por avera en el motor.

    El 13 de diciembre el 354 Grupo vol en escolta de bombarderos sobre Kiel y tuvo un encuentro con una formacin de Messerschmitt 110, en cuyo combate se produjo el primer derribo enemigo, rei- vindicado por el teniente Glenn T. Eagle- ston en el siguiente parte:

    "Volbamos apoyndonos mutuamen- te el teniente Emmer y yo en una forma- cin de patrulla, de regreso a nuestra base despus de haber participado en una mi- sin de escolta sobre Kiel, cuando observ un Me-110 a unos 900 metros por debajo y hacia la derecha. Volbamos a unos 5.500 metros en las cercanas de Frede- rick Stach y, al ver al enemigo, como no tena comunicacin radio con Emmer me deslic bajo l y le di cuatro pasadas al

    El coronel Don Blakeslee, jefe del 364 Grupo "Pioneer Mustang" en su primera misin.

    El teniente Glenn T. Eagleston (a la izquierda de la pizarra), dando instrucciones junto a su avin. A l se debi el primer derribo que se atribuy el 364 Grupo.

    Me-1 10 con los siguientes resultados: en la primera dispar una corta rfaga acer- cndome a noventa grados hacia su cola entre 1 .o00 y 300 metros, sin observar impactos. El artillero de cola hizo fuego al pasar yo por su estela. En la segunda pasada dispar una rfaga de un segundo y medio de duracin desde 200 metros por su cola y ligeramente desde arriba, observando impactos en el fuselaje; el artillero de cola dispar intermitente- mente durante este encuentro y ya no volvi a hacerlo despus. En la tercera pasada dispar una rfaga corta desde 300 metros por su cola y ligeramente desde arriba; alcanc su motor derecho. que estall en llamas y vi saltar trozos del motor. En la cuarta, me situ por la cola y Ligeramente encima, pero mis ametralladoras estaban encasquilladas y no hice fuego, rompiendo el contacto.

  • El avin enemigo no emprendi ninguna accin evasiva despus de la segunda pasa- da y cuando lo observ por ltima vez se encontraba en planeo suave, con el motor derecho parado y ardiendo, dirigindose hacia las nubes cuya altura estimada era de unos 2.000 metros. Regres solo a la base."

    Este primer encuentro del teniente Engleston sac a la luz un defecto que continuara atormentando durante algu- nos meses a los pilotos de los Mustangs. Las cuatro ametralladoras instaladas en las alas del P-5 1B estaban inclinacias de manera tan pronunciada que casi se apo- yaban de costado, de forma que cuando se ejecutaban maniobras de varios "g", la municin tenda a acumularse en los alimentadores dando lugar al encasquilla- do del arma. Como remedio de fortuna se montaron motores para las cintas de mu- nicin, pero el problema no se resolvi del todo hasta que en los ltimos modelos de Mustang se pusieron las ametralladoras derechas, adems del motor para las cin- tas de municionamiento.

    La primera victoria oficial para el 354 Grupo y para el Mustang de la Army Air Force se la apunt el teniente Char- les F. Gumm en una misin de escolta sobre Bremen el 16 de diciembre de 1943. El teniente Gumm y su punto, el teniente Talbot, vieron cuatro Messer- schmitt 109 enfilando por la cola a un grupo de bombarderos y se lanzaron al ataque: los pilotos de la Luftwaffe vieron tambin a los Mustangs y dos de ellos se separaron en un intento de distraerlos; sin embargo, los norteamericanos no iban a abandonar su iarea y continuaron subiendo en persecucin de los dos Messerschmitt restantes. Cuando Talbot estuvo en posicin, su presa pic virando a la izquierda: Gumm continu cerrando distancias rpidamente hacia su vctima mientras Talbot le cubra. Abri fuego a unos 100 metros; una rfaga de dos se- gundos no mostr seales apreciables, as que Gumm se acerc an ms, a unos 50 metros del alemn y esta vez una r- faga de tres segundos arranc una fina

    La cmara sincronizada con las ametralladoras registra el final de un Bf 109. Despus de este combate se encontraron piezas del desintegrado avin incrustadas en los planos del caza norte- americano.

    estela de humo del motor. A cortsima distancia apret de nuevo el botn de disparo y fue recompensado con una nube negra de humo de aceite y iin ras- tro de piezas que se desprendieron del enemigo. El alemn cay sobre el plano izquierdo dejando una larga estela de humo que sala de su motor en llamas. Se haba derramado la primera sangre por un Mustang.

    Despys de este primer xito, los Mus- tangs del 354 empezaron a mejorar el tanteo con regularidad. Los P-5 1 encon- traron grandes formaciones de Messer- schmitt 109 y 11 0 en una misin de es- colta sobre Kiel el 5 de enero de 1944 y cayeron 16 aviones enemigos bajo su fue- go sin una sola prdida propia.

    Seis das despus fueron derribados otros quince aparatos de la Luftwaffe en un gran combate areo en la zona de Halberstadt y Oschersleben: el campen de aquel da fue el antiguo "as" de los "Flying Tiger", el comandante James H. Howard. Cuando aparecieron los cazas enemigos los P-51 rompieron la forma- cin para atacarlos dejando, sm el menor protocolo, a su jefe, el comandante Ho- ward, fuera del dispositivo de ataque. Los bombarderos estaban bajo el fuego de los cazas alemanes por todas partes y Ho- ward vio un grupo separado de bombarde- ros que estaba absorbiendo todo el cas- tigo que podan administrarle unos cua- renta cazas enemigos.

    Inmediatamente se lanz al ataque con su Mustang, que llevaba el nombre de "Ding Hao": el primero que se cruz en su camino fue un Messerschmitt 110, caza bimotor, que tras recibir unas pocas rfagas de sus ametralladoras estali en llamas y se estrell en el terreno cubierto de nieve.

    Entonces vio un Focke Wulf 190 bajo l, que puso proa al sol tan pronto como vio al Mustang. Howard maniobr para ponerse por su cola, le lanz una rfaga devastadora de sus cuatro ametralladoras calibre .50 y contempl al piloto mientras saltaba en paracadas. El siguiente en su- frir las iras de Howard fue un Messer- schmitt 109: el piloto alemn intent dejarse adelantar por el P-5 1 bajando sus flaps, pero el Mustang hizo lo mismo y permaneci en la cola de su enemigo: el 109 cay dejando una estela de humo tras s.

    Howard ascendi de nuevo hacia los

    5 5

  • cuando volaban sobre Inglatena con los do estaba maniobrando para colocarme Mustang Mark 1, tambin les ocurri lo en posicin fui acometido por un P-47 1 mismo sobre el continente. En diversas por mi cola recibiendo impactos en el ocasiones los Mustangs del 354 Grupo fuselaje y en un plano. Romp el contacto fueron atacados por los Thunderbolts y vigil al P-47 durante un minuto hasta P-47 por lo que, despus de haber ocurri- que, convencido de que ste me haba do vanos de estos incidentes, el VI11 Man- reconocido debidamente, piqu contra do de caza hizo circular entre los pilotos dos Me-109 que, 300 metros ms abajo, un boletn advirtiendo que deba hacerse se aproximaban a la cola de mi pareja. un detenido estudio del reconocimiento Cerr rpidamente distancias sobre el de las siluetas de los aviones en cuestin. ms prximo Y le lanc una larga rfaga Uno de los pilotos que fue atacado por desde unos 100 metros por su cola, ob- un avin "amigo" fue el teniente Glen servando impactos en el fuselaje. Vir Eagleston que relataba as el encuentro: para mantener mi cola despejada, descn-

    "Yo iba al frente de un vuelo com- biendo un crculo, observando entonces puesto por tres aviones en la incursin cmo mi compaero haca fuego contr: que tuvo lugar sobre Brunswick en fe- un Me-109 que pareci estallar y queda brero de 1944. Cerca del lago Steinhuder fuera de control. Mi pareja se reunii vir hacia el sur para investigar un "bo- conmigo y emprendimos el regreso, pues gey" (avin enemigo) y vi seis Me-109 a mi motor se empezaba a recalentar. La

  • Plane hasta 3.900 metros y salt del avin a los 3.700 metros, llegando a tierra sin novedad."

    Pero el problema de identificacin tambin tena lugar en el campo contra- rio, como pudo comprobar un da el te- niente Jack T. Bradley del 354 Grupo:

    "Voibamos cierto da en formacin bastante abierta durante una bsqueda y no poda ver al resto de mi escuadrilla pero saba aproximadamente dnde esta- ban y no tena dificultad en localizarlos por radio. Ped a uno de los de la escua- drilla que me diera su posicin, lo que, efectivamente, hizo y siguiendo sus ins- trucciones me incorpor a la que crea mi escuadrilla durante tres o cuatro minutos. Mirando casualmente hacia un lado des- cubr que estaba en medio de una forma- cin de Messerschmitt 109, que me re- conocieron casi al mismo tiempo que yo a ellos. En mi vida he visto tantas cruces negras: estaba completamente rodeado. Los alemanes intentaron lanzarse sobre m, pero yo solt los tanques supletorios y me met en un picado alejndome de la formacin: pronto se dieron cuenta de que era demasiado rpido para ellos y volvieron a su formacin."

    El 354 Grupo continu apuntndose xitos regularmente en sus misiones de escolta acompaando a los bombarderos sobre objetivos tales como Frankfurt y Brunswick. El 11 de febrero tuvieron otro da grande, pero esta vez les cost su jefe, el teniente coronel Kenneth R. Martin que cay despus de una colisin en vuelo. El mismo lo relata as:

    "Los alemanes nos estaban esperando para impedirnos nuestra reunin con los bombarderos; primero nos atacaron desde arriba cuando cruzamos la costa francesa, a la ida, y luego nuevamente cuando ya estbamos cerca de los bombarderos. Su radar siempre poda ponerlos encima de nosotros: usualmente iban contra los bombarderos pero haban comprendido que deban detenernos antes de ocuparse de ellos, pues de lo contrario seran vulne- rables mientras los atacaban. En el segun- do ataque mi punto fue derribado y yo pude acabar con el 109 responsable pero, cuando cerraba el breve crculo despus de este dembo, vi otro 109 como a kil- metro y medio y me dirig contra el. En aquel momento el otro estaba efectuando un viraje y tambin me vio, y vino hacia m. Ambos empezamos a dispararnos mu-

    tuamente volando a rumbos opuestos y recordando nuestras anteriores dificul- tades mir a mis ametralladoras para com- probar si disparaban, pues no pareca que estuviera dando en el blanco. Pero s tira- ban, y tambin lo hacan las del Messer- schmitt. Supongo que mi puntera no sera buena ni tampoco la del alemn; de cualquier modo, lo ltimo que recuer- do fue ver la svstica a mi lado, a la misma altura y a unos tres metros de dis- tancia en el preciso momento en que chocamos."

    Milagrosamente, tanto Martin como el piloto alemn se las arreglaron para salir de los trabados aviones y lanzarse en para- cadas, tomando tierra sin contratiempo; Martin estaba gravemente herido y qued prisionero hasta el final de la guerra en Europa.

    De todos modos sus Mustangs se por- taron bien aquel da: al grupo se le aa- dieron catorce victorias. El mismo da el comandante Jim Howard llevaba el se- gundo grupo de P-5 1 desde Inglaterra en su primera salida operativa. El 357 Grupo de Caza realiz su primer vuelo sobre la costa francesa sin incidentes.

    El 20 de febrero tuvo lugar la primera misin de la que empez a conocerse en la Octava Fuerza Area como la "Semana Grande". El objetivo de estas misiones era la destruccin de las fbricas alemanas de aviones, que estaban situadas muy en el interior de Alemania. Fue una semana de febril actividad en escoltas para el 354 Grupo de Caza, que se desarroll de la siguiente manera:

    El 20 de febrero: Escolta a Brunswick. Se estableci contacto con los bombarde- ros y el jefe del Grupo fue informado de que estaban siendo atacados y que no tenan proteccin. No se vieron cazas amigos cuando se lleg al punto de reu- nin; desde ste al objetivo se vieron ms de cincuenta cazas monomotores enemi- gos y algunos bimotores. Fueron destrui- dos diecisis aviones enemigos, sin prdi- das propias.

    El 21 de febrero: Escolta a Brunswick. Se envi una escuadrilla para ocuparse de los cazas enemigos, que establecieron con- tacto con el gmpo en las proximidades del lago Steinhuder antes de la reunin con los bombarderos. Se vio gran nme- ro de Me-109, FW-190, Ju-88, Me-110 y Me-210; el grupo vio ms de 200 aviones enemigos. Se dej a los bombarderos

    1 Arriba: "Fortalezas" aproximndose a su objetivo: la proteccin de cazas sigue siendo de vital 1 importancia. Abajo: Un fugitivo FW 190 recibe una herida mortal sobre Alemania. I I I l

  • cerca de Osnabruck a las 14,45 horas. Fueron derribados 10 aviones enemigos y se perdieron dos P-5 1.

    El 22 de febrero: Escolta a Oscher- seben y Halberstadt. Inmediatamente despus de la reunin con los bombar- deros, encuentro con ms de veinte Me- 110 escoltados por treinta Me-109. Despus, hasta el objetivo, ocho Me-1 1 O, cinco Ju-88, dieciocho FW-190 y seis Me-109. En la zona del objetivo, cuatro FW-190 y un Me-109. Se destruyeron lrece aviones enemigos. Se perdi un , P-5 1 que hizo explosin en vuelo.

    El 24 de febrero: Escolta a Schwein- furt. Una escuadrilla estuvo siendo inter- ferida continuamente por los P-47, que liacan'constantes avances amenazadores. !;e encontraron algunos FW-190 y Me-109 cerca de Lochen, que fueron ahuyenta- dos. La nica victoria del da, un Me-2 10, compartida con un P-38 sin identificar. No hubo prdidas propias.

    El 25 de febrero: Escolta a Nurem- herg. Se vieron aproximadamente diez Me-109 y otros tantos FW-109, la mayor llarte de ellos sobre Kitzingen. Un soli- lario Me-109 fue derribado sobre el ob- ictivo. Siete victorias en total, sin prdi- (las propias.

    Despus de los tremendos combates :treos del primer da de la "Semana (irande" pareca que la Luftwaffe estaba iwcajando una derrota en el aire a manos (le los Mustangs, con independencia de los icsultados de los bombardeos de las f- hricas de aviones alemanes. Por supuesto, los Thunderbolts todava llevaban el peso principal de las escoltas y su nombre que- iI muy alto durante esta semana. Las in- cursiones de bombardeo contra la indus- lria aeronutica alemana no obtuvieron los resultados esperados y la produccin cnemiga de aviones de caza continu cre- ciendo en lugar de disminuir despus de la "Semana Grande".

    Lo que ocurri fue que la crema de la Luftwaffe estaba siendo destruida en :iquellos gigantescos combates areos y la experiencia y destreza de aquellos vetera- 110s pilotos alemanes era algo que no po- (la fabncarse.

    Despus de la aparicin inicial de los Mustangs sobre Berln, la Octava Fuerza

    La cmara sincronizada muestra el momento fatal durante la persecucin de un Ju-88.

    Area estaba ansiosa de que las condicio- nes meteorolgicas permitieran a los bombarderos atacar en masa a la capital del Tercer Reich. Esto tuvo lugar el 6 de marzo y aunque el tiempo era todava muy malo, desfil hacia su objetivo una fuerza de Fortalezas y Liberators B-24 de veinticuatro kilmetros de largo, contra la que sali la Luftwaffe en masa. Debido a la pantalla de nubes, los bombarderos dejaron caer la mayora de sus bombas en una faja de ocho kilmetros de los subur- bios de Berln y ninguna de ellas consi- gui alcanzar los objetivos previstos. No obstante, esta accin result lo que sera una de las batallas areas mayores de la Segunda Guerra Mundial. La Luftwaffe lanz contra los atacantes 169 cazas du- rante la aproximacin, doscientos dos sobre el objetivo y doscientos cuarenta y cuatro en la retirada. Para proteger a SUS "hermanos mayores" salieron seis- cientos quince P-47, ochenta y seis P-38 y ciento dos P-5 1, pero an as, los bom- barderos perdieron 69 aviones y once de los cazas no pudieron regresar a sus bases. Aunque algunos de los grupos de bombar- deo no llegaron siquiera a ver al enemigo, otros fueron prcticamente aniquilados; entre ellos los B-17 de la 3.a Divisin de Bombarderos, que recibieron dursimos ataques, informando que el mtodo de ataque del enemigo contra ella Lfue eje- cutado magistralmente. Tanto desde el punto de vista de los cazas enemigos como del de los de la escolta, los bombar- deros formaban una columna por parejas cubriendo de cabeza a cola una distancia de casi cien kilmetros. El controlador enemigo, al parecer, detect un hueco en la escolta de cazas en el centro de la'co- lumna, enviando dos formaciones de ca- zas a hostigar el principio y el final de la columna, ocupando la atencin de los escoltas en ambos extremos. Entonces lanz ms de 100 cazas contra el centro) momentneamente desguarnecido. Ac- tuando contra reloj y con inusitada agre- sividad, estos cazas derribaron quiz hasta veinte bombarderos en menos de treinta minutos. Aquel da haba tres grupos de P-5 1 en el aire: el 4.O Grupo de Caza, que volaba con los nuevos Mustangs, el veterano 354 y el todava relativamente verde 357 Grupo. En su primer combate areo real, el 357 tuvo una brillante ac- tuacin derribando veinte aviones ene- migos sin sufrir una sola prdida por su

  • parte. El comandante T. L. Hayes Jr., tom el mando del Grupo cuando el te- niente coronel Graham se vio obligado a regresar a la base por avera en el motor; la reunin se efectu con los bombarde- ros a casi 8.000 metros sobre Berln. A medida que llegaban, cada grupo de For- talezas era escoltado sobre el objetivo, al propio tiempo, otros Mustangs de la unidad haban empujado a unos cuarenta cazas enemigos por ebajo de los bombar- deros y se enzarzaron en combate con ellos; a la llegada de los bombarderos no haba sido visto sobre el objetivo ningn otro caza amigo: slo se vieron algunos P-38, ya en retirada, ochenta kilmetros al Oeste de Berln. Una vez que el Ultimo grupo de B-24 hubo pasado sobre el ob- jetivo, los Mustangs del 357 los acompa- aron unos sesenta kilmetros alejn- dose de Berln hasta que fueron releva- dos por la fuerza de retirada. Durante su regreso a la base, los Mustangs caye- ron sobre un aerdromo en Ulzen, donde una de sus secciones procedi a efectuar un ataque rasante destruyendo cuatro aviones enemigos.

    Tambin los P-51 del 4.O Grupo se vieron empeados en reido combate reclamando vara s auince victorias aquel da. uno de sus $otos, que con- sigui derribar un avin enemigo y pudo obtener una buena vista de Berln, fue el teniente Pierce McKennon. En su parte de combate deca:

    "Yo volaba en la seccin Green 3, de la escuadrilla Greenbelt. Esta seccin estaba ascendiendo para reconocer rastros de humo por la una de los bombarde- ros (*); entonces vimos por la izquierda ms de 50 cazas aproximndose a ellos, lanzamos los tanques supletorios y empe- zamos a picar sobre ellos, quedando desde entonces dividida nuestra seccin. A unos 150 metros por encima empez a virar hacia mi avin un Me-109; encabrit efec- tuando al propio tiempo un fuerte viraje y me puse por su cola. El otro empez a picar y yo le segu, disparandole una corta rfaga que obtuvo impactos en la cabina, motor y arranque de los planos:

    (*) Se utiliza el "cdigo del reloj" para in- dicar marcaciones. para ello se considera al horizonte dividido en doce partes iguales como las horas de un reloj, con las doce por la proa de la referencia. (N. del T.)

    el caza enemigo empez a echar humo enfilando, maltrecho, hacia Berln. Conse- gu estabilizar mi lnea de tiro por su cola y logr varios impactos ms y la persecu- cin me condujo sobre un aerdromo que result ser Templehof. Nunca haba visto antes tantos aviones alemanes como all: estaban en circuito de trfico y algu- nos de ellos despegando. Segu a aquel tivo iustamente encima del aerdromo y l e lanc una salva, al tiempo que viraba a la izquierda. Estaba entonces a unos 150 metros y ejecutando el viraje cuando el otro se volvi panza arriba, cay e hizo explosin en in extremo de la pista. Gan altura y empec a perseguir a otro 109, pero debido a que el parabrisas se me ha- ba cubierto de aceite consigui escapar."

    El teniente Nicholas Megura obtuvo este da sus primeras victorias contra los Messerschmitt 1 10 que enfilaban a los bombarderos para lanzarles sus cohetes. Bajo el fuego de Megura tres de ellos en- traron en picado perseguidos por "Cow- boy" que, con el rabillo del ojo, crey ver un Me-1 09 de la escolta de los 11 0 to- mando posicin para atacarle. Rpida- mente interrumpi su persecucin para volverse contra su nuevo enemigo, pero pronto descubri, aliviado, que era otro Mustang, por lo que nuevamente se co- loc tras tres Me-l 10 que asestaban sus cohetes contra la formacin de bombar- deros, ametrallando a uno de ellos con una larga rfaga. El alemn pic de ala y desapareci entre las nubes. 0-0 Mus- tang se hizo cargo de la situacin y se incorpor a Megura para apoyarle, permi-

    Uno de los cazas clsicos de la Segunda Guerra Mundial, el North American P-51 Mustang, que fue diseado originalmente para la RAF, pero fue tal su xito, especialmente cuando se le incorpor el motor Merlin, que lo adopt tambin la USAF. Utilizado en mltiples cometidos, encontr un lugar especial como caza de escolta de gran alcance. Especificaciones del P-51B Mustang: Motor: Packard V-1650 Merlin, 1.620 HP. Armamento: Cuatro ametralladoras Browning de .5 pul- gadas (en versin escolta). Velocidad mxima: 1.000 kilmetros por hora a 9.000 metros. Velo- cidad ascensional: 3.6 minutos para 3.000 metros. Alcance mximo: 3.500 kilmetros. Techo: 12.800 metros. Pesos en vaco/carga: 3.10015.100 kilogramos Envergadura: 11.30 metros. Longitud: 9,80 metros.

    La personalizacin de los Mustangs daba una nota de color en la dureza de la guerra.

  • tindole as concentrarse en uno de sus enemigos una prolongada salva destroz la cola del alemn y Megura dispar entonces sobre los planos y el motor; una de sus alas se parti y cay a tierra, donde hizo explosin. Entonces Megura apunt al tanque bajo el fuselaje de un Focke Wulf 190 y ya lo vea en su imagi- nacin envuelto en llamas cuando opri- mi el pulsador de fuego, pero nada ocu- m : haba agotado las municiones. Por consiguiente, abandon el campo de bata- lla y regres a Inglaterra.

    El Grupo 354 encontr unos cincuenta cazas monomotores a poco de su incorpo- racin, pero los alemanes rehuyeron com- batir con ellos y se ocultaron entre las nubes. Entre todos, los tres grupos de P-5 1 se apuntaron el derribo de 41 avio- nes enemigos aquel da, lo que represen- taba ms de la mitad de los informados entre los 700 cazas de escolta del VI11 Mando de Caza. Fue verdaderamente un gran da para los Mustangs.

    Uno de los ms famosos equipos que volaron en el VI11 Mando de Caza estuvo formado por Don Gentile y Johnny Godfrey, que empezaron actuar real- mente como equipo desde la siguiente misin sobre Berln el 8 de marzo de 1944. Cuando la Luftwaffe empez a asestar sus golpes contra los bombarderos sobre las afueras de Berln, Godfrey y Gentile vieron unos veinte cazas alema- nes haciendo estragos en una de las for- maciones de bombarderos atacantes. Es- cogieron cinco Messerschmitt 109 Y em- pei el combate. El primero en manio- brar fue Godfrey, quien se puso en la cola de uno de los alemanes mientras Gentile le cubra: las cortas rfagas de Godfrey hicieron blanco en el Me-109, que ejecut medio tonel mientras el piloto saltaba en paracadas. Era el turno de Gentile: despus de un impacto di- recto en la cola de un 109 realiz un pro- nunciado viraje utilizando los flaps de combate para darle una segunda pasada; una rfaga desde unos cien metros llen de humo la cabina del alemn, que se vio igualmente obligado a saltar Haba cazas alemanes por todas partes tratando deses- peradamente de combatir a los Mustangs y disparar contra los bombarderos al propio tiempo: Gentile y Godfrey vieron otros dos 109 atacando a los pesados aviones y los acometieron decididamente, extraados de que no emprendieran nin-

    de abril tuvieron una vez ms su de las fuerzas de caza y el comienzo de idad los Mustangs cuando unos un fenmeno que los .aliados nunca pu-

    cance de los P-47. Esta dificultad fue ob. Fw-190 y quince Me-109 ataca- dieron llegar a entender: su retirada al viada tan rpidamente como fue posible los bombarderos que se dirigan interior de Alemania. Si la Luftwaffe trasladando a los grupos veteranos a los Brunswick en las proximidades hubiera interceptado a los cazas en la

  • costa, cuando se encontraban cargados con sus tanques supletorios, les hubieran obligado a lanzarlos antes de entrar en combate, impidindoles de este modo llegar hasta el objetivo con los bombar- deros. Afortunadamente para los aliados, los alemanes nunca cambiaron de tctica, retrayndose cada vez ms al interior de Alemania a medida que progresaba la guerra. La interceptacin selectiva de la Luftwaffe cambi una tctica mantenida durante largo tiempo por el VI11 Mando de Caza. Slo despus de las misiones sobre Berln haban empezado los cazas norteamericanos a abandonar moment- neamente a sus bombarderos para atacar en vuelo rasante los aerdromos alemanes durante el viaje de regreso. A principios de abril de 1944 los cazas fueron autoe- zados por el general Kpener a perseguir a la Luftwaffe, ms bien que esperar su ataque para combatirla.

    Un "hermano mayor" con dos "colas ajedre- zadas" del 325 Grupo de Caza con su escolta al fondo.

  • La abundancia de grupos de caza dis- ponibles en abril de 1944 fue el factor principal que inclin al general Kepner a tomar esta decisiii de permitir a los cazas que actuaran a baja cota. Cuando empezaron las escoltas, el nmero de ca- zas disponibles estaba drsticamente limi- tado, especialmente los P-51, y una vez que pudieron acompaar a los bombar- deros durante toda la misin, se esperaba que la fuerza de ataque sera suficiente para llevar a la Luftwaffe a interceptar cada misin; de este modo la accin combinada de los cazas y la potencia de fuego cruzado de las formaciones masivas de bombarderos agotaran pronto a la fuerza de cazas alemanes. Cuando se vio que no era as, se autoriz a los cazas a bajar "hasta el suelo". Curiosamente, despus de su xito inicial como caza de escolta, el papel del P-51 volva a ser el de su antiguo predecesor, el A-36 Inva- der: El Mustang volva una vez ms a ser un avin de ataque rasante. Por medio de inteligencia fotogrfica se localizaron y cartografiaron los principales aerdromos alemanes; pero la inmensa mayora de estos estaban muy bien defendidos con artillera antiarea de todos los calibres y a medida que aumentaban los ataques, tambin lo hacan las defensas. En conse- cuencia, las misiones a baja cota costaron a las unidades norteamericanas de caza muchas ms bajas que las sufridas en los combates areos. Aproximadamente por entonces lleg el nuevo P-5 ID: era ste el Mustang con la famosa cpula de la carlinga en forma de burbuja, que repre- sentaba una mejora impresionante sobre la limitada visibilidad desde el "invema-, dero" del P-51B. En realidad, muchos de los P-5 IB haban adoptado ya la "capota Malcolm" britnica, as llamada por el diseador de esta despejada cubierta transparente de plexigls; la visibilidad era excelente desde ella y , en realidad, muchos pilotos de Mustang la preferan a la nueva en forma de burbuja del P-5 1D.

    En el P-5 1D se elimin tambin el pro- blema del encasquillado de las ametralla- doras experimentado en el P-51B y se aadi otra ametralladora ms del calibre .50 en cada plano para dar al avin mayor potencia de fuego. Tambin por entonces se pudo disponer del tanque lanzable de 408 litros, con lo que la autonoma del avin alcanz los 1.350 kilmetros: el nuevo Mustang era ya un arma formidable.

    E l general Kepner: f inalmente se permit i a sus cazas "bajar a l suelo" tomando la ofen- siva contra aerdromos enemigos y otras instalaciones.

    E l Nor th American P-51B. en e l que son de destacar dos modificaciones: fue el primer Mustang provisto de moto r Merlin, con el cual e l Mustang volvi por sus fueros como caza polivalente y tambin fue el primero provisto de una cpula de la carlinga mejorada, aunque n o definitiva. Las primeras conversiones al moto r Mer l in se realizaron en Inglaterra por Rolls-Royce, pero tambin se trabajaba en los Estados Unidos para efectuar las necesarias modificaciones para la instalacin del moto r Merl in fabricado por Packard. E l aumento de potencia del moto r Mer l in necesit el refuerzo de la clula y la adopcin de una hlice cuatro palas, pero el t iempo y los trabajos que se necesitaron para el lo fueron sobradamente recompensados por la mejora en las caractersticas del aviii, en especial a gran alt i tud. Tambin las primeras transformaciones para la adopcin de una cpula mejorada tuvieron lugar en el Reino Unido, donde se mont una capota abultada especial- mente diseada (la llamada capota Malcalm, que se ve en la figura) en los aviones de la R A F y algunos d e la USAAF. Esta modificacin fue una gran mejora con respecto a la anterior, pero no se adopt en las lineas de montaje, ya que estaba en estudio una nueva cpula de burbuja an mejor. Los primeros P-51B en llegar a una zona de operaciones activa l o hicieron en Inglaterra en diciembre de 1943 y entraron en accin a fines del mismo mes. Motor: Packard V-1650-3 Merlin, 1.450 H P a 6.000 metros. Armamento: Cuatro ametralladoras Browning M G 53-2 con 350 dis- paros (par interior) y 280 (par exterior) cada una; dos bombas de 450 kilogramos. Velocidad: 1 .O00 ki lmetros por hora a 9.000 metros. Velocidad ascensional: 7 minutos para 6.000 metros. Techo: 12.800 metros. Alcance: 8 8 0 ki lmetros l impio y 3.500 mximo con tanques lanzables. Pesos en vaco/cargado: 3.1 0015.100 kilogramos. Envergadura: 11.30 metros. Longitud: 9.83 me- tros. Utilizacin: Caza de interceptacin, caza de escolta de gran alcance o cazabombardero. La adopcin del moto r Mer l in supuso una modif icacin en e l morro para instalar la toma de aire del carburador en su parte inferior en lugar de en la superior como en los modelos provistos del moto r Allison.

  • construyert ericanos v< 50 aviones ,520.

    on en los Estados Unidos hasta daron en 213.873 misiones, la enemigos en el aire y 4.131 en

    14.819 M inzando 5.1 el suelo, a:

    ustangs y c 668 tonela >n unas pi

    !n Europa los Mustani idas de bombas, dest rdidas propias que ascl

  • capitn Beeson Y yo nos aproximamos disparando despus contra los otros nue- al Ju-88, cuyo motor izquierdo ya humea- ve. Al propio tiempo, Carr arrancaba tro- ba y vi al capitn Beeson alcanzar repeti- zos del segundo Ju-88, ametrallando a das veces al avin enemigo y alejarse. continuacin los siguientes ocho. Puedo Entonces cerr gases parcialmente y me confirmar la destruccin de un Ju-88 a acerqu a unos 250 metros aproximada- cargo del teniente Carr. mente, haciendo fuego y observando im- "Por mi parte obtuve blancos en los pactos a todo 10 largo de la cabina y mo- restantes cinco o seis aviones, concentrn- tor derecho y continu disparando hasta dome en el ltimo, en el que observ que el Junkers se estrell en llamas contra impactos y humo. Al principio inform el suelo. Volv sobre l y tom una foto- de ste como destruido, pero despus lo grafa del enemigo ardiendo; considero cambi a probable. esta victoria ma, compartida con el te- "Mientras tanto los alemanes mante- niente Fielder, de la Escuadrilla 335, y nian un fuego antiareo intenso y muy con el capitn Beeson. preciso; vi cmo era alcanzado el capitn

    "Entonces, el capitn Beeson, jefe de Beeson y salir glicol de su avin y a conti- la Escuadrilla Pictin, comunic que gana- nuacin tambin 10 fue su pareja, el te- ba altura poniendo rumbo 274. Al cabo niente Carr, empezando tambin a perder de unos ocho minutos de volar a este giicol. Por mi parte, yo fui alcanzado en rumbo dijo que descenda sobre un aer- el fuselaje y en el conjunto de cola; o a dromo Por las nueve del reloj de nOSotr0~. Can decir que haba sido avenado, pero

    anques supletorios lanzables de 408 litros tian al Mustang operar sobre cualquier

    ban sus problemas.

    y observ numerosos impactos en l y Las tcticas de los ataques rasantes se cuando me acerqu an ms, sin de~ar de

    dejaban al principio a la discrecin del disparar, el He-1 11 estall en llamas.

    que describe el teniente Thomas Biel, del 4.O Grupo de Caza, con las siguientes

    "A las 15,OO horas llam 'Upper' para decir q