0.1. Geertz, Descripcin Densa

7/23/2019 0.1. Geertz, Descripcin Densa

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Descripcin densa: hacia una teora interpretativa de la cultura

Clifford Geertz

I

En su libroPhilosophy in a New Key, Susanne Langer observa que ciertas ideas estallan en el

paisaje intelectual con una tremenda fuerza. Resuelven tantos problemas fundamentales en un

momento que tambin parecen prometer que van a resolver todos los problemas

fundamentales, clarificar todas las cuestiones oscuras. Todos se abalanzan a esa idea como si

fuera un frmula mgica de alguna nueva ciencia positiva, como si fuera el centro conceptual

alrededor del cual es posible construir un nuevo sistema general de anlisis. El s!bito auge de

semejantegrande ide, que eclipsa momentneamente casi todo lo dems, se debe, dice la

autora, "al #ec#o de que todos los esp$ritus sensibles % activos se dedican inmediatamente a

e&plotarla. La probamos en toda circunstancia, para toda finalidad, e&perimentamos las

posibles e&tensiones de su significacin estricta, sus generalizaciones % derivaciones'.

(ero una vez que nos #emos familiarizado con la nueva idea, una vez que sta forma parte de

nuestra provisin general de conceptos tericos, nuestras e&pectativas se #acen ms

equilibradas en lo tocante a los usos reales de dic#a idea, de suerte que as$ termina su

e&cesiva popularidad. Slo unos pocos fanticos persisten en su intento de aplicarla

universalmente) pero pensadores menos impetuosos al cabo de un tiempo se ponen a

considerar los problemas que la idea #a generado. Tratan de aplicarla % #acerla e&tensiva a

aquellos campos donde resulta aplicable % donde es posible #acerla e&tensible % desisten de

#acerlo en aquellos en que la idea no es aplicable ni puede e&tenderse. Si era valedera se

convierte entonces verdaderamente en una idea seminal, en una parte permanente %perdurable de nuestro arsenal intelectual. (ero %a no tiene aquel promisorio, grandioso

alcance de su aparente aplicacin universal que antes ten$a. La segunda le% de termodinmica

o el principio de la seleccin natural o el concepto de motivacin inconsciente o la

organizacin de los medios de produccin no lo e&plica todo % ni siquiera todo lo #umano,

pero, sin embargo, e&plica algo) de manera que nuestra atencin se dirige a aislar slo lo que

es ese algo, a desembarazarnos de una buena porcin de seudociencia a la que, en el primer

entusiasmo de su celebridad, la idea tambin dio nacimiento.

*ue sea en realidad ste o no el modo en que se desarrollan los conceptos cient$ficos

fundamentalmente importantes, no lo s. (ero ciertamente este esquema encaja en el

concepto de cultura alrededor del cual naci toda la disciplina de la antropolog$a, la cual sepreocup cada vez ms por limitar, especificar, circunscribir % contener el dominio de

aqulla. Los ensa%os que siguen, en sus diferentes maneras % en sus varias direcciones estn

todos dedicados a reducir el concepto de cultura a sus verdaderas dimensiones, con lo cual

tienden a asegurar su constante importancia antes que a socavarla. Todos ellos, a veces

e&pl$citamente pero con ms frecuencia en virtud del anlisis particular que desarrollan,

preconizan un concepto de cultura ms estrec#o, especializado %, seg!n imagino,

tericamente ms vigoroso que el de E. +. T%lor, al que pretende reemplazar, pues el "todo

sumamente complejo' de T%lor, cu%a fecundidad nadie niega, me parece #aber llegado al

punto en el que oscurece ms las cosas de lo que las revela.

El pantano conceptual a que puede conducir el estilopot-au-feut%loriano de teorizar sobre lacultura resulta palpable en lo que todav$a es una de las mejores introducciones generales a la


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antropolog$a,Mirror for Mande l%de -luc#o#n. En unas veintisiete pginas de su cap$tulo

sobre el concepto de cultura, -luc#o#n se las ingenia para definir la cultura como/ 01 "el

modo total de vida de un pueblo') 21 "el legado social que el individuo adquiere de su

grupo') 31 "una manera de pensar, sentir % creer') 41 "una abstraccin de la conducta') 51

"una teor$a del antroplogo sobre la manera en que se conduce realmente un grupo de

personas') 61 "un depsito de saber almacenado') 71 "una serie de orientacionesestandarizadas frente a problemas reiterados') 81 "conducta aprendida') 91 "un mecanismo de

regulacin normativo de la conducta') 0:1 "una serie de tcnicas para adaptarse, tanto al

ambiente e&terior como a los otros #ombres') 001 "un precipitado de #istoria') % tal vez en su

desesperacin el autor recurre a otros s$miles, tales como un mapa, un tamiz, una matriz.

;rente a este gnero de dispersin terica cualquier concepto de cultura aun cuando sea ms

restringido % no enteramente estndar, que por lo menos sea internamente co#erente % que, lo

cual es ms importante, ofrezca un argumento susceptible de ser definido eber que el #ombre es

un animal inserto en tramas de significacin que l mismo #a tejido, considero que la cultura

es esa urdimbre % que el anlisis de la cultura #a de ser por lo tanto, no una ciencia

e&perimental en busca de le%es, sino una ciencia interpretativa en busca de significaciones.

Lo que busco es la e&plicacin, interpretando e&presiones sociales que son enigmticas en su

superficie. (ero semejante pronunciamiento, que contiene toda una doctrina en una clusula,

e&ige en s$ mismo alguna e&plicacin.

II

El operacionalismo como dogma metodolgico nunca tuvo muc#o sentido por lo menos en lo

que se refiere a las ciencias sociales %, salvo unos pocos rincones demasiado transitados ?el

conductismo sinneriano, los tests de inteligencia, etc.? est en gran medida muerto en la

actualidad. (ero as$ % todo, #izo un aporte importante que conserva cierta fuerza,

independientemente de lo que uno pueda pensar al tratar de definir el carisma o la alienacin

en trminos operacionales/ si uno desea comprender lo que es una ciencia, en primer lugar

deber$a prestar atencin, no a sus teor$as o a sus descubrimientos % ciertamente no a lo que

los abogados de esa ciencia dicen sobre ella) uno debe atender a lo que #acen los que la

practican.

En antropolog$a o, en todo caso, en antropolog$a social lo que #acen los que la practican es

etnograf$a. @ comprendiendo lo que es la etnograf$a o ms e&actamente lo que es #acer

etnograf$a se puede comenzar a captar a qu equivale el anlisis antropolgico como forma

de conocimiento. orresponde advertir enseguida que sta no es una cuestin de mtodos.

Aesde cierto punto de vista, el del libro de te&to, #acer etnograf$a es establecer relaciones,

seleccionar a los informantes, transcribir te&tos, establecer genealog$as, trazar mapas del rea,

llevar un diario, etc. (ero no son estas actividades, estas tcnicas % procedimientos lo que

definen la empresa. Lo que la define es cierto tipo de esfuerzo intelectual/ una especulacin

elaborada en trminos de, para emplear el concepto de Bilbert R%le, "descripcin densa'.

R%le #abla deC"descripcin densa' en dos recientes ensa%os su%os


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#aciendo Le Penseur/ "pensando % refle&ionando' % "pensando pensamientos'.

onsideremos, dice el autor, el caso de dos muc#ac#os que contraen rpidamente el prpado

del ojo derec#o. En uno de ellos el movimiento es un tic involuntario) en el otro, una guiDada

de conspiracin dirigida a un amigo. Los dos movimientos, como movimientos, son

idnticos) vistos desde una cmara fotogrfica, observados "fenomnicamente' no se podr$a

decir cul es el tic % cul es la seDal ni si ambos son una cosa o la otra. Sin embargo, a pesarde que la diferencia no puede ser fotografiada, la diferencia entre un tic % un guiDo es

enorme, como sabe quien #a%a tenido la desgracia de #aber tomado el primero por el

segundo. El que guiDa el ojo est comunicando algo % comunicndolo de una manera bien

precisa % especial/ 01 deliberadamente, 21 a alguien en particular, 31 para transmitir un

mensaje particular, 41 de conformidad con un cdigo socialmente establecido % 51 sin

conocimiento del resto de los circunstantes. omo lo #ace notar R%le, el guiDador #izo dos

cosas


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omo tantas de las pequeDas #istorias que los filsofos de G&ford se complacen en urdir,

todo este asunto de la guiDada, la falsa guiDada, la imitacin burlesca de la guiDada, el ensa%o

burlesco de la falsa guiDada, puede parecer un poco artificial. on la intencin de agregar una

nota ms emp$rica me permito


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se apoderaron del pastor de la tribu ladrona % de sus rebaDos. Los de la otra

tribu pronto llegaron montados a caballo % armados para perseguirlos % %a

estaban dispuestos a atacar. (ero cuando vieron quines eran los "ladrones de

las ovejas' cambiaron de idea % dijeron/ "=u% bien, #ablaremos'. Realmente

no pod$an negar lo que #ab$a ocurrido ?que algunos de sus #ombres #ab$an

despojado a o#en % dado muerte a sus dos visitantes? % no estabandispuestos a desatar una contienda seria con los de =armus#a porque eso

supondr$a una luc#a con los invasores. Los dos grupos se pusieron pues a

#ablar % #ablaron % #ablaron en la llanura en medio de millares de ovejas) por

fin decidieron reparar los daDos con quinientas ovejas. Los dos grupos

armados de berberes se alinearon entonces montados a caballo en dos

e&tremos opuestos de la llanura teniendo entre ellos el ganado) entonces

o#en con su negra vestidura talar % sus sueltas pantuflas se meti entre las

ovejas % comenz a elegir una por una a su placer para resarcirse de los daDos.

Is$ o#en obtuvo sus ovejas % retorn a =armus#a. Los franceses del fuerte

lo o%eron llegar desde lejos


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intervienen en la situacin, los jud$os, los berberes % los franceses, % luego continuar$a

mostrando cmo


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citar a >ard Boodenoug#, quiz su principal e&positor, seg!n la cual "la cultura


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(ero sacar de estas verdades la conclusin de que saber guiDar es guiDar % saber robar una

oveja es una correr$a para robar ovejas supone una confusin tan profunda como tomar

descripciones dbiles % superficiales por descripciones densas, identificar la guiDada con las

contracciones del prpado o la correr$a para robar ovejas con la caza de animales lanudos

fuera de los campos de pastoreo. La falacia cognitivista ?de que la cultura consiste


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onsiderada la cuestin de esta manera, la finalidad de la antropolog$a consiste en ampliar el

universo del discurso #umano. Aesde luego, no es sta su !nica finalidad, tambin aspira a la

instruccin, al entretenimiento, al consejo prctico, al progreso moral % a descubrir el orden

natural de la conducta #umana) % no es la antropolog$a la !nica disciplina que persigue esta

finalidad. (ero se trata de una meta a la que se ajusta peculiarmente bien el concepto

semitico de cultura. Entendida como sistemas en interaccin de signos interpretables


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penetra en el cuerpo mismo del objeto ?es decir, comenzamos con nuestras propias

interpretaciones de lo %ue nuestros informantes son o piensan %ue son y luego las

sistematizamos?, la l$nea que separa la cultura


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de cmo #acer una relacin mejor a partir de otra menos buena. (ero aqu$ est precisamente

la virtud de la etnograf$a. Si sta es descripcin densa % los etngrafos son los que #acen las

descripciones, luego la cuestin fundamental en todo ejemplo dado en la descripcin


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tenacidad con que las interpretaciones se articulan firmemente o en la seguridad con que se

las e&pone. reo que nada #a #ec#o ms para desacreditar el anlisis cultural que la

construccin de impecables pinturas de orden formal en cu%a verdad nadie puede realmente

creer.

Si la interpretacin antropolgica es realizar una lectura de lo que ocurre, divorciarla de loque ocurre ?de lo que en un determinado momento o lugar dicen determinados personas, de

lo que stas #acen, de lo que se les #ace a ellas, es decir, de todo el vasto negocio del mundo?

es divorciarla de sus aplicaciones % #acerla vacua. Jna buena interpretacin de cualquier cosa

?de un poema, de una persona, de una #istoria, de un ritual, de una institucin, de una

sociedad? nos lleva a la mdula misma de lo que es la interpretacin. uando sta no lo #ace

as$, sino que nos conduce a cualquier otra parte ?por ejemplo, a admirar la elegancia de su

redaccin, la agudeza de su autor o las bellezas del orden euclidiano? dic#a interpretacin

podr tener sus encantos, pero nada tiene que ver con la tarea que deb$a realizar/ desentraDar

lo que significa todo ese enredo de las ovejas.

El enredo de las ovejas ?su robo, su devolucin reparadora, la confiscacin pol$tica de ellas?es


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;rancia % o#en el aDo pasado se fue a su "patria' Hsrael, en parte como refugiado, en parte

como peregrino % en parte como patriarca agonizante. (ero lo que ellos se "dijeron'


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VI

Ae manera que la descripcin etnogrfica presenta tres rasgos caracter$sticos/ es

interpretativa, lo que interpreta es el flujo del discurso social % la interpretacin consiste en

tratar de rescatar "lo dic#o' en ese discurso de sus ocasiones perecederas % fijarlo en trminos

susceptibles de consulta. El $ula#a desaparecido o se #a alterado, pero para bien o para malperdura )he 'rgonauts of the #estern Pacific. Idems, la descripcin etnogrfica tiene una

cuarta caracter$stica, por lo menos tal como %o la practico/ es microscpica.

Esto no quiere decir que no #a%a interpretaciones antropolgicas en gran escala de sociedades

enteras, de civilizaciones, de acontecimientos mundiales, etc. En realidad, es esa e&tensin de

nuestros anlisis a conte&tos ms amplios, lo que, junto con sus implicaciones tericas, los

recomienda a la atencin general % lo que justifica que los elaboremos. I nadie le importan

realmente, ni siquiera a o#en


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uno puede #allar la esencia de sociedades nacionales, de civilizaciones, de grandes religiones

en las llamadas pequeDas ciudades % aldeas "t$picas' es palpablemente un disparate. Lo que

uno encuentra en las pequeDas ciudades % aldeas es


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Gtra particularidad es sta/ la razn de que prolijas descripciones de remotas incursiones para

robar ovejas


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con simetr$a formal. omo %a dije, todo el quid de un enfoque semitico de la cultura es

a%udarnos a lograr acceso al mundo conceptual en el cual viven nuestros sujetos, de suerte

que podamos, en el sentido amplio del trmino, conversar con ellos. La tensin entre la

presin de esta necesidad de penetrar en un universo no familiar de accin simblica % las

e&igencias de progreso tcnico en la teor$a de la cultura, entre la necesidad de apre#ender % la

necesidad de analizar es, en consecuencia, mu% grande % esencialmente inevitable. Enrealidad, cuanto ms se desarrolla la teor$a ms profunda se #ace la tensin. Esta es la

primera condicin de la teor$a cultural/ no es dueDa de s$ misma. omo es inseparable de los

#ec#os inmediatos que presenta la descripcin densa, la libertad de la teor$a para forjarse de

conformidad con su lgica interna es bastante limitada. Las generalidades a las que logra

llegar se deben a la delicadeza de sus distinciones, no a la fuerza de sus abstracciones.

@ de esto se sigue una peculiaridad en la manera


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Beneralizar dentro de casos particulares se llama generalmente, por lo menos en medicina %

en psicolog$a profunda, inferencia cl$nica. En lugar de comenzar con una serie de

observaciones e intentar incluirlas bajo el dominio de una le%, esa inferencia comienza con

una serie de significantes


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Semejante concepcin de la manera en que funciona la teor$a en una ciencia interpretativa

sugiere que la distincin


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VIII

E&iste un cuento de la Hndia ?por lo menos lo o$ como un cuento indio? sobre un ingls que


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imposible un ambiente perfectamente asptico, bien podr$an practicarse operaciones

quir!rgicas en una cloaca. (or otro lado, tampoco me #an impresionado las pretensiones de la

lingP$stica estructural, de la ingenier$a computacional o de alguna otra forma avanzada de

pensamiento que pretenda #acernos comprender a los #ombres sin conocerlos. Mada podr

desacreditar ms rpidamente un enfoque semitico de la cultura que permitirle que se

desplace #acia una combinacin de intuicionismo % de alquimia, por elegantemente que see&presen las intuiciones o por moderna que se #aga aparecer la alquimia.

Siempre est el peligro de que el anlisis cultural, en busca de las tortugas que se encuentran

ms profundamente situadas, pierda contacto con las duras superficies de la vida, con las

realidades pol$ticas % econmicas dentro de las cuales los #ombres estn contenidos siempre,

% pierda contacto con las necesidades biolgicas % f$sicas en que se basan esas duras

superficies. La !nica defensa contra este peligro % contra el peligro de convertir as$ el anlisis

cultural en una especie de esteticismo sociolgico, es realizar el anlisis de esas realidades %

esas necesidades en primer trmino. @ as$ llegu a escribir sobre el nacionalismo, sobre la

violencia, sobre la identidad, sobre la naturaleza #umana, sobre la legitimidad, sobre la

revolucin, sobre lo tnico, sobre la urbanizacin, sobre el status social, sobre la muerte,sobre el tiempo % ante todo sobre determinados intentos de determinadas personas para situar

estas cosas dentro de un marco comprensible, significativo.

onsiderar las dimensiones simblicas de la accin social ?arte, religin, ideolog$a, ciencia,

le%, moral, sentido com!n? no es apartarse de los problemas e&istenciales de la vida para ir a

parar a alg!n mbito emp$rico de formas desprovistas de emocin) por el contrario es

sumergirse en medio de tales problemas. La vocacin esencial de la antropolog$a

interpretativa no es dar respuestas a nuestras preguntas ms profundas, sino darnos acceso a

respuestas dadas por otros, que guardaban otras ovejas en otros valles, % as$ permitirnos

incluirlas en el registro consultable de lo que #a dic#o el #ombre.

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