1_ Construcción Índice Calidad del Trabajo 25 abril 08

5/12/2018 1_ Construcci n ndice Calidad del Trabajo 25 abril 08 - slidepdf.com

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Construcción de un Índice de Calidad del Trabajo y su Aplicación en el Análisis delas Condiciones de Trabajo de la Industria Manufacturera en México.

Cristina Casanueva Reguart, Paulina Ruiz-Iñiguez,y Juan Esteban Ortiz -Mancera.

[email protected]; [email protected];[email protected]; [email protected]

(Educación y Mercados de Trabajo)

Universidad Iberoamericana

Ciudad de México

__________________________________________________________________________________________Los autores agradecen a Martín Lima Velásquez, Patricia López Araujo y Diana Manuel Gutiérrez por sus valiososcomentarios, además del apoyo brindado por Rafael del Villar Alrich. Adicionalmente. El contenido de esteDocumento de Investigación, así como las conclusiones que de éste se derivan, son responsabilidad exclusiva de losautores y no reflejan necesariamente los de la Universidad Iberoamericana.

mailto:[email protected]






ABSTRACT

Construcción de un Índice de Calidad del Trabajo y su Aplicación en el Análisis de lasCondiciones de Trabajo de la Industria Manufacturera en México.

Este estudio propone la construcción de un Índice de Calidad del Trabajo, para ser aplicado en elcontexto de la industria manufacturera en México. Su finalidad fundamental consiste en hacer unacontribución metodológica, que pueda ser de utilidad en otros ámbitos en los que se requiera de esteinstrumento de valoración de las condiciones de trabajo.

El Índice de Calidad del Trabajo tiene dos puntos de partida, uno de naturaleza normativa einstitucional, y otro de naturaleza teórica. El marco normativo e institucional está basado en elconcepto de trabajo digno, definido originalmente por la Organización Internacional del Trabajo, queincluye a las siguientes dimensiones, el derecho al empleo, el acceso a los sistemas de seguridadsocial, el derecho de los trabajadores al diálogo social o representación. Adicionalmente, como unaspecto sustantivo del trabajo digno, en este estudio se incluye la dimensión de equidad de género enel ámbito laboral y el acceso a la capacitación como un derecho de los trabajadores. El modeloteórico tiene su origen en la teoría del Desarrollo como acceso a la Libertad, propuesto por AmartyaSen (1999: 36).

En la sección teórica se identifican las posibles correspondencias conceptuales entre los elementosque forman parte de la definición de trabajo digno, como los medios para ampliar las oportunidadesde elección o expandir la libertad, en el sentido en el que lo define Sen (1999 y PNUD, 2005: 20) paraello nos apoyamos en el concepto de libertades instrumentales propuesto por este autor.

En la elaboración del Índice de Trabajo Digno (ITD) se emplearon dos tipos de ponderaciones, unade tipo conceptual y la otra de tipo estadístico basada en el método de análisis de componentesprincipales, que permitió identificar la contribución de cada uno de estos indicadores (o dimensiones)

a la varianza total.

El fundamento empírico el trabajo, en la industria manufacturera en México, parte de la primeracondición de trabajo digno: ‘el derecho al trabajo’, con un análisis de la evolución del empleo (1990-2004), que muestra que esta condición no se cumple. En la industria manufacturera y en la economíaen su conjunto los niveles de desempleo abierto y sub empleo son muy elevados y han ido enaumento, mostrando un comportamiento acorde con el ciclos económico, la crisis de 1995 y ladesaceleración posterior a 2000. Mientras que lo anterior es obvio, no lo es el hecho de que lasrecuperaciones cíclicas del producto manufacturero no hayan estado acompañadas de una expansiónen el empleo.

La dimensión de la calidad del trabajo que mejora en el periodo analizado es el acceso a lacapacitación y a las prestaciones. En contraste, las variaciones más evidentes en el periodo son ladrástica disminución de los salarios, así como la representación sindical y la equidad de género. Es dehacer notar que tanto en el análisis de la calidad del trabajo por rama de actividad industrial, como enel análisis que se enfoca en las dimensiones de trabajo digno, se observa consistencia en losresultados obtenidos con los dos métodos de ponderación.



ÍNDICE

Lista de Cuadros iv

Lista de Cuadros del Apéndice v

I. MARCO TEÓRICO Y NORMATIVO 2

1. La calidad del trabajo y la libertad 2

2. Marco Normativo: Trabajo Digno 3

3. Marco Teórico: Desarrollo como acceso a la Libertad y

Libertades Instrumentales 3

4. Vínculos entre Trabajo Digno y Libertades Instrumentales 4

a). Estabilidad en el empleo 5

b). Acceso a la capacitación 5c). Salarios 6

d). Prestaciones 7

e). Representación Sindical 7

f). Equidad de Género 8

II. METODOLOGÍA 8

1. Definición operacional de las dimensiones de trabajo digno 9

a). Estabilidad o seguridad en el empleo 9

b). Representación sindical 9

c). Equidad de género 11

d). Capacitación 11

e). Salarios 12

f). Prestaciones 12

2. Elaboración del Índice de Trabajo Digno (ITD) 12

2.1 Ponderación conceptual y ponderación estadística:

un índice con dos criterios de medición 12

a) Ponderación conceptual 12

b) Ponderación estadística 132.2. Elaboración del Índice de Trabajo Digno (ITD) 13

III. PRESENTACIÓN Y DISCUSIÓN DE RESULTADOS 15

1. Empleo: Primera Condición del Trabajo Digno 15

2. Índice de Calidad de Trabajo, 1992 y 1999 17



a). Estabilidad en el empleo 19

b). Acceso a la capacitación 21

c). Salarios 23

d). Prestaciones 24

e). Representación sindical 26

f). Equidad de género 27

IV. CONCLUSIONES 29

BIBLIOGRAFÍA 32

APÉNDICE 34

Lista de Cuadros:

Cuadro 1. Relación entre las Dimensiones del Trabajo Digno y Libertades Instrumentales 8

Cuadro 2. Variables y valores máximos y mínimos utilizadas para la elaboración delos Indicadores de Trabajo Digno 14

Cuadro 3. Indicadores selectos de empleo, la economía y el sector manufacturero enMéxico (1990-2004) 16

Cuadro 4. Índice de Calidad de Trabajo, 1992. 17

Cuadro 5 Índice de Calidad de Trabajo, 1999. 18

Cuadro 6. Valor promedio de las dimensiones y del ICT en la industria manufacturera,1992-1999 18

Cuadro 7. Indicador de estabilidad en el empleo, 1992 20

Cuadro 8. Indicador de estabilidad en el empleo, 1999 20

Cuadro 9. Indicador de acceso a capacitación, 1992. 22

Cuadro 10. Indicador de acceso a capacitación, 1999. 22

Cuadro 11. Indicador de salarios, 1992. 23

Cuadro 12. Indicador de salarios, 1999. 23



Cuadro 13. Indicador de acceso a prestaciones, 1992. 25

Cuadro 14. Indicador de acceso a prestaciones, 1999. 25

Cuadro 15. Indicador de representación sindical, 1992. 26

Cuadro 16. Indicador de representación sindical, 1999. 26

Cuadro 17. Representación Sindical. 27

Cuadro 18. Indicador de equidad de género, 1992. 28

Cuadro 19. Indicador de equidad de género, 1999. 28

Lista de Cuadros del Apéndice:

Cuadro 1-A. Indicadores de las dimensiones de trabajo digno eÍndice de Calidad de Trabajo, 1992. 34

Cuadro 2-A. Indicadores de las dimensiones de trabajo digno eÍndice de Calidad de Trabajo, 1999. 36



Construcción de un Índice de Calidad del Trabajo y su Aplicación en el Análisis delas Condiciones de Trabajo de la Industria Manufacturera en México.

Cristina Casanueva Reguart, Paulina Ruiz Iñiguezy Juan Esteban Ortiz.

¿Cómo valorar la situación actual del trabajo y los progresos que en el futuro pueda registrar eltrabajo digno1

en el mundo? Este estudio propone la construcción de un Índice de Calidad del

Trabajo, intenta hacer una contribución metodológica que pueda ser de utilidad en otros ámbitos,en los que se requiera de este instrumento de valoración de las condiciones de trabajo. Como lo

enuncia Ghai (2003) “el problema es cómo hallar ‘parámetros de medición’ que abarquen a lasdimensiones de trabajo digno y que expresen las interrelaciones que los unen”.

La construcción del Índice de Calidad del Trabajo tiene dos puntos de partida, uno de naturalezanormativa e institucional y otro de naturaleza teórica. El marco normativo e institucional estábasado en el concepto de trabajo digno, definido originalmente por la Organización Internacionaldel Trabajo (OIT: 1999, 2000, 2004, 2005)2 y el modelo teórico tiene su origen en la teoría del Desarrollo Como Acceso a la Libertad 3 , propuesto por Amartya Sen (1999: 36)4

.

En la primera sección se presenta el fundamento normativo y teórico que sirve de sustento a la

construcción del Índice de Calidad del Trabajo (ICT), en la segunda sección se presenta lametodología utilizada para la construcción del ICT, en la tercera sección se exponen losresultados de su aplicación del ICT en la industria manufacturera, es decir, la valoración de lacalidad del trabajo en cada rama de actividad industrial. Por último, se presentan lasconclusiones.

1 La mayor parte de la literatura reciente en inglés sobre la calidad de las condiciones de trabajo usan el concepto “decent work”,que en esta investigación lo traducimos como “trabajo digno”.2 En la bibliografía la Organización Internacional del Trabajo puede aparecer como OIT o como ILO, que corresponde a sus siglasen inglés “International Labour Office”.3 El “Desarrollo como acceso a la Libertad” es una traducción libre de este concepto central del libro de Amartya Sen (1999)“ Development as Freedom” (véase bibliografía).4 En la construcción de este índice se procura subsanar las deficiencias de las que adolece con frecuencia la construcción de otrosÍndices: la falta de un modelo teórico a partir del cual se desprenden los indicadores (dimensiones) y que a su vez facilita latransparencia en el uso del Índice Bonnet (2003: 1).



I. MARCO TEÓRICO Y NORMATIVO

1. La calidad del trabajo y la libertad

El objeto de este estudio son las condiciones de calidad del trabajo (digno / precario) y sucontribución al bienestar. Sin embargo, es importante situar nuestro objeto de estudio en uncontexto teórico más amplio: el del desarrollo económico como un medio para expandir lalibertad de las personas y su potencial de aplicación en un contexto de las condiciones laborales de los trabajadores o personas empleadas, siguiendo el enfoque de Sen (1999)5

.

En la definición más amplia del desarrollo económico, tanto a nivel agregado, como a nivel delindividuo, Sen (1999) argumenta que el desarrollo (económico) debe ser visto como un procesode expansión de la libertad. Esta formulación abstracta se clarifica con las comparaciones que el

autor hace entre distintas definiciones de desarrollo (económico) y lo contrasta con todo aquelloque inhibe el logro de esta condición. Este enfoque, de la libertad como resultado y medio para eldesarrollo, es más inclusivo que otras definiciones que entienden desarrollo, como crecimientodel producto interno bruto (PIB), ingreso per capita, niveles de industrialización, innovacióntecnológica y/o modernización, por considerar que estas definiciones resultan insuficientes paraexplicar la condición de bienestar de las personas. Sen (1999) reconoce que la industrialización,el progreso tecnológico y la modernización pueden contribuir a la expansión de la libertad eindudablemente son condiciones necesarias, en ocasiones no indispensables6

y definitivamenteno suficientes para garantizar la libertad de los individuos.

El desarrollo que conduce a la expansión de la libertad, requiere de eliminar las principalesfuentes de la falta de esta condición: “... la pobreza, la escasez de oportunidades económicas, así como la exclusión social sistemática, el no contar con el acceso al sistema de seguridad social, así como la intolerancia o [la presencia] de gobiernos represivos” (Sen, 1999: 15)7

.

De acuerdo a Sen (1999) las definiciones tradicionales, más limitadas, de desarrollo económicotienden a enfatizar el crecimiento del PIB o la promoción de la industrialización, sin hacersuficiente énfasis en el desarrollo de la libertad . Para Sen (1999) los elementos adicionalesconstitutivos del desarrollo, que tienden a omitir otras definiciones, consisten en las

oportunidades de recibir educación y servicios de salud de calidad, oportunidades de participar

5 En este estudio nos referimos a los trabajadores como todas aquellas personas que cuentan con un empleo, esto incluye a lostrabajadores directos u obreros, a los obreros especializados, supervisores, administradores y personal de apoyo a los gerentes y aestos mismos.6 Drèze y Sen (1995) analizan el caso de Kerala, un estado en la India, con una población de 30 millones, en los que las personascuentan con las oportunidades de educación de calidad, dieta alimenticia adecuada, salud, empleo y libertad política, en uncontexto de bajo crecimiento económico.7 Traducción libre (véase “Forms of Unfreedom” en Sen, 1999: 15).



políticamente, así como de disentir (Sen 1999: 5). Sen argumenta que el desarrollo (en un sentidomás amplio) conduce a un proceso de expansión de la libertad, al que las personas deben teneracceso (PNUD, 2005:20).

Uno de los desafíos teóricos que enfrenta este estudio es la aplicación del concepto de desarrollo y sus efectos en el bienestar (Sen, 1999), al contexto específico de las condiciones de trabajo

digno y sus consecuencias en la expansión de la libertad de los trabajadores. Es por ello que, en lasiguiente sección se presenta el marco normativo basado en el concepto de trabajo digno.

2. Marco Normativo: Trabajo Digno

El concepto de trabajo digno8

, que forma parte del marco normativo e institucional propuesto porla Organización Internacional del Trabajo (OIT: 1999, 2000, 2004, 2005), se dio a conocer porprimera vez en 1999, en la 87ª Reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, en Memoria

del Director General. En este contexto se definieron cuatro elementos (dimensiones) sustantivosdel trabajo digno (“decent work”): el empleo, la protección social, los derechos de los

trabajadores y el diálogo social.

El concepto de trabajo digno incluye la disponibilidad u oferta de empleos suficientes (laposibilidad de tener un trabajo), la remuneración adecuada, la seguridad en el trabajo y lascondiciones laborales salubres. La seguridad social y la certeza de contar con un ingreso, tambiénson elementos esenciales. Además, trabajo digno se refiere a los derechos fundamentales deltrabajador, como el de la erradicación de la discriminación laboral y la libertad de sindicalización(OIT, 2000)9

.

Como un aspecto sustantivo del trabajo digno, en este estudio se incluye la dimensión de equidad

de género en el ámbito laboral y el acceso a la capacitación como un derecho de lostrabajadores, que resulta particularmente importante en un contexto laboral de creciente

incertidumbre, asociado al incremento de la competencia en los mercados de bienes y servicios,de ahí la mayor vulnerabilidad del empleo y de la calidad de las condiciones del trabajo.

En la siguiente sección se expone el marco teórico basado en el concepto de desarrollo como

acceso a la libertad. Posteriormente se presenta una síntesis a través de la identificación decorrespondencias o vínculos entre estos conceptos de desarrollo como acceso a la libertad y las

dimensiones de trabajo digno.

3. Marco Teórico: Desarrollo como acceso a la Libertad y Libertades Instrumentales

8 La OIT se refiere a ‘trabajo digno’ como “decent work”.9 Citado por Ghai, 2003:125.



En esta sección se identifican las posibles correspondencias conceptúales entre los elementos queforman parte de la definición de trabajo digno, con los medios para ampliar las oportunidades deelección o expandir la libertad, en el sentido en el que lo define Sen (1999 y PNUD, 2005: 20)para ello nos apoyamos en el concepto de libertades instrumentales (Sen, 1999) que representan

medios (instrumentos) que contribuyen directa o indirectamente a la expansión de la libertad. Porsu parte la libertad se entiende como “... la posibilidad de elegir la forma de vida en que laspersonas desearían vivir” (Sen, 1999: 38; PNUD, 2005: 20). Sen propone una lista, que nopretende ser exhaustiva, pero resulta útil en el análisis de políticas o medidas concretas para ellogro del desarrollo y el bienestar, como son las libertades políticas, las facilidades económicas,las oportunidades sociales, la garantía de transparencia (rendición de cuentas) y la disponibilidadde la seguridad y protección social. Estas libertades instrumentales contribuyen al desarrollo delas capacidades de las personas para vivir de manera más libre (Sen, 1999: 40)10

.

Las dimensiones asociadas a las condiciones de calidad de trabajo (trabajo digno), que setraducen en variables observables, están estrechamente vinculadas con el concepto de libertades

instrumentales, como se argumenta en la siguiente sección. Los vínculos entre las distintaslibertades instrumentales, resultan centrales para una comprensión más integral de la libertad.

4. Vínculos entre Trabajo Digno y Libertades Instrumentales

A continuación se proponen las posibles correspondencias entre las dimensiones de trabajo digno (OIT: 1999, 2000, 2004, 2005) y las libertades instrumentales (Sen, 1999; Drèze y Sen, 1989),que posteriormente servirán de fundamento normativo y teórico para la construcción del Índice

de Calidad del Trabajo. Cada una de las dimensiones relacionadas con la medición de las

condiciones de trabajo corresponde a una o a varias de las libertades instrumentales, definidaspor Sen (1999), las cuales procuran o facilitan las condiciones que conducen a las personas (eneste caso los trabajadores) al logro de una mayor libertad.

Adicionalmente, Sen (1981) introdujo el concepto de ‘derechos’ o el ‘ser acreedor ’11

10 El concepto de capacidades, propuesto por Sen (1995) tiene raíces en el pensamiento de Aristóteles (específicamente en la“Ética Nicomaquea”). Sen (1995) argumenta que la vida de una persona puede ser vista como una secuencia de eventos en los quese ve involucrada o en los logros de estados y situaciones que la persona alcanza, esto constituye, en términos de Sen (1995) en unconjunto de funcionamientos (“functioning”). Las capacidades se refieren a las posibles combinaciones de funcionamientos susceptibles a ser elegidos por una persona, de ahí que la noción de capacidades está esencialmente vinculada con la libertad(Sen, 1995: 10).

que serefiere específicamente, en el contexto del mercado laboral, a la posibilidad de intercambiar la

11 Ser acreedor (“entitled to...”) se ha traducido al español “titularidades”, en ese estudio preferimos traducirlo como derechos ocomo la condición de ser acreedor a. Sen (1981:2) específicamente se refiere a “... own labour entitlement: one is entitle to one’sown labour power and thus to the trade-based and production-based entitlements related to one’s labour power”.



dotación original12, lo que implica la posibilidad de intercambiar la capacidad de trabajar pordistintos conjuntos de satisfactores13

.

Algunos de los tipos de “derechos” que resultan del intercambio del trabajo (dotación original)

son: el salario, la capacitación, la seguridad social, el crédito para la vivienda y el sistema depensiones para el retiro, los cuales incrementan las posibilidades de los trabajadores para elegir,es decir, expanden su libertad14

. Este estudio propone que la definición de ‘derechos’ (seracreedor ) conduce a las libertades instrumentales, que se desprenden de la formulaciónnormativa del trabajo digno.

a). Estabilidad en el empleo:

El derecho al empleo se considera como la posibilidad de contar con un trabajo y la condición deseguridad o estabilidad en el mismo. Drèze y Sen (1989) reconocen que una gran parte de la

población posee sólo un activo sustancial: su capacidad para trabajar. Por tanto, el que laspersonas no cuenten con un empleo seguro los sitúa en una condición de vulnerabilidad en

relación a los medios para alcanzar los satisfactores mínimos que aseguren, no sólo susupervivencia, sino también la expansión de su libertad de ser y actuar (PNUD, 2005: 20). Deesta manera, la posibilidad de contar con un empleo estable se traduce en la libertad instrumental de contar con medios económicos que ofrecen seguridad y tranquilidad al trabajador.

b). Acceso a la capacitación:

La capacitación se propone el desarrollo de habilidades para el trabajo, vinculadas a las demandas

específicas y cambiantes de la innovación tecnológica. Por otro lado, la literatura recientepropone que el cambio tecnológico o la reestructuración de la organización de la producción, envistas a lograr niveles más elevados de productividad y competitividad, demanda personal conmayores calificaciones (“skill biased jobs”) (Lopez Acevedo, 2002; Lall, 2000 y Wood, 1995).En este contexto, la capacitación resulta un instrumento (libertad instrumental) para lidiar con elcontinuo cambio tecnológico y evitar la obsolescencia, además permite enfrentar las presionesque resultan de una mayor competitividad, que con frecuencia repercuten en la perdida del

12 Dotación original “original bundle of ownership or endowment” (Sen, 1981: 52).13 El concepto en inglés de ‘commodity bundle’ ha sido traducido al español como “canasta de satisfactores” en este trabajotradujimos este concepto como ‘conjunto de satisfactores’: “The entitlement of a persons stands for the set of different alternativecommodity bundles that a person can acquire through the use of the various legal channels of acquirement open for someone inhis position” (Sen, 1981: 52). Este concepto originalmente se desarrolló por Sen (1981) en el contexto de situaciones límite, comoel de la condición que da origen a las víctimas de las hambrunas.14 “... el desarrollo humano entendido como la libertad de elección... el objetivo último del desarrollo humano (en este estudio, enel contexto del trabajo digno) es la ampliación de la libertad: ampliar el conjunto de opciones valiosas para los agentesresponsables de tomar sus propias decisiones.



empleo o en el deterioro de las condiciones de trabajo 15

. Por lo anterior, un mayor acceso a lacapacitación contribuye al desarrollo de la libertad instrumental de oportunidades sociales yfavorece a mejorar las probabilidades de acceder a un nivel más elevado de medios económicos,y de oportunidades de bienestar.

c). Salarios:

En el mercado laboral se observa que la persona intercambia su trabajo por un salario16, esteintercambio toma la forma de empleo. El salario a su vez es intercambiado por un conjunto debienes y servicios (“bundle of goods”)17

. Acerca de los distintos intercambios que tienen lugar, elprimero es el intercambio de la dotación del trabajador o empleado, es decir, su potencial para

trabajar por un salario; y el segundo representa la posibilidad de intercambiar su salario por unconjunto de satisfactores, lo que hace a la persona ‘acreedora’ (“entitled”). Sen (1981) se refiereespecíficamente a ‘ser acreedor’ del trabajo propio y a los ‘derechos’ (“entitlements”) que

resultan de este intercambio (Sen, 1981: 2).

En este contexto resulta pertinente hacer un paréntesis para tratar con mayor profundidad el temadel intercambio en los mercados. Sen (1999) argumenta que los méritos del mercado han sidoampliamente reconocidos, sin embargo, las razones a favor de los mercados (y del intercambio enéstos), y de los resultados que genera en términos de salarios, y los complementos al salario enforma de prestaciones, no han sido valorados de manera suficiente. Este autor reconoce que eltema de la ubicuidad de los mercados y su funcionamiento es un tema importante, sin embargo,con frecuencia no se aborda de manera directa por tomarlo como algo evidente por sí mismo y

que no requiere de más análisis. Sen (1999) específicamente examina el tema de los mercados detrabajo, sus imperfecciones en una economía capitalista18 y ejemplifica con algunos casos, comoson el de la esclavitud, en donde los trabajadores no tienen la posibilidad de intercambiar sutrabajo por un salario, el trabajo infantil y las asimetrías en las condiciones laborales de las quelas que son objeto las mujeres (Sen, 1999: 114-115) 19

.

15 En aras de elevar la “productividad” a través de bajar los costos de la mano de obra, lo cual es debatible. Estudios recientes hanmostrado el impacto de la calidad de las condiciones de trabajo, sobre la productividad (Casanueva y Rodríguez, 2007c).16 Además del salario Sen (1999) reconoce a las utilidades y/o al ingreso como resultado de este intercambio (Sen, 1999: 112).17 Este texto tomado de Sen (1981) menciona sólo al salario como resultado del intercambio por el trabajo. Por su parte el

concepto de trabajo digno toma en cuenta a otros elementos que complementan al salario y que se identifican claramente con losmedios o instrumentos para el logro del bienestar.18 Las fallas en el mercado laboral que menciona Sen (1999) han sido identificados por otros autores como la falta de competenciaen estos mercados, restricciones en la información, factores institucionales, segmentación en los mercados de trabajo, entre otros(Berger y Piore, 1980; Carnoy, 1980 y Ashenfelter, 1999).19 Adicionalmente introduce críticas al funcionamiento ineficiente de los “mercados” en economías centralmente planificadas, enlas que oficialmente los mercados han sido descartados. En este contexto cita Michal Kalecki, economista polaco que regresó a supaís después del triunfo del socialismo, quien reconoce que el socialismo en su primera etapa había eliminado al capitalismo (losmercados), y que debía entonces eliminar el sistema feudal, con sus formas específicas de intercambios y explotación de la manode obra (véase en Sen, 199: 114).



El salario representa la libertad instrumental para contar con medios económicos que ofrecen a laspersonas las oportunidades de adquirir bienes de consumo, que requieren para su supervivencia yque contribuyen a expandir su libertad. El concepto de ser acreedor (“entitlements”), en este casoa los medios económicos (libertad instrumental) que a su vez dependen de los salarios, así como

de las condiciones de este intercambio, están determinadas por las condiciones en el mercados detrabajo (Sen, 1999:38).

d). Prestaciones:

El acceso a las prestaciones derivadas del trabajo contribuye a mejorar las condiciones de vida delas personas (los trabajadores) en aspectos como salud, crédito para la vivienda, pensiones yseguros en caso de cesantía, enfermedad y vejez. Estas prestaciones encuentran sucorrespondencia con la mejoría en las condiciones de vida, que se logra a través de las libertades

instrumentales de oportunidades sociales y de procuración de seguridad , que representan

complementos a las retribuciones al trabajo no monetarias y que funcionan a través de acuerdosinstitucionales que protegen al trabajador (véase Sen, 1999: 40).

e). Representación Sindical:

Drèze y Sen (1989) se refieren a la naturaleza de la relación obrero-patronal como una de“conflictos cooperativos”20 que se ubican en el contexto de la distribución de los beneficios de laproducción, que puede ser el origen de fricciones, pues el interés del dueño (empleador o patrón)

es obtener una mayor proporción de la utilidad, y por su parte, el interés de los trabajadores esobtener salarios más elevados y mejores las condiciones de trabajo, “...[sin embargo] si la

producción se ve interrumpida, tanto los dueños de las empresas como los trabajadores pierden.Mientras que, ambas partes resultan ganadoras si cooperan en el proceso de producción” (Drèze ySen 1989:11). Los resultados de los “conflictos” mediante la “cooperación” se logran a través deldiálogo social, a través de organizaciones que representen a las partes en conflicto y al logro deun acuerdo entre éstas.21

Además, de los ‘conflictos cooperativos’ esta el ‘derecho de asociación’ y ‘diálogo social’ (OIT,2000). En este sentido Sen propone la libertad instrumental de la garantía de transparencia:“...los individuos interactúan socialmente con base en el supuesto de que aquello que ofrecencorresponde a lo que pueden esperar obtener. En este sentido, la sociedad opera bajo el supuesto

de la confianza. La interacción social se ve fortalecida por la garantía de transparencia, que serefiere a la apertura de lo que la gente puede esperar, es decir, la libertad para interactuar bajo las

20 En su obra Development as Freedom (Sen, 1999: 192 y 193) utiliza el concepto de “conflictos cooperativos” en el contexto dela pareja en el seno de la familia.21 Cabe la posibilidad de que no se logre el acuerdo, es decir que no se alcance la meta del “conflicto cooperativo”, sin embargo,existe la libertad instrumental de contar con la oportunidad del diálogo social.



garantías de rendición de cuentas y claridad. Cuando esta confianza se ve deteriorada, la libertadde las personas puede verse afectada, luego en tanto, las garantías de transparencia tienen unpapel instrumental en la prevención de la corrupción” (Sen, 1999: 38).

f). Equidad de Género: Se ha observado que las mujeres son más vulnerables dentro del mercado laboral y tienen menosoportunidades de obtener un trabajo fuera del hogar bien remunerado (Drèze y Sen, 1989: 57).Esto obedece a que existen formas de relaciones sociales que son aceptadas como legítimas, queestán sancionadas por convenciones sociales, más allá del marco de los derechos legales (Drèze ySen, 1989:11). Las libertades instrumentales que se derivan de una mayor equidad de género enel ámbito laboral consisten básicamente en el acceso a oportunidades sociales, medios

económicos y de procuración de la seguridad .

Cuadro 1. Relación entre las Dimensiones del Trabajo Digno y Libertades Instrumentales.22

Dimensiones del TrabajoDigno (OIT: 1999, 2000,2004, 2005)

Libertades Instrumentales(Sen, 1999)

Estabilidad en el Empleo Reduce la incertidumbre de acceso a: medios económicos.Acceso a Capacitación Incrementa las probabilidades de acceso a las: oportunidades

sociales y medios económicos. Salarios Medios económicos.Prestaciones Procuración de seguridad y medios económicos.

Representación Sindical Incrementa las probabilidades de acceso a: oportunidadessociales, medios económicos, procuración de seguridad y

garantías de transparencia. Equidad de Género Incrementa las probabilidades de acceso a: oportunidades

sociales y medios económicos y procuración de seguridad.

Con fundamento en este marco normativo y conceptual, que permitió mostrar los vínculosexistentes entre las dimensiones de trabajo digno y las libertades instrumentales, se construyó el Índice de Trabajo Digno, de acuerdo a la metodología presentada en la siguiente sección.

II. MetodologíaLas fuentes de información en las que se basa este estudio son la Encuesta Nacional de Empleo,

Salarios, Tecnología y Capacitación (ENESTyC: 1992 y 1999) y la Encuesta Nacional de

22 El Cuadro 3 resume los conceptos constitutivos de ‘El Trabajo Digno’ (OIT: 1999, 2000, 2004, 2005) y el de los ‘Medios oLibertades Instrumentales’ (Sen, 1999: 38) cuyas correspondencias o relaciones fueron identificadas en la sección que le precede.



Empleo Urbano (ENEU: 1992 y 1999)23

, ambas elaboradas por el INEGI.

A continuación se definen operacionalmente la ‘dimensiones de trabajo’, sus componentes, y enalgunos casos sus sub-componentes. Se presenta, además, los dos criterios empleados en la

asignación de valor a las dimensiones de calidad del trabajo, uno de tipo conceptual y el otroestadístico, como se explica más adelante.

Por último, se aplica este Índice de Trabajo Digno al contexto específico de la industriamanufacturera, con la finalidad de valorar las condiciones de calidad del trabajo, en cada una delas 52 ramas de este sector de actividad económica en México (1992-1999). Como se mencionóantes, el Índice de Trabajo Digno intenta ofrecer una alternativa útil para la medición de lasdimensiones observables, asociadas a las condiciones de trabajo, en otros estudios sobre el tema.

1. Definición operacional de las dimensiones de trabajo digno

Con fundamento en el marco normativo y conceptual, presentado en la sección anterior, sedefinen operacionalmente las dimensiones de trabajo digno: estabilidad en el empleo,representación sindical, equidad de género, acceso a la capacitación, salarios y acceso a

prestaciones. Para cada una de estas dimensiones se presenta su respectiva justificación, lo que asu vez facilita la atribución de ponderadores conceptuales específicos para la construcción del Índice de Trabajo Digno.

a). Estabilidad o seguridad en el empleo:

Se define a través de modalidad de contratación, por los distintos niveles de seguridad en el

trabajo que cada modalidad representa. El indicador de modalidad de contratación adopta comoparámetro al personal que tiene un contrato escrito por tiempo indefinido. Se excluyen a lostrabajadores que tienen contratos temporales, de tiempo parcial, subcontratados y de trabajo noremunerado. Adicionalmente, se toma en cuenta la pérdida de empleo, es decir, el porcentaje de

trabajadores que fueron despedidos, en cada rama de actividad industrial. Se atribuye la mitaddel ponderador a cada uno de los sub-componentes que conforman la dimensión ‘estabilidad en

el empleo’ (ENEU, 1992 y 1999).

b). Representación sindical:

El ‘derecho de asociación’ o ‘diálogo social’ (OIT, 2000) constituye una de las dimensiones decalidad de trabajo, en este estudio se identifica con la presencia de sindicatos en las empresas. Sinembargo, el análisis de la eficacia de los sindicatos para representar de manera genuina losintereses de los trabajadores en México requiere de una consideración las particularidades del

23 Se emplea el tercer trimestre de cada año para evitar los efectos de la estacionalidad.



movimiento obrero en este país, que han resultado en la presencia de distintos tipos de sindicatos,cuya representación de los intereses de los trabajadores es de distinta calidad. Entre estos sedistinguen tres tipos de organizaciones: sindicato corporativista, sindicatos blancos y sindicatos

independientes.

El sindicato corporativista es representante de intereses particulares de los líderes, generalmentesubordinado al Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó durante 70 años al país(1929-2000). La estructura organizativa de este tipo de sindicatos corresponde al de unacorporación dentro de ese partido, con el fin primordial de ejercer control político sobre susagremiados, además de ser una plataforma de promoción política para los dirigentes de esacorporación y para los líderes sindicales, dejando los intereses genuinos de los trabajadores comoun objetivo secundario (Street, 1996 y De Garza 2003). En este tipo de sindicato la negociaciónpor aumentos salariales y sistemas de prestaciones, entre líderes y patrones tiene lugar en la

empresa, sin embargo, los parámetros generales que establecen los márgenes de esta negociaciónlos fijan de antemano las cúpulas estatales, empresariales y sindicales para el conjunto delsistema de relaciones de trabajo (De la Garza, 2003: 358) 24

.

Por su parte, los sindicatos blancos o sindicatos de empresa son aquellos que están subordinadosa la gerencia de las compañías, además de que sus procesos de elección y de toma de decisionesestán rigurosamente vigilados por éstas. Este tipo de sindicatos desempeña funciones semejantesa los de la gestión de recursos humanos de la empresa, están sujetos al paternalismo empresarial ysin participación en el sistema político. Dentro de este grupo se pueden ubicar los sindicatos de

protección que aparecen sólo cuando existe el riesgo para el empleador de formar sindicatos

alternativos (De la Garza y Bouzas, 1988)25

.

En contraste, los sindicatos independientes gozan de mayor autonomía en relación al gobierno y alos gerentes de las empresas, y son más democráticos en la elección de sus líderes. Las decisiones

se toman de manera colegiada o a través de la participación del voto directo de sus agremiados(De la Garza, 2003: 358 y Street, 1996) 26

.

24 Con la constitución de un corporativismo de Estado, tan firmemente articulado en México, aunque el PRI haya perdido el poderejecutivo federal, esa forma de organización continúa siendo vigente e influyendo de manera decisiva como grupo de presión,obteniendo prebendas para sus líderes, además de puestos políticos y administrativos para sus dirigentes en el gobierno. En elartículo “El circo de las corporaciones” Luis Rubio (2007) argumenta la vigencia de lo que este autor denomina el “ pactocorporativista” que consiste en que, no obstante a que en la última década hemos presenciado la destrucción del viejo sistemapolítico, muchas de su formas u objetivos siguen siendo vigentes, de ahí que algunas de las estructuras fundamentales de lapolítica nacional, entre ellas algunos de los sindicatos, no son democráticos, y en la mayor parte de los casos siguen respondiendoa una lógica corporativista.25 De la Garza y Bouzas (1988) Citado en de la Garza Enrique y Carlos Salas, 2003: 356.26 Susan Street (1996). “Maestros en movimiento”. México: Cuadernos de la Casa Chata. Citado por De la Garza, 2003: 354.



Por tanto puede afirmarse que, con excepción de los sindicatos independientes, los demás tiposde organizaciones gremiales no satisfacen plenamente la condición de diálogo social y confrecuencia su objetivo fundamental no consiste en defender los intereses de los trabajadores.

Sin embargo, estudios recientes afirman que resulta más conveniente la afiliación sindical de lostrabajadores, independientemente de la naturaleza de los sindicaos, que su ausencia. Fairris

(2006) analiza el papel económico que han tenido los sindicatos entre 1984 y 1996, y concluye

que si bien los sindicatos han perdido fuerza en la últimas dos décadas, estas organizaciones de

trabajadores siguen teniendo un impacto positivo en los salarios y en las prestaciones de los

trabajadores, además de que, cuando la empresa cuenta con sindicato se observa una mayor

estabilidad laboral.

En el caso de los sindicatos, en la construcción del Índice de Calidad del Trabajo, la informacióndisponible en la encuesta (ENESTyC, 1992 y 1999) no permitió distinguir entre los sindicatos de

empresa (o sindicatos blancos) y los sindicatos corporativistas, sin embargo, permitió laidentificación de los sindicatos independientes. Por lo tanto, los sindicatos de empresa quedanagrupados con los sindicatos corporativistas, puesto que en los dos casos la defensa de losintereses de los trabajadores es un objetivo secundario.

En la ponderación conceptual de la representación sindical, como dimensión de trabajo digno, sele atribuye dos tercios del ponderador total a sindicatos independientes y un tercio a los demástipos de sindicatos, por reflejar de esta manera su importancia en el desarrollo de las libertades

instrumentales de oportunidades sociales, medios económicos, procuración de seguridad ygarantías de transparencia.

c). Equidad de género:

Para la dimensión de equidad de género se consideraron dos componentes (los cuales recibierondistinta ponderación). Como primer componente, se tomó la proporción de participación

femenina en cada rama de actividad industrial en relación a la participación masculina. Elsegundo componente es el salario que perciben las mujeres, pues corrige el sesgo de lapreferencia por la participación laboral femenina en algunas industrias, por la naturaleza de losproceso productivos, como es el caso de la industria del vestido, el de la tortilla y el nixtamal y, elde la industria de equipo de radio, T.V. y comunicaciones.

d). Capacitación:

El indicador de capacitación en este estudio consistió en el porcentaje de empleados querecibieron entrenamiento, para cada rama de actividad industrial, en los años para los cuales seconstruye el Índice de Trabajo Digno (ENESTyC: 1992 y 1999). Como se mencionó antes, un



mayor acceso a la capacitación contribuye al desarrollo de la libertad instrumental deoportunidades sociales, y mejora las probabilidades de acceder a un nivel más elevado de medios

económicos y de oportunidades sociales.

e). Salarios:

Consiste en las remuneraciones promedio pagadas mensualmente al personal de cada rama deactividad industrial, a pesos de 1994 (ENEU, 1992 y 1999).

f). Prestaciones:

Porcentaje de empleados que cuenta con algún tipo de prestación, éstas incluyen: Instituto

Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de losTrabajadores del Estado (ISSSTE), crédito para la vivienda, seguro médico particular o seguro degastos mayores de salud, participación de utilidades, vacaciones con goce de sueldo, aguinaldo uotra prestación no descrita (ENEU: 1992 y 1999).

2. Elaboración del Índice de Trabajo Digno (ITD).

En este apartado se explican las distintas ponderaciones que fueron utilizadas para laconstrucción del Índice de Calidad del Trabajo. Así como la manera en que fue construido y laponderación que se le otorgó a cada una de las dimensiones de trabajo digno.

2.1 Ponderación conceptual y ponderación estadística: un índice con dos criterios de medición

a) Ponderación conceptual

En este estudio se establecen dos ponderaciones distintas para cada una de las dimensiones detrabajo digno, la primera está basada en las definiciones conceptuales, presentadas en la secciónanterior (a las que les corresponden la ponderación de un sexto del valor en la estimación de cadauna de las dimensiones de calidad de trabajo. Sin embargo, en el caso de las dimensiones deestabilidad laboral, representación sindical y equidad de género27), la estimación de la

contribución al valor de ‘trabajo digno’ de estas dimensiones, resulta de la suma del total de lossub-componentes que la conforman28

27 Incluso en el de representación sindical, éstos no tienen la misma valoración.

.

28 Como se mencionó antes, específicamente, en el caso de estabilidad laboral, cada sub-componente tiene la mitad delcomponente total; en el de la representación sindical, se le da una ponderación de un tercio a la empresa que cuenta con sindicato(cero a la que carece de esta organización gremial) y dos tercios adicionales si se trata de un sindicato independiente. En el casode la dimensión de la equidad de género, se le atribuye un tercio al valor al número de mujeres empleadas en las empresas de cada



b) Ponderación estadística

La segunda ponderación de las dimensiones de trabajo digno se basó en la contribución de cada

uno de los indicadores asociados a las dimensiones detrabajo digno

a la varianza total, estimadosa través del método de análisis de componentes principales.

2.2. Elaboración del Índice de Trabajo Digno (ITD)

La construcción del Índice de Trabajo Digno siguió la siguiente metodología, primero, para laestimación del valor de cada componente o indicador del Índice, se estableció un valor máximo yun valor mínimo, los cuales se comparan con el valor observado, para cada una de estasdimensiones, en cada rama de actividad industrial (véase Cuadro 3). El valor de cada dimensiónde las condiciones de calidad del trabajo se expresan como un valor entre cero y uno, aplicando

la siguiente formula general

29

: Indicador del componente = (valor observado – valor mínimo) / (valor máximo – valor mínimo)

La utilización de esta forma de normalización ha sido aplicada antes por el PNUD (2005) comometodología para estimar el Índice de Desarrollo Humano, 2004 (IDH). Así mismo estametodología ha sido utilizada para generar otros Índices de trabajo digno por los especialistas dela OIT (Bonnet, 2003 y Figueiredo y Standing, 2003).

La fórmula utilizada para la obtención del Índice de Trabajo Digno fue:

ITD = (1/6) [(indicador estabilidad en el empleo + (indicador salarios) + (indicador prestaciones) +

(indicador capacitación) + (indicador representación sindical) + (indicador equidad de genero)]

Cuadro 2. Variables y valores máximos y mínimos utilizadas para la elaboración de los Indicadoresde Trabajo Digno.

Dimensiones y Componentes Valor delcomponente

PonderadoresConceptuales*(1/6 del valor paracada dimensión)

PonderadoresComponentesPrincipales**

Máximo Mínimo 1992 1999

rama de actividad industrial, y dos tercios adicionales en consideración al monto del salario que perciben las mujeres (véaseCuadro 3).29 La actividad de la industria manufacturera está clasificada en 53 clases de actividad de transformación. En este estudio se tomansólo 52, pues la clase de la industria petroquímica es de reciente creación y no está incluida en la información de 1992. Unasegunda modificación en este trabajo consistió en cambiar el concepto de ‘clase’ de actividad industrial por el de ‘rama’ conobjeto de ganar claridad en la comprensión de este documento.



Estabilidad en el empleo:(a). Porcentaje de los trabajadoresque laboran en las empresas concontrato de planta.(b). Porcentaje de los trabajadores no

dados de baja de la plantilla al cierredel año.

100 0La mitad de laponderación total deesta dimensión. (1/12del valor)

0.0594 0.1451


0.0594 0.0725

Capacitación: Porcentaje deempleados que recibieroncapacitación.

100 01/6 del valor

0.1906 0.1792

Salarios: Remuneraciones promediopagadas al personal mensualmente,en los establecimientos (pesos de1994).

1992

1/6 del valor 0.21643,041 5421999

1/6 del valor 0.20683,762 450Prestaciones: Porcentaje deempleados que cuenta con algún tipode prestación.

100 0 1/6 del valor 0.1509 0.1351

Equidad de Género:(a). Porcentaje de mujeres empleadasen el sector.

(b). Salario mensual de las mujeresen relación al de los hombres (pesosde 1994).


0.096 0.0941

1992 La mitad de laponderación total deesta dimensión. (1/12del valor)

0.0962,316 304

1999 0.09413,095 112

Sindicalización:(a). Porcentaje de establecimientos de

la rama con sindicato.(b). Porcentaje de trabajadores ensindicatos independientes.

100 0 Un tercio de laponderación total de

esta dimensión(1/18 del valor)

0.043 0.0481

100 0Dos tercios de laponderación total deesta dimensión (1/9del valor)

0.860 0.0962

Fuentes: INEGI (véase notas de pie de página). Se toman los valores máximo y mínimo en cada una de las 52 ramasindustriales.*La ponderación se basa en la definición de cada una de las dimensiones como se lee en el texto. **La pondera-ción está basada en el análisis factorial.

III. PRESENTACIÓN Y DISCUSIÓN DE RESULTADOS

1. Empleo: Primera Condición del Trabajo Digno

La importancia de la aplicación del Índice de Calidad del Trabajo, en el caso concreto de lavaloración de las condiciones en la industria manufacturera, reside en que la organización delproceso productivo muy posiblemente ha experimentado una profunda reestructuración einnovación, con objeto de elevar su productividad y su competitividad en el contexto de la



apertura comercial, lo que ha tenido efectos en las condiciones laborales.

Este estudio cubre un periodo relevante para la industria manufacturera pues coincide con lafirma de dos tratados comerciales más importantes para México: el establecido con América del

Norte y el firmado con la Unión Europea. El alcance temporal del estudio incluye también lacrisis de 1995, la que a pesar de su brevedad tuvo un efecto negativo importante en la estructuralaboral, sobre todo en el ritmo de la creación de empleo y muy posiblemente en el deterioro delas condiciones de trabajo.

El alcance temporal de este análisis cubre el periodo de 1990 a 2004, lo que representa unacobertura temporal superior a la del estudio (1992 a 1999) que además de ser un periodo

importante, como se mencionó en la justificación, quedó acotado a la disponibilidad de lasencuestas en las que se basó el análisis. Sin embargo, nos pareció pertinente incluir un alcancetemporal más amplio por la oportunidad que ofrece para la identificación de tendencias,

anteriores y posteriores, que sirven de marco y contexto al análisis de nuestro estudio. Porejemplo, los datos en 1990 resultan importantes como referencia a la evolución posterior durantela década de los noventa, sobre todo a partir de 1995 (año en que se registran los efectos de lacrisis. Después de 1999, no obstante de los efectos sobre la economía de México, que resultan dela desaceleración en la EE.UU., no se identifica propiamente un cambio estructural. Este análisisfue posible en virtud de que se considera el periodo 1990-2004. En el marco temporal 1990-2004, es posible identificar tres periodos distintos en el comportamiento del empleo en laindustria manufacturera en México: el primero cubre el periodo de 1990 a 1994, que correspondea la expansión inicial de la industria manufacturera, como resultado de la apertura comercial.

A pesar del aumento del producto manufacturero, la proporción de éste con respecto al PIBdisminuyó ligeramente, además que el empleo, lejos de recuperarse, diminuyó (véase Cuadro 4).El segundo periodo cubre la crisis de 1995 y su recuperación posterior (1996 a 2000). En 1995,

México experimentó una de las crisis económicas más profundas de las últimas cinco décadas(Banco de México, 1996), la tasa de desocupación aumentó en 2.5 por ciento, como resultado dela caída de la actividad económica, todos los indicadores disminuyeron: el PIB, el índiceproducto manufacturero y el empleo formal (el número de asegurados en el IMSS, véase Cuadro3).

El tercer periodo comprende la desaceleración económica, que se pone de manifiesto a partir del2000, inmediatamente después del año que analiza nuestro estudio. En ese año, el desempleoalcanzó su punto más bajo desde 1990 (2.2 por ciento de desempleo abierto). Esto se debió a ladesaceleración económica de Estados Unidos, el principal mercado para los productos de origen



mexicano y la fuente principal de inversión extranjera directa de la economía mexicana 30

,

además del incremento en la competencia por mercados e inversiones, sobre todo de China.Estos eventos tuvieron un efecto negativo sobre la economía: el PIB disminuyó en el 2001 en0.16 por ciento, el producto manufacturero cayó 3.8 por ciento, la creación de empleo formal

(asegurados en el IMSS) se redujo de 4.7 por ciento en el 2000 a -0.82 por ciento en 2004. Latasa de desempleo abierto, que había logrado disminuir, vuelve a aumentar en el 2001 a un nivelsimilar al observado diez años antes (2.6 por ciento en 1991 y 2.4 por ciento en el 2001, véaseCuadro 4). Desde entonces el empleo no se ha recuperado a los niveles de 1990.

Este análisis muestra que el desenvolvimiento de la economía mexicana entre 1990 y 2004, no hagarantizado la posibilidad de contar con un empleo para toda la población , por lo que no secumple la primera condición del trabajo digno. Es por lo anterior que resulta relevante lainvestigación, el diseño e implementación de propuestas que faciliten el tránsito de los

trabajadores a una economía abierta, brindándoles protección en forma de seguridad,oportunidades, derechos básicos como la equidad de género y representación (véase Cuadro 3).

Cuadro 3. Indicadores selectos de empleo, la economía y el sector manufacturero en México(1990-2004). (1993 = 100).

Año Tasa deDesem-

pleoAbierto

Índice deempleomanu-

Factura

Índice deproducto

manu-factura

Productomanu-factura% PIB

Tasas deCrecimiento

Aseguradosen el IMSS31

PIB ProductoManufactura

Milesde personas

Cambioen %

1990 2.8 112.3 93.4 18.0 5.18 6.77 9,530

1991 2.6 110.6 96.7 17.9 4.21 3.43 9,983 4.75

1992 2.8 107.2 100.7 18.0 3.54 4.16 10,105 1.22

1993 3.4 100.0 100.0 17.5 1.94 -0.67 10,048 -0.56

1994 3.7 97.0 104.1 17.4 4.46 4.07 10,291 2.42

1995 6.2 88.4 98.9 17.7 -6.22 -4.94 10,112 -1.74

1996 5.5 90.4 109.6 18.6 5.14 10.83 10,916 7.96

1997 3.7 94.7 120.5 19.2 6.78 9.94 12,511 14.61

1998 3.2 98.2 129.4 19.6 4.91 7.37 13,453 7.52

1999 2.5 98.8 134.9 19.7 3.87 4.21 14,414 7.14

2000 2.2 99.7 144.2 19.8 6.60 6.90 15,088 4.68

2001 2.4 95.4 138.7 19.0 -0.16 -3.82 14,965 -0.82

2002 2.7 90.6 137.8 18.8 0.83 -0.65 15,361 2.65

2003 3.3 87.5 136.0 18.3 1.35 -1.27 15,054 -2.00

2004 3.8 84.7 141.4 18.2 4.18 3.96 15,650 3.96Fuentes: Estimaciones propias basadas en datos del INEGI, www.inegi.gob.mx. % Crecimiento promedio anual.

30 El efecto de la caída de las empresas de “nueva tecnología” reflejado en el índice NASDAQ, los ataques terroristas y lainvasión de Irak.31 Adicionalmente se incluyó el número de asegurados en el Seguro Social (IMSS) que se utiliza normalmente como un indicadorde empleo formal (Hernández Licona, 2003). Fuente: INEGI Tasa desempleo. El dato de desempleo está expresado como tasa dedesempleo abierto por el INEGI Fuente: http://dgcnesyp.inegi.gob.mx/cgi-win/bdieintsi.exe/ConsultarINEGI, Banco de Información Económica (BIE) “Personas Aseguradas en el IMSS por Sector”.

http://www.inegi.gob.mx/

http://www.inegi.gob.mx/



2. Índice de Calidad de Trabajo, 1992 y 1999.

Este Índice consiste en la agregación de las seis dimensiones de trabajo digno definidas antes.Cada una de ellas parte de la definición de las libertades instrumentales, las cuales mejorandirectamente las capacidades de las personas y en consecuencia, amplían su libertad (Sen, 1999).

Los siguientes cuadros muestran las cinco industrias que tienen el Índice de Calidad del Trabajo más elevados y las cinco últimas, es decir con los menores niveles en este Índice de Calidad del

Trabajo. El análisis muestra que el valor de éste, en 1992 fue equivalente a la mitad del valormáximo aproximadamente (0.526 en la ponderación conceptual y 0.510 en la ponderación basadaen el análisis de componentes principales, véase Cuadro 4). En 1999 se observa una ligeramejoría en las condiciones de trabajo digno en la industria manufacturera de aproximadamentedos puntos porcentuales cuando se toma como referencia el ponderador conceptual (0.537) y

disminuye ligeramente cuando el ponderador está basado en componentes principales (0.527).cabe señalar que las diferencias entre las dos estimaciones son mínimas, lo que fortalece lavalidez de los resultados obtenidos a través de los dos métodos.

Es evidente que en el periodo analizado las industrias de menor complejidad tecnológicapresentan los menores niveles de dignidad en el trabajo, lo cual contrasta en gran medida con lasindustrias intensivas en tecnología en sus procesos productivos.

Para 1999, la rama industrial con mayor nivel de dignidad en el trabajo es la de sustancias químicas básicas (0.766 si se basa en la definición conceptual y 0.761 si la ponderación está

sustentada en el análisis de componentes principales) y la rama con el menor nivel de trabajodigno es la molienda de nixtamal y fabricación de tortillas (0.310 si se basa en la definiciónconceptual y 0.285 si la ponderación está sustentada en el análisis de componentes principales).

Cuadro 4. Índice de Calidad de Trabajo, 1992. Posición A1 Posición B2 Industria Indicador A Indicador B

1 1 Fibras artificiales y sintéticas 0.801 0.8092 2 Sustancias químicas básicas 0.723 0.7243 4 Industria básica de hierro y acero 0.705 0.6934 3 Industria farmacéutica 0.702 0.6995 5 Industria automotriz 0.682 0.682

Promedio de la Industria Manufacturera 0.526 0.525

48 48 Estructuras metálicas, tanques y calderasindustriales

0.384 0.354

49 49 Materiales de arcilla para la construcción 0.374 0.35250 50 Productos de aserradero y carpintería 0.339 0.30851 52 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.326 0.26652 51 Envases y otros productos de madera y corcho 0.318 0.290

1Posición A, basada en criterios conceptuales. 2Posición B, basada en el análisis de componentes principales.



Cuadro 5. Índice de Calidad de Trabajo, 1999.Posición A1 Posición B2 Industria Indicador A Indicador B

1 2 Sustancias químicas básicas 0.766 0.7612 1 Industria farmacéutica 0.762 0.7673 3 Equipos electrónicos de radio, TV y comunicaciones 0.739 0.732

4 4 Industria básica de hierro y acero 0.727 0.7205 5 Industria de cómputo y periféricos 0.719 0.716

Promedio de la Industria Manufacturera 0.537 0.517

48 48 Productos de aserradero y carpintería 0.365 0.34449 50 Fibras duras y cordelería 0.342 0.30150 49 Muebles de madera 0.334 0.31351 51 Alfarería y cerámica 0.313 0.28652 52 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.310 0.285

1Posición A, basada en criterios conceptuales. 2Posición B, basada en el análisis de componentes principales.

Con respecto a la contribución relativa de las distintas dimensiones de calidad del trabajo como

se muestra en el Cuadro 6, la dimensión que tiene un mayor impacto en el deterioro de lascondiciones de trabajo es el salario, cuyo promedio sufre una caída del 22.6 por ciento entre1992 y 1999. La equidad de género y la representación sindical son otras dimensiones queinfluyen en el deterioro de las condiciones de trabajo, pues entre 1992 y 1999 el promedio deestas dimensiones cae en 6.8 por ciento y 6.1 por ciento, respectivamente. Nuevamente lasestimaciones que resultan con los dos enfoques, el conceptual y el estadístico son mínimas.

Cuadro 6. Valor promedio de las dimensiones y del ICT en laindustria manufacturera, 1992-1999.

Dimensión 1992 1999 Cambio porcentualSalarios 0.480 0.376 -22.60%

Representación sindical 0.284 0.267 -6.10%

Estabilidad en el empleo 0.851 0.842 -12.00%

Equidad de género 0.405 0.381 -6.80%

Acceso a prestaciones 0.772 0.829 6.80%

Acceso a capacitación 0.369 0.545 47.00%

ICT conceptual 0.526 0.537 2.00%

ICT componentes principales 0.525 0.517 -1.50%

Fuente: ENEU y ENESTyC.

La dimensión de la calidad del trabajo que mejora en el periodo analizado es el acceso a

capacitación con un crecimiento del 47.7 por ciento entre 1992 y 1999. El acceso a prestaciones también mejora, pero en una proporción menor (6.8 por ciento). En suma, las variaciones másevidentes en el periodo son la disminución drástica de los salarios, la estabilidad en el empleo, así como representación y equidad de género. El aumento más notable es en la capacitación.



Es de hacer notar que tanto en el análisis de la calidad del trabajo por rama de actividadindustrial, como en el análisis que se enfoca en las dimensiones de trabajo digno, se observaconsistencia en los resultados obtenidos con los dos métodos de ponderación, el basado en las

definiciones conceptuales como las definiciones basadas en el análisis de componentesprincipales, las diferencias que arroja uno y el otro enfoque de ponderación es mínimo (véaseCuadro 2).

En la siguiente sección se analiza el comportamiento de cada una de las dimensiones de trabajodigno.

a). Estabilidad en el empleo. Entre 1992 y 1999, el comportamiento de la estabilidad en el empleo, como condición de trabajo

digno se distribuyó en forma más o menos parecida en el conjunto de las ramas industriales. Laestabilidad promedio en el empleo observada es relativamente alta (0.855 en 1992 y 0.843 en1999). El nivel de estabilidad más elevado en 1992 corresponde a la industria de las fibras

artificiales (0.947) y el más bajo, de 0.665, en la industria de conservas alimenticias. En 1999, laestabilidad en general, aunque se mantiene alta, disminuye ligeramente (el más alto esnuevamente la industria fibras artificiales con 0.929 y el más bajo la industria de fibras duras y cordelería, de 0.637).

Lo niveles de estabilidad observados son más altos de lo esperado en la manufactura en elcontexto de una economía abierta. Se esperaría modalidades de contratación que favorecieran elajuste numérico de la mano de obra a las fluctuaciones del mercado. Las modalidades flexibles decontratación conducen a bajar los costos de contratación y despido, lo que se traduce en menoresniveles de estabilidad o seguridad laboral.

El análisis anterior nos permite afirmar que se observa una coincidencia importante entreestabilidad, formalidad y empleo en el sector manufacturero, en el que sólo en una proporciónmenor se encuentran las personas que trabajan en empresas del sector informal (Llamas y Garro,

2003: 154; Casanueva y Ortiz: 2007).

Con respecto a las diferencias de estabilidad laboral entre las ramas de actividad industrial, cabeseñalar que es la dimensión de trabajo digno más homogénea (con menor varianza) entre lasactividades industriales, y que las industrias con mayor estabilidad laboral son las de mayorcomplejidad tecnológica, por lo que probablemente contraten personal más capacitado e tengan

una mayor inversión en capital.



Cuadro 7. Indicador de estabilidad en el empleo, 1992.

Posición Industria Indicador

1 Fibras artificiales y sintéticas 0.9472 Industria del calzado 0.930

3 Vidrio y sus productos 0.9134 Hule 0.9085 Imprentas, editoriales e industrias conexas 0.908

Promedio de la Industria Manufacturera 0.855

48 Muebles metálicos 0.77649 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.77150 Fibras duras y cordelería 0.76451 Equipo de transporte y sus partes 0.75952 Conservas alimenticias 0.666

La desviación estándar es 0.05. Fuente: ENEU.

Cuadro 8. Indicador de estabilidad en el empleo, 1999.Posición Industria Indicador

1 Fibras artificiales y sintéticas 0.9292 Sustancias químicas básicas 0.9253 Industria azucarera 0.9244 Industria básica de hierro y acero 0.9115 Industria farmacéutica 0.916

Promedio de la Industria Manufacturera 0.84329 Productos de plástico 0.84230 Celulosa, papel y sus productos 0.841

48 Muebles de madera 0.757

49 Molienda de cereales 0.75650 Industria del tabaco 0.75351 Conservas alimenticias 0.69352 Fibras duras y cordelería 0.637


Cabe señalar, que los resultados en relación a la estabilidad deben ubicarse en el contexto delcomportamiento del empleo, que se presenta en la primera sección de este trabajo, en el que senota la disminución del empleo después de la crisis de 1995 y su recuperación, que aunquesostenida es más lenta en relación al crecimiento del producto manufacturero. En efecto, en 1999

el empleo no alcanzó los niveles que se observan en 1993.Este último análisis nos permite concluir que la estabilidad en el empleo del que gozan lostrabajadores se explica en gran medida, porque se trata de empleos en el sector formal de laeconomía, respaldados por Ley Federal del Trabajo, que exige modalidades formales decontratación. En el caso de la industria manufacturera, en esta década no se apreciaron cambioshacia formas de subcontratación, lo que por un a lado.



La posibilidad de contar con un empleo estable contribuye a la expansión de la libertad, al ofrecera los trabajadores condiciones de seguridad y tranquilidad en el acceso a los medios económicospara los propósitos del consumo, la producción y el intercambio (Sen, 1999).

b). Acceso a capacitación:

La capacitación resulta un instrumento (libertad instrumental) para lidiar con el continuo cambiotecnológico y evitar la obsolescencia, como se mencionó antes. Adicionalmente, la capacitaciónpermite enfrentar las presiones que resultan de una mayor competitividad, que con frecuencia

repercuten en la perdida del empleo o en el deterioro de las condiciones de trabajo, con objeto deelevar la “productividad” a través de bajar los costos de la mano de obra. Como se mencionóantes, estudios recientes han mostrado el efecto sobre la productividad, de la calidad de lascondiciones de trabajo, que incluye a la capacitación (Casanueva y Rodríguez, 2007b). Un mayoracceso a la capacitación contribuye al desarrollo de la libertad instrumental de oportunidades

sociales, y favorece a mejorar las probabilidades de acceder a un nivel más elevado de medios

económicos y de oportunidades sociales.

En la industria manufacturera mexicana, el indicador promedio de capacitación (0.362 en 1992 y0.502 en 1999) es relativamente bajo. No obstante, este indicador es más elevado en aquellasindustrias que son más intensivas en tecnología, además de contar con mayores incentivos paracontinuar innovando (evitar la obsolescencia) por que enfrentan una mayor competencia en losmercados internacionales, de ahí su interés en ofrecer capacitación, lo que tiene un efectopositivo en las condiciones de calidad del trabajo.

Cuadro 9. Indicador de acceso a capacitación, 1992. Posición Industria Indicador

1 Fibras artificiales y sintéticas 0.8262 Industria básica de hierro y acero 0.7523 Instrumentos y equipo de precisión 0.5774 Hule 0.5325 Aceites y grasas comestibles 0.520


48 Muebles de madera 0.20149 Industria azucarera 0.18150 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.181

51 Alfarería y cerámica 0.16152 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.049

La desviación estándar es 0.14 Fuente: ENESTyC.

Cuadro 10. Indicador de acceso a capacitación, 1999. Posición Industria Indicador

1 Otras sustancias y productos químicos 1.000



2 Equipos electrónicos de radio, TV y comunicaciones 1.0003 Industria automotriz 1.0004 Instrumentos y equipo de precisión 1.0005 Industria de cómputo y periféricos 0.931

Promedio de la Industria Manufacturera 0.50448 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.26549 Fibras duras y cordelería 0.19650 Productos de panadería 0.18451 Alfarería y cerámica 0.16752 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.058

La desviación estándar es 0.23 Fuente: ENESTyC.

En 1999, cuatro industrias alcanzaron el máximo valor posible en capacitación: la química, la deequipos electrónicos de radio, TV y comunicaciones, la automotriz y la de instrumentos y equipos

de precisión (1.0 en todos los casos). Todas estas ramas de actividad industrial son intensivas en

el uso de tecnologías complejas. Por otro lado, la última posición la ocupa la industria demolienda de nixtamal y fabricación de tortillas (0.058).

Adicionalmente, el análisis revela que el acceso de los trabajadores a la capacitación es ladimensión de trabajo digno que más aumentó en el la década de los noventa (véase cuadro 6). Portanto esto incrementa las libertades instrumentales de ‘oportunidades sociales’ y ‘medioseconómicos’ lo que tiene un efecto positivo en el bienestar de los trabajadores.

c). Salarios:

Los salarios representan el medio o instrumento (libertad instrumental) más directo para el accesoa los medios económicos, de ahí su vinculación con las oportunidades de elegir satisfactoresconducentes a mayores niveles de bienestar. Los análisis revela que los salarios son la dimensiónde trabajo digno que sufrió una disminución considerable, en 1999 con respecto a 1992, lo quetuvo impacto significativo en el comportamiento a la baja del Índice de Trabajo Digno en suconjunto (diminuyendo en 22.6 puntos porcentuales entre 1992 y 1999, siendo su valor inicial de0.486 en 1992 y 0.376 en 1999), además esta disminución fue generalizada entre las ramas deactividad industrial.

Cuadro 11. Indicador de salarios, 1992.

Posición Industria Indicador1 Fibras artificiales y sintéticas 1.0002 Sustancias químicas básicas 0.9833 Industria farmacéutica 0.9054 Industria automotriz 0.8305 Industria del tabaco 0.784




48 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.24849 Productos de aserradero y carpintería 0.20250 Confección de prendas de vestir 0.19951 Envases y otros productos de madera y corcho 0.16452 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.000


Cuadro 12. Indicador de salarios, 1999. Posición Industria Indicador

1 Industria farmacéutica 1.0002 Sustancias químicas básicas 0.8043 Industria básica de hierro y acero 0.7514 Industria básica de metales no ferrosos 0.7115 Industria de cómputo y periféricos 0.685


48 Confección de prendas de vestir 0.13849 Envases y otros productos de madera y corcho 0.13450 Alfarería y cerámica 0.09451 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.07852 Fibras duras y cordelería 0.000La desviación estándar es 0.20. Fuente: ENEU.

En 1992, el grupo de industrias con mejores indicadores salariales estaba conformado por las

industrias farmacéutica, química básica, fibras artificiales y sintéticas, automotriz e industria deltabaco. Estas industrias son, de nueva cuenta, aquellas que involucran procesos productivoscomplejos y de tecnologías sofisticadas, (posiblemente sean también las que empleen a personal

más calificado), con la única excepción de la industria del tabaco. En 1999, el grupo de industriasque ofrecieron mejores remuneraciones fueron las industrias farmacéuticas, química básica, delhierro y el acero, metales no ferrosos y industria de equipo de cómputo y sus periféricos. Lacondición de complejidad tecnológica que apuntábamos antes, como posible explicación delcomportamiento de los salarios, sólo parece válida en los casos de las industrias farmacéuticas,químicas y de equipo de cómputo. Los salarios relativamente más altos en las industrias delhierro y el acero, y de metales no ferrosos probablemente se expliquen por la participación de sussindicatos (factores institucionales).

Este deterioro en los salarios significa una disminución en la libertad instrumental de contar conmedios económicos, que ofrecen a las personas la posibilidad de utilizar sus recursos con elpropósito del consumo, la producción o el intercambio (Sen, 1999).

d). Prestaciones:

El acceso a prestaciones derivadas del trabajo contribuye a mejorar las condiciones de vida deltrabajador, en aspectos como la salud, la vivienda, el acceso a créditos al consumo, vacaciones



pagadas, entre otras, ésta mejora en las condiciones de vida se logra a través de las libertades

instrumentales de oportunidades sociales y procuración de seguridad (Sen, 1999), como semencionó antes. El análisis revela que son las industrias de mayor complejidad tecnológica, lasque mayor número de prestaciones otorgan a sus empleados.

Para este periodo, el indicador de prestaciones en promedio muestra una lógica distinta a la quese observa en el caso de los salarios. En efecto, las prestaciones aumentaron ligeramente, encontraste con la dramática caída del salario (de 0.768 a 0.791 para los años 1992 y 1999respectivamente). Este comportamiento muy probablemente obedezca a arreglos de carácterinstitucional, específicamente la regulación de la seguridad social y una supervisión más estrictaen su cumplimiento hacia finales de la década.

En 1999, un análisis por industria muestra que la desigualdad en el acceso a prestaciones haaumentado, se observa que la diferencia entre el valor mas alto y el mas bajo es considerable, la

primera posición es ocupada por la industria de los aceites y grasas comestibles (1.000) y laindustria del tabaco (1.000), mientras que la última corresponde a la industria de elaboración demateriales de arcilla para la construcción (0.224). Este dato confirma con la varianza de acceso alas prestaciones entre las distintas industrias. A pesar de que la calidad de las prestacionesaumenta en 1999, en relación a 1992, la diferencia en el acceso a benéficos varíaconsiderablemente entre industria e industria (véase Cuadros 13 y 14).

Cuadro 13. Indicador de acceso a prestaciones, 1992.Posición Industria Indicador

1 Fibras artificiales y sintéticas 1.0002 Industria básica de hierro y acero 0.9883 Industria automotriz 0.9724 Industria de cómputo y periféricos 0.9685 Maquinaría y equipo para usos generales 0.964


48 Productos de aserradero y carpintería 0.47749 Envases y otros productos de madera y corcho 0.44350 Materiales de arcilla para la construcción 0.29851 Industria del calzado 0.27852 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.254


Cuadro 14. Indicador de acceso a prestaciones, 1999. Posición Industria Indicador

1 Aceites y grasas comestibles 1.0002 Industria del tabaco 1.000



3 Equipo de transporte y sus partes 0.9914 Aparatos y accesorios de uso doméstico 0.9915 Equipos electrónicos de radio, TV y comunicaciones 0.989


48 Cuero, pieles y sus productos 0.59549 Muebles de madera 0.56750 Productos de aserradero y carpintería 0.52251 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.39052 Materiales de arcilla para la construcción 0.224


La mejoría en el acceso a prestaciones, en el caso de algunas industrias, subsana en algunamedida, las pérdidas en las condiciones de calidad de vida de los trabajadores, atribuidas aldeterioro del salario. Sin embargo, no es evidente si este ligero aumento en las prestaciones

representa una compensación adecuada a la disminución del salario real, en términos de laslibertades instrumentales de acceso a medios económicos y de procuración de seguridad .

Además, esta compensación depende en gran medida de la calidad de las instituciones a cargo deldiseño y la implementación de la política específica de las prestaciones (salud, pensiones,vivienda, guarderías, entre otras). De ahí que, no es posible concluir en forma definitiva sobre lacapacidad que tienen las prestaciones de compensar a las libertades instrumentales, deoportunidades sociales y procuración de seguridad .

e). Representación sindical:

El índice promedio de representación sindical es muy bajo y disminuye ligeramente hacia al finalde la década (0.284 en 1992 y 0.267 en 1999). En 1999, la industria de imprenta y editorial

muestra el índice más alto del sector manufacturero (0.620); en contraste la industria de muebles

de madera ocupó la posición más baja (0.032). Se debe tener en cuenta que el indicador mide lacalidad de los sindicatos, dando una mayor ponderación al tipo de sindicato independiente, estoexplica el hecho de que los valores sean bajos.

Cuadro 15. Indicador de representación sindical, 1992.Posición Industria Indicador

1 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.6532 Aceites y grasas comestibles 0.6233 Muebles de madera 0.4884 Sustancias químicas básicas 0.4685 Vidrio y sus productos 0.452

Promedio de la Industria Manufacturera 0.28448 Cemento, cal, yeso y otros productos 0.104



49 Productos de panadería 0.07350 Productos lácteos 0.07051 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.04952 Envases y otros productos de madera y corcho 0.040

La desviación estándar es 0.14. Fuente: ENESTyC.

Cuadro 16. Indicador de representación sindical, 1999. Posición Industria Indicador

1 Imprentas, editoriales e industrias conexas 0.6202 Fibras artificiales y sintéticas 0.5493 Sustancias químicas básicas 0.5064 Envases y otros productos de madera y corcho 0.4705 Industria básica del hierro y el acero 0.450


48 Instrumentos y equipo de precisión 0.091

49 Industria del calzado 0.06350 Productos lácteos 0.04251 Alfarería y cerámica 0.03452 Muebles de madera 0.032

La desviación estándar es 0.14. Fuente: ENESTyC.

Un estudio anterior para el mismo periodo revela que, el número de sindicatos decreció en 33.8por ciento. Es decir, en 1992 más de la tercera parte de los trabajadores en las empresasmanufactureras contaban con un sindicato y en 1999 los sindicatos de empresa disminuyeron12.2 puntos porcentuales, de forma tal que sólo 24.0 por ciento de las empresas contaron con

representación sindical en 1999 (véase Cuadro 17).Cuadro 17. Representación Sindical.

(Porcentaje de Empresas que Cuentan con Sindicato)

1992 1999 2002 % *

Total delSector

36.1 24.0 N. D. -33.8

*Crecimiento promedio en el período. Fuente: ENESTyC.

Un estudio adicional sobre sindicalismo afirma que, en la década de los noventa habla de un“...importante debilitamiento cuantitativo… el espacio que ocuparon los sindicatos en el año2000 fue menor al que ocuparon en 1992” (Herrera y Melgoza, 2003: 324). Esta disminución enparte se explica por el desempleo que siguió a la crisis de 1994 – 1995, sin embargo, no obstantea que el empleo se recuperó, la presencia de los sindicatos no aumentó en los niveles observadosen 1990, además de que en los empleos recientemente creados, se observó una menor medida de

afiliación sindical (Herrera y Melgoza, 2003).



El análisis sugiere que la representación sindical, y su posible impacto en la resolución deconflictos a favor de la cooperación entre trabajadores y patrones pueden tener efectos limitadosen la distribución de los beneficios que resultan de la producción. Esto se pone de manifiesto en

el deterioro sufrido por los salarios reales. f). Equidad de género:

El promedio del indicador de equidad de género es de los más bajos para los dos años 32

Los datos confirman que las mujeres son más vulnerables dentro del mercado de trabajo y tienenmenos oportunidades de obtener un trabajo fuera del hogar bien remunerado. Esto se debe, comose mencionó antes, a que existen formas de relaciones sociales que son acepadas como legítimas,que están sancionadas por convenciones sociales, más allá del marco de los derechos legales(Drèze y Sen, 1989).

, ydisminuye ligeramente a lo largo del periodo analizado, pasando de 0.418 en 1992 a 0.373 en

1999. Además, la brecha entre la industria con mayor valor del indicador y la de menor valoraumenta entre estos años. Tanto en 1992 como en 1999, en industrias más intensivas entecnología tienden a favorecer condiciones más equitativas para las mujeres, en relación a la desus contrapartes varones, como es el caso de la industria química, en el que tradicionalmente seobserva una mayor participación de mujeres con niveles elevados de escolaridad, pero parecemás un caso de excepción que la regla (0.743 en 1992 y 0.768 en 1999).

Cuadro 18. Indicador de equidad de género, 1992.

Posición Industria Indicador1 Otras sustancias y productos químicos 0.7432 Hule 0.7173 Industria automotriz 0.6824 Industria básica de metales no ferrosos 0.6425 Industria del tabaco 0.637

Promedio de la Industria Manufacturera 0.40948 Envases y otros productos de madera y corcho 0.22449 Estructuras metálicas, tanques y calderas industriales 0.21150 Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas 0.19651 Productos de aserradero y carpintería 0.19152 Alfarería y cerámica 0.177

Cuadro 19. Indicador de equidad de género, 1999.

32 Los más indicadores del Índice de Trabajo Digno, todavía más bajos son los de acceso a la capacitación y el de representaciónsindical.



Posición Industria Indicador

1 Otras sustancias y productos químicos 0.7682 Industria básica de metales no ferrosos 0.6273 Equipos electrónicos de radio, TV y comunicaciones 0.6114 Industria farmacéutica 0.5985 Industria básica de hierro y acero 0.597


48 Molienda de cereales 0.19549 Envases y otros productos de madera y corcho 0.18550 Alfarería y cerámica 0.18351 Productos de aserradero y carpintería 0.17952 Fibras duras y cordelería 0.165

La rama de otras sustancias y productos químicos se mantiene en ambos años a la cabeza enequidad de género (0.768 en 1999), mientras que la industria de las fibras duras y cordelería es la

más desigual en el trato las mujeres (0.165). Al final del periodo analizado, las industrias conmayor intensidad de tecnología presentan mayor equidad de género, contrastando con lasindustrias de menor complejidad tecnológica.

La persistente desigualdad en las condiciones de trabajo entre géneros que se observa en lamayoría de las ramas industriales, inhibe el acceso a las libertades instrumentales que se derivande una mayor equidad en el ámbito laboral, que consisten básicamente en el acceso aoportunidades sociales, medios económicos y de procuración de la seguridad , en condiciones deigualdad entre hombres y mujeres (Sen, 1999).

IV. CONCLUSIONES

En este estudio se construye un Índice de Calidad del Trabajo que posteriormente se utiliza paraevaluar las condiciones de trabajo de la industria manufacturera en México. Su finalidad es la de

ofrecer una alternativa útil para la medición de las dimensiones observables, asociadas a lascondiciones de trabajo, en otros estudio. Y en este estudio se aplica a la industria manufactureraen 1992 y 1999, que como se mencionó resulta un periodo interesante con objeto de analizar elefecto dinámico en el comportamiento de los mercados de trabajo en general y en particular en lacalidad del empleo.

En la construcción de este índice se procura subsanar las deficiencias de las que adolece confrecuencia la construcción de otros Índices, la falta de un modelo teórico a partir del cual sedesprenden los indicadores (dimensiones). Este marco a su vez garantiza la transparencia en eluso del Índice, con objeto de prevenir o evitar que la elección de las variables (indicadores o



dimensiones) y las fórmulas subyacentes cumplan el sólo propósito de corroborar una tesispreconcebida, como lo enuncia Bonnet (2003: 1).

El Índice consiste en la agregación de las seis dimensiones de trabajo digno mencionadas antes.

Para cada una de estas dimensiones se establecen dos ponderaciones distintas, la primera estuvobasada en las definiciones conceptuales. La segunda ponderación de las dimensiones de trabajo

digno se basó en el cálculo de la contribución de cada uno de los indicadores asociados a lasdimensiones de trabajo digno, a través del método de análisis de componentes principales.

Los resultados del estudio muestran que en el periodo analizado las industrias de menorcomplejidad tecnológica presentan los menores niveles de dignidad en el trabajo, lo quecontrasta con lo observado en las industrias intensivas en tecnología en sus procesos productivos,para las cuales el ICT es superior.

El análisis, usando el ICT , revela que la estabilidad en el empleo en promedio es alta y que es ladimensión de trabajo digno más homogénea (con menor varianza) entre las distintas dimensionesy entre las distintas ramas de actividad industrial. Esta investigación confirma el predominio de laestabilidad o seguridad laboral, sobre las modalidades de contratación temporal o subcontrataciónen la industria manufacturera. Este hecho posiblemente se explique por los bajos salarios, unarepresentación sindical poco protectora del salario (como se muestra adelante) y la preferenciadel empleador por la observancia de la Ley Federal del Trabajo, que conducen a las empresas acontratar empleados bajo esquemas de mayor estabilidad, además de los resultados del análisis deun estudio previo (véase Casanueva y Rodríguez, 2007a).

Por otra parte, el análisis de cada dimensión del Índice de Calidad del Trabajo muestra que ladimensión que tiene un mayor impacto en el deterioro de las condiciones de trabajo es el salario,cuyo promedio sufre una caída dramática entre 1992 y 1999. Un estudio anterior, con unacobertura temporal más amplia (1992-2002) coincide con los resultados del análisis del presenteestudio. El estudio citado contrasta los salarios, en términos reales, con las líneas de la pobreza,publicadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social(CONEVAL) disponibles a partir del 2000, con objeto de inferir la capacidad adquisitiva queresulta de los salarios al trabajo sobre todo en 1999 (véase Casanueva y Rodríguez, 2007a).

Las comparaciones que realiza el estudio citado muestran que las remuneraciones son apenassuperiores a línea de pobreza alimenticia y de capacidades, sin embargo inferiores a la línea depobreza patrimonial, lo que implica que los trabajadores tienen dificultades para ahorrar y formarun patrimonio, y para enfrentar una eventualidad. Además de que la vulnerabilidad los hacetotalmente dependientes del sistema de seguridad social público, tanto para enfrentar problemasde salud o invalidez, como para obtener un crédito para la vivienda y contar con una pensión para



la vejez. De ahí que su bienestar en gran medida depende de la calidad del funcionamiento lasinstituciones encargadas de la administración y distribución de las prestaciones o en su caso, de lasupervisión del cumplimiento por parte de las empresas (véase Casanueva y Rodríguez, 2007a).

Adicionalmente, el presente análisis revela que el acceso de los trabajadores a la capacitación y alas prestaciones fueron las dimensiones de trabajo digno que más aumentaron en la década de losnoventa. Por lo tanto, la mejoría en el acceso a prestaciones y la capacitación, en el caso dealgunas industrias, subsanan en alguna medida las pérdidas en las condiciones de calidad de vidadel trabajo de los empleo, atribuidas, principalmente, al deterioro del salario. Sin embargo, no esevidente si este ligero aumento en las prestaciones representa una compensación adecuada a ladisminución del salario real, en términos de las libertades instrumentales de acceso a medioseconómicos y de procuración de seguridad (Sen, 1999).

Como se ha mencionado antes, esta investigación es consistente con un estudio previo que revelaque el número de prestaciones a la que los trabajadores tienen acceso aumentaron (Casanueva yRodríguez, 2007a). Sin embargo, el incremento del gasto público y privado en prestacionesadministradas por el gobierno no es una garantía de que éste compense los bajos salarios y sudisminución durante el periodo en cuestión. Es decir, no aseguran el desarrollo de las libertadesinstrumentales de acceso a medios económicos y de procuración de seguridad.

No obstante a que no se cuentan con estudios sistemáticos, sobre el sistema de seguridad socialpúblico, hay evidencia de que el funcionamiento de las instituciones de seguridad social quedependen del gobierno no es el óptimo. Además de las dificultades que han enfrentado la reforma

de estas instituciones, por ejemplo el caso del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de losTrabajadores del Estado (ISSTTE), cuya reforma conducente a sanear las finanzas de estainstitución, elevar la calidad del servicio, en detrimento de las rentas y canonjías de las quegozaba el sindicato de esta institución, ha enfrentado oposición política pues ha enfrentado lacrítica de la llamada izquierda, manipulados por el sindicato corporativista, que ha malinterpretado esta reforma como un intento de “privatizar” a esta institución. Ene le caso delInstituto mexicano de Seguridad Social, la reforma en la administración pasada fue frustrada porel sindicato que comparte con el del ISSTTE características de corporativismo. En el caso delIMSS carece de transparencia en la operación y en uso de los recursos. Por lo anterior no hay

certeza de que el aumento en el número de prestaciones al que tienen acceso los trabajadores,compensen la pérdida en la capacidad adquisitiva, a través de un sistema de salud, pensiones y depensiones en caso de invalidez y retiro.

Por último, otros resultados muestran que el índice promedio de representación sindical es muybajo y disminuye aún más hacia al final de la década y, a su vez, que las mujeres son más



vulnerables dentro del mercado de trabajo y tienen menos oportunidades de obtener un trabajofuera del hogar, bien remunerado (Casanueva y Rodríguez, 2007a).

Las coincidencias observadas representan una fuente de validez externa al Índice de Calidad del

Trabajo que este estudio se propuso construir, que se basa, por un lado, en criterios normativos einstitucionales, y por el otro le da un sustento teórico. De ahí que además de valorar la calidaddel trabajo en la industria manufacturera, al principio y al final de la década de los noventa, laprincipal aportación de la presente investigación haya sido la de ofrecer una herramientametodológica que permite evaluar las condiciones de calidad del trabajo.

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APÉNDICE: VALORES DEL ITD Y SUS DIMENSIONES POR RAMA DE ACTIVIDAD INDUSTRIAL.

Cuadro 1-A. Indicadores de las dimensiones de trabajo digno e Índice de Calidad de Trabajo, 1992Rama Estabilidad Salarios Presta-

cioonesCapacita-

ciónSindica-lización

Equidadde Género

ITD-A ITD-B

Fibras artificiales y

sintéticas 0.947 1 1 0.826 0.442 0.592 0.801 0.809Sustancias químicasbásicas 0.893 0.983 0.926 0.511 0.468 0.558 0.723 0.725Industria básica dehierro y acero 0.902 0.628 0.988 0.751 0.442 0.519 0.705 0.693Industriafarmacéutica 0.905 0.905 0.96 0.501 0.416 0.528 0.702 0.700

Industria automotriz 0.841 0.83 0.972 0.403 0.364 0.682 0.682 0.682

Hule 0.908 0.666 0.92 0.532 0.326 0.717 0.678 0.673

Coque 0.893 0.779 0.985 0.416 0.333 0.604 0.668 0.663

Industria del tabaco 0.899 0.784 0.93 0.279 0.448 0.637 0.663 0.651Industria básica demetales no ferrosos 0.88 0.656 0.913 0.458 0.342 0.642 0.649 0.640Vidrio y susproductos 0.913 0.668 0.824 0.494 0.452 0.544 0.649 0.636

Otras sustancias yproductos químicos 0.831 0.72 0.725 0.375 0.432 0.743 0.638 0.635Aceites y grasascomestibles 0.806 0.488 0.953 0.52 0.624 0.276 0.611 0.579Maquinaria deoficina, cálculo yprocesamiento deinformación 0.857 0.608 0.968 0.384 0.329 0.477 0.604 0.588Alimentospreparados para 0.905 0.576 0.915 0.45 0.372 0.341 0.593 0.570



animals

Equiposelectrónicos deradio, TV ycomunicaciones 0.885 0.452 0.932 0.512 0.287 0.463 0.589 0.568Aparatos y

accesorios de usodomestico 0.815 0.495 0.942 0.49 0.335 0.447 0.587 0.570Celulosa, papel ysus productos 0.87 0.568 0.802 0.411 0.406 0.436 0.582 0.563Maquinaria yequipo para usosgenerales 0.851 0.573 0.964 0.401 0.22 0.467 0.579 0.566Maquinaria yequipo para finesespecíficos 0.812 0.669 0.853 0.364 0.351 0.412 0.577 0.565Instrumentos yequipo de precisión 0.833 0.63 0.787 0.577 0.207 0.389 0.57 0.566Maquinaria, equipoy accesorioseléctricos 0.873 0.438 0.951 0.437 0.318 0.349 0.561 0.534Otros productosmetálicos 0.811 0.515 0.841 0.36 0.326 0.496 0.558 0.542Industria de lasbebidas 0.861 0.455 0.888 0.453 0.218 0.465 0.557 0.539Productos deplástico 0.821 0.409 0.791 0.441 0.328 0.482 0.545 0.525Otros productosalimenticios paraconsumo humano 0.89 0.626 0.576 0.471 0.257 0.429 0.542 0.534Hilado, tejido yacabado de fibrasblandas 0.867 0.431 0.891 0.399 0.255 0.256 0.517 0.490Fundición de piezasde metal ferroso yno ferroso 0.857 0.463 0.75 0.436 0.233 0.302 0.507 0.487

Industria azucarera 0.882 0.449 0.953 0.181 0.227 0.314 0.501 0.471Equipo de

transporte y suspartes 0.759 0.396 0.929 0.326 0.277 0.317 0.501 0.476Imprentas,editoriales eindustrias conexas 0.908 0.459 0.704 0.234 0.264 0.38 0.491 0.466Cemento, cal, yesoy otros productos 0.842 0.523 0.68 0.402 0.104 0.394 0.491 0.482

Muebles de madera 0.847 0.408 0.488 0.201 0.488 0.515 0.491 0.464

Muebles metálicos 0.776 0.403 0.912 0.3 0.209 0.299 0.483 0.459Fibras duras ycordelería 0.764 0.372 0.876 0.3 0.261 0.318 0.482 0.456Molienda decereales 0.9 0.417 0.767 0.291 0.182 0.326 0.481 0.455Cocoa, chocolate yconfitería 0.815 0.364 0.634 0.365 0.294 0.365 0.473 0.450

Productos lácteos 0.861 0.411 0.92 0.245 0.069 0.316 0.47 0.447Tejidos de punto 0.85 0.34 0.527 0.348 0.331 0.396 0.465 0.440Confección conmateriales textiles 0.811 0.393 0.756 0.293 0.126 0.381 0.46 0.441

Carne 0.876 0.305 0.713 0.293 0.173 0.363 0.454 0.426Cuero, pieles y susproductos 0.859 0.456 0.629 0.29 0.109 0.301 0.441 0.423Conservasalimenticias 0.666 0.274 0.914 0.286 0.207 0.287 0.439 0.413

Otras industrias 0.851 0.329 0.543 0.303 0.183 0.332 0.423 0.400



ITD-A, ponderación basada en criterios conceptuales. ITD-B, ponderación basada en el análisis de componentes principales.

Cuadro 2-A. Indicadores de las dimensiones de trabajo digno e Índice de Calidad de Trabajo, 1999.Rama Estabi-

lidadSalarios Pres-

tacionesCapacita-

ciónSindica-lización

Equidad deGénero

ITD-A ITD-B

Sustancias químicasbásicas 0.925 0.804 0.941 0.859 0.506 0.563 0.766 0.762

Industria farmacéutica 0.916 1 0.933 0.729 0.398 0.598 0.762 0.768Equipos electrónicos deradio, TV ycomunicaciones 0.86 0.621 0.989 1 0.351 0.611 0.739 0.732Industria básica de hierro yacero 0.92 0.751 0.927 0.716 0.45 0.597 0.727 0.721Maquinaria de oficina,cálculo y procesamiento deinformación 0.774 0.685 0.941 0.931 0.412 0.573 0.719 0.716Otras sustancias yproductos químicos 0.894 0.577 0.689 1 0.241 0.768 0.695 0.701Fibras artificiales ysintéticas 0.929 0.556 0.965 0.717 0.549 0.432 0.691 0.670Industria automotriz 0.885 0.567 0.977 1 0.33 0.356 0.686 0.672Industria básica de metales

no ferrosos 0.896 0.711 0.95 0.548 0.333 0.627 0.677 0.671Aparatos y accesorios deuso domestico 0.872 0.274 0.991 0.889 0.357 0.396 0.63 0.603Maquinaria y equipo parafines específicos 0.837 0.495 0.923 0.716 0.329 0.381 0.613 0.597Maquinaria, equipo yaccesorios eléctricos 0.8 0.497 0.979 0.682 0.31 0.39 0.609 0.592Industria de las bebidas 0.9 0.427 0.909 0.724 0.2 0.492 0.609 0.593Vidrio y sus productos 0.906 0.557 0.911 0.499 0.285 0.49 0.608 0.593

manufactureras

Confección deprendas de vestir 0.872 0.199 0.558 0.298 0.106 0.426 0.41 0.384

Alfarería y cerámica 0.834 0.252 0.664 0.161 0.328 0.177 0.403 0.361Productos depanadería 0.876 0.255 0.677 0.236 0.073 0.278 0.399 0.370

Industria delcalzado 0.93 0.316 0.278 0.289 0.221 0.35 0.397 0.372Estructurasmetálicas, tanques ycalderas industriales 0.771 0.248 0.845 0.181 0.049 0.211 0.384 0.355Materiales de arcillapara la construcción 0.893 0.331 0.298 0.214 0.158 0.353 0.374 0.352Productos deaserradero ycarpintería 0.823 0.202 0.477 0.217 0.126 0.191 0.339 0.308Molienda denixtamal yfabricación detortillas 0.806 0 0.254 0.049 0.653 0.196 0.326 0.266



Carne 0.828 0.453 0.919 0.545 0.272 0.556 0.595 0.580Otros productos metálicos 0.825 0.45 0.85 0.614 0.365 0.444 0.591 0.574Otros productosalimenticios para consumohumano 0.874 0.443 0.903 0.618 0.262 0.412 0.585 0.567Productos de plástico 0.842 0.314 0.903 0.628 0.398 0.402 0.581 0.555Aceites y grasascomestibles 0.883 0.473 1 0.486 0.301 0.328 0.579 0.554Alimentos preparados paraanimales 0.894 0.432 0.949 0.623 0.254 0.311 0.577 0.555Celulosa, papel y susproductos 0.841 0.466 0.868 0.651 0.245 0.387 0.576 0.561Equipo de transporte y suspartes 0.761 0.307 0.991 0.662 0.408 0.312 0.573 0.544Instrumentos y equipo deprecisión 0.897 0.296 0.852 1 0.091 0.303 0.573 0.556Imprentas, editoriales eindustrias conexas 0.894 0.457 0.702 0.315 0.62 0.4 0.565 0.541Hule 0.894 0.378 0.841 0.646 0.147 0.484 0.565 0.550Industria azucarera 0.924 0.534 0.972 0.311 0.267 0.324 0.555 0.532Industria del tabaco 0.753 0.335 1 0.425 0.307 0.446 0.544 0.519Maquinaria y equipo parausos generales 0.862 0.398 0.921 0.504 0.223 0.324 0.539 0.516Hilado, tejido y acabado defibras blandas 0.864 0.312 0.922 0.561 0.241 0.305 0.534 0.508Conservas alimenticias 0.693 0.325 0.917 0.604 0.204 0.421 0.527 0.509Cemento, cal, yeso y otrosproductos 0.865 0.376 0.767 0.513 0.135 0.432 0.515 0.500Muebles metálicos 0.794 0.253 0.857 0.453 0.286 0.3 0.49 0.463Productos lácteos 0.873 0.276 0.923 0.464 0.042 0.341 0.486 0.462Fundición de piezas demetal ferroso y no ferroso 0.849 0.242 0.85 0.439 0.195 0.329 0.484 0.457Tejidos de punto 0.816 0.265 0.837 0.357 0.154 0.33 0.46 0.435Confección con materialestextiles 0.782 0.245 0.721 0.48 0.108 0.377 0.452 0.434

Cuero, pieles y susproductos 0.856 0.199 0.595 0.653 0.141 0.259 0.451 0.432Cocoa, chocolate yconfitería 0.811 0.247 0.634 0.591 0.119 0.306 0.451 0.435Molienda de cereales 0.756 0.249 0.959 0.308 0.198 0.195 0.444 0.412Envases y otros productosde madera y corcho 0.813 0.134 0.767 0.277 0.47 0.185 0.441 0.402Otras industriasmanufactureras 0.827 0.18 0.699 0.321 0.291 0.304 0.437 0.409Confección de prendas devestir 0.854 0.138 0.698 0.283 0.182 0.359 0.419 0.392Productos de panadería 0.816 0.247 0.627 0.184 0.343 0.287 0.417 0.391Estructuras metálicas,tanques y calderasindustriales 0.794 0.18 0.881 0.265 0.125 0.221 0.411 0.379

Industria del calzado 0.883 0.15 0.643 0.399 0.063 0.257 0.399 0.375Materiales de arcilla parala construcción 0.793 0.236 0.224 0.298 0.316 0.348 0.369 0.359Productos de aserradero ycarpintería 0.855 0.195 0.522 0.34 0.099 0.179 0.365 0.344Fibras duras y cordelería 0.637 0 0.928 0.196 0.124 0.165 0.342 0.302Muebles de madera 0.757 0.161 0.567 0.282 0.032 0.203 0.334 0.313Alfarería y cerámica 0.804 0.094 0.597 0.167 0.034 0.183 0.313 0.286Molienda de nixtamal y 0.772 0.078 0.39 0.058 0.248 0.311 0.31 0.286



fabricación de tortillasITD-A, ponderación basada en criterios conceptuales. ITD-B, ponderación basada en el análisis de componentes principales.

1_ Construcción Índice Calidad del Trabajo 25 abril 08

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