-MASAJES 2-

Curso Online “Aprende a dar Masajes”

Material didáctico creado y registrado por el “Centro Súmate”.

Prohibida su reproducción y/o comercialización total o parcial sin consentimiento del autor.

“APRENDE A DAR MASAJES”

MÓDULO 2




¿QÚE DIFERENTES TÉCNICAS DE MASAJE PODEMOS EMPLEAR?

Existen diferentes tipos de masaje dependiendo de la técnica que decidamos emplear. Así como de los resultados que aporten a la persona.

Por este motivo, es importante conocer las características y

funciones de cada uno de ellos y así poder determinar con exactitud

cuál será el más beneficioso según el caso.

Entre los diferentes tipos de masajes podemos encontrar aquellos

que actúan sobre el sistema sanguíneo, otros que actúan sobre el

sistema linfático, sobre los canales energéticos o chakras, otros sobre el

sistema nervioso etc.

Cada uno de ellos tiene unas cualidades que lo hacen especial

sobre los otros. Y, por supuesto, el método de realización varía en cada

uno de ellos.

Veamos a continuación algunos de los tipos de masajes más

empleados en la actualidad.

- REFLEXOLOGÍA:

Esta terapia alternativa, al igual que otras terapias orientales, se

basa en la creencia de canales energéticos que se trasladan a todas las

partes del cuerpo a través de un sistema de canales llamados

meridianos.




Aplicando un masaje sobre un punto de presión situado en la

línea de un meridiano, o bien insertando una aguja de acupuntura, se

consigue liberar la energía acumulada, produciendo mejoría en la zona

refleja según el meridiano que estemos trabajando.

Aunque parezca un sistema un poco irreal, en muchos lugares

del mundo se utiliza este tipo de masaje desde hace miles de años, y los

científicos que los estudian con métodos de investigación modernos

están avalando este sistema.

Los reflexólogos trabajan con la suposición de que el cuerpo se

divide en 10 zonas verticales, empezando por la coronilla, que se

ramifican y terminan en los 10 dedos de las manos, mientras que las

ramas principales acaban en los dedos de los pies.

De acuerdo con este sistema, cada parte del cuerpo está

representada por un punto reflejo en el pie o en la mano. Otra rama de

la reflexología los encuentra representados en la oreja. Esto no




presenta ninguna contradicción; los teóricos originales identificaron

puntos reflejos en diversas partes del cuerpo. Pero se concentraron en

los que consideraron más importantes.

Al igual que los digito-puntores, los reflexólogos pretenden

ayudar a que la energía del cuerpo circule sin obstáculos para evitar la

pérdida de energía o retenciones. Al corregir los desequilibrios, se

estimulan los procesos curativos del organismo. Impidiendo el

desarrollo de enfermedades.

La reflexología ha demostrado su utilidad en patologías

relacionadas con el estrés, como alergias, asma, insomnio, depresión,

ansiedad y migrañas. También en otros problemas causados por la

tensión muscular, como lumbago. En problemas femeninos como el

síndrome premenstrual, la menopausia. O los relacionados con el

embarazo y el parto cómo pueden ser estreñimiento, vómitos,

lumbalgia, etc. Teniendo siempre especial cuidado en mujeres

embarazadas y desaconsejándolo por completo en caso de embarazo

de alto riesgo.

Los orígenes:

Los pies y las manos son dos partes del cuerpo que trabajan muy

duramente. Han sido, desde siempre, zonas preferentes para el masaje.

En su tratamiento hay un componente de cuidados afectivos, que

indudablemente desempeñan un papel propio en el proceso de

curación y de alivio del dolor.

En la tradición cristiana, Jesús insiste en lavar los pies a los

apóstoles. Las imágenes y las referencias de masajes en los pies




abundan en todo el mundo, aunque no tenemos forma de saber que

técnica empleaban. Lo que sí está claro, es que en todas las

civilizaciones, se le ha dado a los pies una importancia especial.

La reflexología comenzó a desarrollarse a principios del siglo xx,

por el doctor William Fitzgerald, que creó un esquema de puntos de

presión para usarlos como anestesia. Tras descubrir que los había por

todo el cuerpo, desarrollo un sistema de zonas muy parecido al que

utilizamos hoy día, y lo llamo “terapia zonal”.

Con este método pudo demostrar que podía clavar un alfiler en el

rostro de alguien sin que sintiera dolor tras haber presionado el punto

adecuado de la mano.

Años más tarde, en la década de los años 30, la fisioterapeuta

Eunice Ingham llegó a la conclusión de que casi todos los puntos

reflejos importantes se localizaban en los pies. Este descubrimiento le

llevo a comenzar la realización de mapas de los pies que hoy en día

siguen estando en uso y que además continúan actualizándose.

Esta terapia, cada vez está siendo más utilizada por algunos

médicos de cabecera que lo recomiendan a sus pacientes para mejorar

o hacer desaparecer sus dolencias. En Dinamarca, esta terapia es la más

popular de todas las relativas con las disciplinas alternativas y ha sido

probada por al menos el 10% de la población.




Como funciona:

En cada uno de nuestros pies podemos encontrar 26 huesos, más de 7200 terminaciones nerviosas y 107 ligamentos. Gracias a todos ellos es que podemos desarrollar una gran fuerza que sujeta nuestro cuerpo y una gama muy extensa de movimientos. Aunque estén preparados para soportar el peso corporal, los pies son una de las partes más sensibles del organismo. Es por ello que los pies sean el lugar más adecuado para aplicar los tratamientos de reflexología.

Esta terapia es complementaria a la medicina tradicional, tratando

a la persona de forma global, en lugar de un solo síntoma, basándose en

que un síntoma como el dolor o una erupción cutánea, suele ser signo

de un problema interno.

Un tratamiento de reflexología, debe comenzar en primer lugar

trabajando todo el pie de forma general, para posteriormente centrarse

en aquella zona que en la que la persona requiera mayor atención.




Reflejos en los pies:

En el pie podemos encontrar todos nuestros órganos y nuestro

cuerpo. De manera que, si tenemos claro el mapa de donde se

encuentra cada uno de ellos, podremos atajar muchas dolencias.

Si efectuamos el masaje en alguna de estas partes del pie,

podremos comprobar cómo puede influir en los correspondientes

órganos y vísceras.

Además las zonas de los pies puede incluso darnos pistas sobre

algún diagnóstico. Ya que dolores de presión de determinadas zonas

nos pueden indicar trastornos y enfermedades de las correspondientes

áreas corporales.




Reflejos en las manos:

Esta zona tiene la ventaja de poder empezar a practicarse de

manera inmediata cuando nos sumergimos en el mundo de la

reflexología. Aunque luego en la práctica es mucho menos usada que la

reflexología en los pies.

Se realiza a través de pequeñas presiones, micromasajes

circulares y lineales de manera que se estimulan las zonas que

corresponden a los órganos sobre las dos manos excepto la zona del

corazón (existe solamente en la mano izquierda); y la vesícula biliar

(existe solamente en la mano derecha).

Se piensa que el dedo medio tiene un mayor efecto. Así que éste

debe usarse para trabajar los puntos reflejos. Se aplica en cada punto




una presión ligera y, si se siente dolor, significa que en alguna parte hay

obstrucción o congestión. Además se debe hacer presión en un punto

doloroso hasta que se calme la molestia o por unos segundos a la vez,

descansando brevemente sobre la aplicación de la presión.

Reflejos en el cuerpo:

Estos puntos son totalmente diferentes de aquellos en los pies y

las manos ya que están menos alineados. Además, hay varios puntos

reflejos del cuerpo que corresponden con varios órganos o glándulas,

estos puntos en ocasiones son más difíciles de encontrar con exactitud

y por esta razón es más difícil darle masaje.




Reflejo abdominal:

Para saber si existe alguna dolencia aplicando la reflexología en

esta zona, debemos hacer lo siguiente. Ejercer una presión pequeña en

el ombligo, con el dedo medio o con una o ambas manos a la persona,

que debe estar colocada en una posición supina.

Si en ese instante percibimos una pulsación o latido, querrá decir

que hay un problema en esta área. Para combatir esta dolencia,

debemos estar sosteniendo unos segundos, soltando ligeramente y

manteniendo los dedos en la misma área, al mismo tiempo que

aplicamos un masaje suave con un movimiento circular. Si es necesario,

podemos ejercer un poco más de presión profundamente para sacar

ese latido, al mismo tiempo que hacemos un masaje más fuerte para

darle el estímulo necesario.

Este método de reconocimiento se puede aplicar en otros puntos

reflejos de la zona abdominal. Y si no hay pulsación o latido, indica que

no hay ningún problema en cada caso. Si hay una reacción dolorosa,

mantener la presión que acabamos de comentar durante unos

segundos. Esto causará un efecto calmante.




Reflejos en el pecho:

En el pecho podemos encontrar varios puntos reflejos que

coinciden con los órganos de nuestro cuerpo. Para tratar esta zona

podemos utilizar la misma técnica de masaje del abdomen para estos

puntos reflejos. Nos encontraremos con la dificultad, eso sí, de que

muchos puntos quedan sobre el hueso o el musculo y no será posible

hacer una presión tan profunda como en el abdomen o en el dedo.

Impidiéndonos obtener tan buenos resultados como en otra partes.

Reflejos en la cabeza:

En nuestra cabeza podemos encontrar muchísimos puntos

reflejos de nuestro cuerpo y organismo. De hecho, es la parte que más

tardaremos en conocer por su amplitud y complejidad.

Podemos encontrar reflejos tan importantes en la cabeza entre

los que se incluyen, estomago, riñones, vaso o páncreas. En esta zona

se vuelve a usar el dedo medio para el masaje, empezando por el centro

de la frente con un movimiento circular suave. El masaje debe traspasar

la piel para masajear el hueso por debajo la piel, y no debe frotarse al

hacerlo.

En la parte posterior de la cabeza también podemos encontrar un

gran número de reflejos. Un punto reflejo particularmente importante

es la médula oblonga. Es la parte más baja de la base del cráneo, que se

une con la parte superior de la columna vertebral.




Esta parte contiene centros importantes para el control de la

respiración, ingestión, salivación, y circulación. Este punto reflejo

podemos encontrarlo en la nuca, cerca de la base del cráneo.

Si realizamos el masaje en este punto, abrirá todos los canales

dentro del cuerpo y generará vitalidad. Calmando la tensión nerviosa y

produciendo una energía casi instantánea. Se debe ejercer presión en el

punto y dar masaje para producir los efectos deseados.




Reflejos en las orejas

El uso de los puntos de la oreja como medida de mejora de

nuestro cuerpo se viene usando desde que existe la acupuntura. De

hecho, muchos puntos de la reflexología en la oreja vienen derivados a

partir de esa técnica.

La dificultad que tenemos en la oreja, es que es una zona muy

pequeña en la que hay muchísimos puntos. Al usar un método suave de

presión y frotamiento en la parte de arriba y en los lóbulos de las orejas

se puede estimular varias áreas. Se ha informado que la reflexología

puede ayudar en problemas de oídos como el zumbido y hasta cierto

punto aliviarlos.




Al trabajar esta técnica, debemos comprender que estamos

trabajando puntos reflejos, y que cualquier parte del cuerpo se

encuentra representada en los pies o en las manos.

Técnica:

Lo primero que hacemos antes de comenzar con la sesión de

reflexología, es crear un ambiente adecuado. Este debe ser cómodo y

relajado para ambos. Esto lo podemos conseguir con una música

apropiada, con una luz agradable, un sillón o camilla cómoda, e incluso

con la utilización de la aromaterapia para conseguir el efecto deseado

según el aroma que estemos empleando.

El tratamiento comenzara con una toma de contacto, es decir:

con un masaje de relajación antes de comenzar con la reflexología

propiamente dicha.




La sesión de reflexología tendrá una duración aproximada de

unos 45 minutos, contando con el masaje de relajación inicial.

BENEFICIOS

-Es relajante.

-Reduce el estrés.

-Mejora la circulación.

-Permite liberación de toxinas.

-Equilibra los distintos sistemas.

-Revitaliza la energía.

-Actúa de forma preventiva.

-Es gratificante para quien la da y quien la recibe.

-Estimulación de áreas hipoactivas y perezosas.

-Una mejora de la concentración, la atención y la calidad del sueño

y el descanso gracias a la profunda relajación que se consigue.

AFECCIONES DONDE NO SE RECOMIENDA LA REFLEXOLOGIA

En personas que padecen diabetes, trastornos cardiacos,

osteoporosis, trastornos de la glándula tiroides y flebitis (inflamación en

la venas), mujeres embarazadas o cualquier persona que padezca de

artritis en los pies.




EL MASAJE DE RELAJACIÓN

El masaje es uno de los tratamientos alternativos más antiguos para nuestro cuerpo. Gracias a él podemos restablecer nuestro cuerpo y mente, obteniendo un mejor equilibrio, aliviando tensiones y obteniendo una buena armonía entre cuerpo y mente.

Es un remedio ampliamente extendido que es ideal para aliviar

situaciones de estrés o tensiones acumuladas que se reflejan en nuestro organismo.

El cuerpo humano es tremendamente rápido si queremos que

comience a renovarse y regenerarse. Y gracias a la presiones ejercidas

por un buen masaje consigue reequilibrarse.

El ritmo diario al que estamos sometidos impide que nuestro

cuerpo se recupere. De manera que lo privamos del tiempo y la energía

necesaria para reparar y restaurar, hasta alcanzar de nuevo la armonía.

Lo que hace el masaje es intervenir en ese proceso y llevar al cuerpo al

estado de relajación que se merece.




La relajación influye también sobre la mente. Durante el

transcurso del día, cuando estamos despiertos, pensando,

concentrándonos, las ondas cerebrales resuenan en la frecuencia beta.

Y si permanecemos ahí durante demasiado tiempo, no solo sacaremos

la acción del sistema inmunológico, si no que nos sentiremos fatigados

y con tendencia a los accidentes. La relajación profunda nos lleva a la

frecuencia alfa, mucho más lenta. Es un estado meditativo. Casi de

trance, que nos recarga incluso más que el sueño. La investigación ha

demostrado que el descanso meditativo regular, como un masaje,

aumenta la inmunidad y mejora la respuesta de los leucocitos frente al

estrés. El masaje es posiblemente la forma más sencilla de inducir esa

clase de descanso, ya que a un individuo crónicamente estresado le

puede resultar difícil relajarse por sí solo.

La relajación profunda también es intensamente placentera.

Mientras uno se encuentra en ese estado agradable, el cuerpo produce

endorfinas, hormonas que alivian el dolor e inducen sensaciones de

alegría e incluso euforia. Según demuestra la experiencia, las endorfinas

son más efectivas que cualquier otro medicamento para aliviar el dolor.

El tacto es una gran fuente de placer en sí mismo. La piel está

cubierta de receptores nerviosos, que al ser estimulados, alimentan el

cerebro con sensaciones placenteras. El masaje es poderosamente

terapéutico, y constituye una vía vital hacia el verdadero placer.




Maniobras fundamentales del Masaje Relajante El masaje es un arte curativo, instintivo e intuitivo que está al

alcance de todo el mundo. A lo largo del tiempo, sin embargo, se han perfeccionado ciertas manipulaciones y técnicas para incrementar el placer y los efectos específicos del tratamiento.

Para aprovechar el potencial terapéutico del tratamiento, las

manipulaciones tienen que realizarse de una forma determinada y en orden creciente de la fuerza aplicada.

Estas manipulaciones pueden originar diversas variantes con nombres propios.

Veamos con detenimiento cada una de ellas. Proceso del masaje relajante: Para comenzar el masaje relajante es muy importante, como ya

sabemos, el ambiente creado. Una vez que hemos conseguido ese ambiente lleno de relax a base de música, aromas y un lugar cómodo, procedemos a colocar a la persona en la postura adecuada que podremos ver en la siguiente imagen.

Las posiciones pueden ser:

De decúbito supino; Debemos colocar una almohada justo debajo de la nuca para mantener la cabeza algo elevada. Esto mismo debemos




hacerlo también debajo de los huecos poplíteos. En este caso bajo las corvas.

De decúbito prono. En esta posición debemos colocar a la persona extendida por completo y bocabajo. Con una almohada en la frente, otra en el empeine y otra debajo del abdomen.

No es necesario que tengamos una camilla para aplicar el masaje a nivel personal. Simplemente debemos tener en cuenta que debemos colocar a la persona en una superficie firme y cómoda. Teniendo en cuenta los puntos de elevación que vemos en la imagen.

Una vez que hemos ubicado a la persona, comenzamos con el

masaje. El lugar donde tendremos que colocarnos nosotros es así:

COMENZAMOS EL MASAJE RELAJANTE Roces o pases suaves:

Con la punta de todos los dedos y de forma muy suave, debemos pasar sobre la zona que vamos a realizar el masaje, alternando las manos muy lentamente. Tiene efecto de estimular los receptores nerviosos cutáneos y producir una relajación muscular de la zona. Este movimiento es la primera y última maniobra de todo el masaje.




Vaciado venoso:

En este momento se trata de pasar la palma de la mano y de los

dedos por la zona que hay que tratar. Lo que conseguimos con este movimiento es una disminución del contenido sanguíneo de las venas al mismo tiempo que favorecemos la circulación de retorno. La velocidad de esta maniobra debe ser lenta y de media profundidad.

Amasamiento:

En esta modalidad debemos usar toda la mano. Agarra y aprieta una

pequeña zona, soltando la carne con una mano mientras la otra empieza a coger más. No separes demasiado las manos del cuerpo y pasa gradualmente de una mano a la otra, como si estuvieras amasando pasta.




Digital:

Ahora debemos ejercer toda la presión posible con las yemas de los pulgares. Ejerciendo sobre la zona presiones cortas y profundas que iremos alternando realizando pequeños círculos. Debes ir presionando con los pulgares de manera alternativa y cada vez con un poco más de fuerza, hasta llegar a recorrer una amplia zona. Dígito palmar:

Ahora se trata de que uses toda la palma de la mano en combinación

con el dedo pulgar especialmente. Debes pegar por completo las manos en la zona y sin levantarlas, vamos subiendo y bajando. Apretamos y dejamos ir la musculatura. Avanzando con el dedo pulgar y arrastrando hacia la palma de la mano la musculatura, las manos trabajan alternadas. Nudillos:

Este movimiento se hace con el pulgar y los nudillos de los cuatro

dedos flexionados de manera que cada nudillo hace un pequeño círculo.

De esta manera, se trabaja profundamente y conseguimos relajar la musculatura y ayudar en la eliminación de tejido adiposo. Se realiza en extremidades, espalda, básicamente. Otro modo en que puede realizarse es con el pulgar y el índice flexionado con los que se pellizca una región muscular concreta, este se realiza en la columna y en zonas pequeñas. Percusiones:

Se trata de un movimiento que sirve sobre todo para estimular y que

consiste en distintos tipos de presiones rítmicas y enérgicas, realizadas




repetidamente. Puede realizarse con el canto de la mano, con la mano ahuecada, y con el puño cerrado. El objetivo es el de estimular las zonas de tejido blando, como los músculos de los muslos y las nalgas, tonificando la piel y favoreciendo la circulación.

Pellizqueos:

La forma en que podemos realizar los pellizqueos son varias, pero

todos han de ser suaves y al realizarlos casi no hemos de separar la punta de los dedos. La finalidad de este paso es el aumento de la circulación sanguínea a nivel superficial, y se realizan con el dedo pulgar y el corazón. Fricciones:

Debemos pasar la mano abierta, con los dedos juntos, por la zona a

tratar y hacemos una cierta presión con energía para producir calor en la zona y de este modo conseguir desprender células muertas de la piel.

Además, en este paso conseguimos relajar los músculos. Eliminando las materias residuales y favoreciendo la circulación sanguínea y linfática. Debemos alternar las manos y amasar, estirar y retorcer la carne.




Las fricciones de deslizamiento:

Estas fricciones debes hacerlas de manera muy suave y deslizando

rítmicamente las manos sobre la piel. Este paso es muy usado como masaje de transición para preparar al cuerpo al cambio de un movimiento a otro. Estas fricciones solo actúan de manera superficial. No sobre los músculos. Movimientos amplios circulares:

Mueve las manos realizando círculos bastante amplios, como

formando espirales. Tecleteos:

Este movimiento debes hacerlo con las puntas de los dedos

ligeramente curvadas y rápidas. Un dedo irá detrás del otro. Este movimiento es muy utilizado en tratamientos faciales. Sobretodo en contorno de ojos, pómulo y frente.




Estos serían los principales pasos a seguir para aplicar el masaje relajante en cualquier zona. A continuación, vamos a ver qué tipos de masaje relajante hay según la zona a tratar.

EL MASAJE DE ESPALDA

Dentro de las variantes del masaje relajante podemos encontrar el masaje de espalda. Para comenzar el masaje es aconsejable utilizar algún aceite o loción de masaje que hará que sea mucho más placentero para la persona y más fácil de trabajar para quién aplica el masaje. Estos son los pasos que debemos seguir teniendo en cuenta los términos anteriormente mencionados:

Repartir el producto cosmético por la espalda.

Realizar el paso anteriormente visto de vaciado venoso desde el cuello hasta los glúteos, con las manos juntas desde la columna.

A continuación, realizamos una frotación con nuestras palmas de manera simultánea sobre la musculatura vertebral en dirección ascendente.

Con la frente de la persona que recibe el masaje apoyada, realizamos una frotación palmar reforzada con la mano sobre la nuca. El sentido de la maniobra es hacia la cabeza.

Frotación con nuestras palmas de manera simultánea, sobre la porción cervical del trapecio. Repetir en el otro lado.

Fricción palmo digital simultánea con las dos manos, sobre la porción cervical del trapecio. Repetir en el otro lado.

Amasamiento palmo digital sobre la porción cervical del trapecio. Repetir en el otro lado.

Presión deslizante con el dedo índice y corazón. Una mano se desliza en sentido ascendente del sacro a la nuca y con la otra




mano en sentido descendente, de nuca a sacro. Se respeta el cuerpo vertebral.

Vaciado venoso.

Fricción palmo digital alterna sobre el músculo dorsal ancho. Repetir en el otro lado.

Amasamiento palmo digital en la misma zona.

Nudillar en toda la espalda. Comenzando por el sacro en sentido ascendente, por los laterales de la columna, trabajando bien el trapecio y descendiendo por los laterales de la espalda.

Vaciado venoso

Percusión en toda la espalda.

Vaciado venoso

Fricción palmar simultánea con ambas manos.

Vaciado venoso

Pases suaves desde la zona sacra a la cabeza.

La persona debe quedarse un par de minutos estirado en el lugar donde se hizo el masaje, y que se levante poco a poco.

MASAJE DE LAS EXTREMIDADES INFERIORES

En el caso de que el masaje queramos realizarlo en el pie, estos serían los pasos a seguir:

Amasamiento desde los dedos.

Rotación, flexión, extensión, abducción, abducción dedo por dedo.

Flexión y rotación de todos los dedos.

Frotación lateral del pie.

Trabajar planta del pie con los pulgares.

Frotación fuerte en zic- zac.




Vaciado del pie.

Movilización de la articulación: circulación, flexión, extensión, abducción y aducción.

Una vez hecho esto, debemos detenernos en la pierna y aplicar las siguientes maniobras:

Vaciado de toda la extremidad con la pierna extendida.

Amasamiento digital con la pierna extendida.

Frotaciones suaves con la pierna flexionada.

Amasamiento palmo digital.

Amasamiento digital.

Nudillares.

Pasos circulares en la rodilla.




MASAJE DE ABDOMEN

Los pasos que debemos seguir para realizar el masaje sobre el abdomen serían los siguientes:

Pases suaves.

Vaciado venoso.

Amasamiento digital

Amasamiento palmar.

Amasamiento nudillar.

Vaciado venoso.

Pellizqueo.

Fricciones circulares en el sentido de las manillas del reloj.

Tecleteos.

Vaciado venoso y pases suaves

Frotación desde la parte inferior de los senos al Deltoides.

MASAJE DE LA EXTREMIDAD SUPERIOR

Pases suaves en toda la extremidad

Vaciado venoso en toda la extremidad

Amasamiento digital

Amasamiento palmodigital

Fricciones

Vaciado venoso a lo largo de todo el brazo.

Flexión, extensión, rotación de la muñeca

Rotación hacia dentro y hacia fuera del hombro sujetando la extremidad.




RECOMENDACIONES QUE NO DEBEMOS OLVIDAR:

Es importante que tengamos en cuenta que si nos encontramos ante personas con problemas circulatorios, no podemos practicarle los movimientos de torsión, pellizqueos, nudillares, o cualquier otro pase que nos pueda producir una complicación de la zona.

Lo que si podremos hacer es realizar varios pases de vaciado para de esta manera activar la circulación sanguínea. Eso será muy beneficioso.

Siempre que acabemos el masaje es importante que la persona permanezca sentado un par de minutos, y seguidamente se levante poco a poco (primero sentarse y después levantarse). Ya que si lo hiciera de golpe podría marearse.

Si utilizamos un producto para realizar el masaje que fuese excesivamente grasiento, retiraremos el exceso de producto una vez finalizado el tratamiento.

El cuerpo de la persona, no ha de estar descubierto por completo (ya que podría enfriarse), sino que, nos ayudaremos de una toalla grande o de una sábana para ir desprotegiendo las zonas que nos interesen.

A la hora de realizar un masaje corporal, es imprescindible que el ambiente sea idóneo, intentar no darle conversación a la persona ya que el resultado no sería mismo.

Antes de comenzar un masaje y al finalizar el mismo nos lavaremos las manos con agua y jabón. Es aconsejable realizar gimnasia de manos antes de empezar el masaje, ya que nuestros dedos estarán mucho más flexibles.




En este módulo hemos aprendido...

• Orígenes, funcionamiento y puntos de la Reflexología

según cada parte del cuerpo.

•Los pasos para realizar un masaje relajante.

• La técnica que debemos emplear para el masaje

de espalda.

• Como realizar masajes para extremidades superiores

e inferiores.

• Pasos para hacer masajes de pechos y abdomen.

-MASAJES 2-

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