Post on 07-Aug-2018
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
1/478
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
FACULTAD DE FILOLOGA
Departamento de Estudios Hebreos y Arameos
TESIS DOCTORAL
Edicin filolgica de los dilogos renacentistas de la edicin
judeoespaola aljamiada del "Sfer Sebet Yehud" de Belgrado, 1859
MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTOR
PRESENTADA POR
Natalia Muoz Molina
Directores
ngeles Navarro PeirElena Romero Castell
Javier Castao Gonzlez
Madrid, 2014
Natalia Muoz Molina, 2014
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
2/478
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
FACULTAD DE FILOLOGA
Departamento de Estudios Hebreos y Arameos
Edicin filolgica de los dilogos renacentistas de laedicin judeoespaola aljamiada del Sfer bet Yehudde Belgrado, 1859
MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTOR
PRESENTADA POR
Natalia Muoz Molina
Bajo la direccin de los doctores
ngeles Navarro Peir, Elena Romero Castell y
Javier Castao Gonzlez
Madrid, 2013
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
3/478
Universidad Complutense de Madrid
Facultad de Filologa
Departamento de Estudios Hebreos y Arameos
Edicin filolgica de los dilogos renacentistas de la edicin judeoespaolaaljamiada del Sfer bet Yehudde Belgrado, 1859.
Da. Natalia Muoz MolinaTesis Doctoral dirigida por Da. ngeles Navarro Peir, Da. ElenaRomero Castell y D. Javier Castao Gonzlez.
Madrid, 2013
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
4/478
La Historia es testimonio de los tiempos, luz de la verdad, vida de la memoria, maestra
de la vida, anuncio de la antigedadMarco Tulio Cicern, Oratore
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
5/478
1
NDICE GENERAL
ndice
Prlogo
Agradecimientos
Abreviaturas
PRESENTACIN
Objetivos
Planteamiento inicial
Problemas metodolgicos
Contenido del trabajo
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
1. El marco literario1.1. Historiografa juda
1.1.1. Introduccin
1.1.2. Opiniones de los estudiosos respecto a la falta de produccinhistoriogrfica
1.1.3. Tipos de crnicas
1.1.3.1. Crnicas de cadena de la tradicin
1.1.3.2. Crnicas de expulsin
1.2. Los dilogos renacentistas
1.2.1. Introduccin
1.2.2. El dilogo renacentista
1.2.3. Aspectos literarios del dilogo
1.2.3.1. Principios de los parlamentos
1.2.3.2. El espacio
1.1.3.2.1. Lugares buclicos
1.1.3.2.2. Lugares de encuentro y paso
1.1.3.2.3. Lugares privados
1.2.3.3. El tiempo1.2.3.4. Personajes
1.2.3.4.1. Los personajes novelescos
1.2.3.4.2. Los personajes simblicos
1.2.3.4.3. Los personajes prototipo
1.2.3.5. Estructura
1.2.3.6. Forma del dilogo
2. El autor y su obra2.1. El autor
1
5
7
10
12
12
12
13
13
15
1515
15
18
20
20
22
23
23
26
33
34
34
35
35
36
36
37
38
38
38
39
39
4343
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
6/478
2
2.1.1. Noticias sobre los ibn Verga
2.1.2. La autora
2.1.3. R. Yehud ibn Verga
2.1.4. R. elom ibn Verga
2.1.5. R. Yosef ibn Verga2.2. El Sfer bet Yehud
2.3. Los dilogos seleccionados
3. Las ediciones del Sfer bet Yehud
3.1. Ediciones hebreas
3.2. Traducciones
3.2.1. Al latn
3.2.2. Al yidis3.2.3. Al alemn
3.2.4. Al judeo-rabe
3.2.5. Al hngaro
3.2.6. Al espaol
3.2.7. Al judeoespaol
3.3. Ediciones fruto de la moderna investigacin
3.4. La edicin aljamiada de Salnica 1850
3.4.1. Aspectos formales
3.4.2. Ttulo
3.4.3. Portada
3.4.4. Contenido y organizacin
3.4.5. Se basa esta edicin en una anterior desconocida?
3.5. La edicin aljamiada de Belgrado 1859
3.5.1. Aspectos formales
3.5.2. Ttulo
3.5.3. Portada
3.5.4. Contenido y organizacin
4. Fragmentos del bet Yehud insertos en otras obras judeoespaolasaljamiadas
4.1. Fragmentos del SYen elDH
4.1.1. Omisiones
4.1.2. Distinta formulacin
4.2. Fragmentos del SYen elMH
4.2.1. Formulaciones ms breves
4.2.2. Omisiones
43
43
44
46
4950
51
56
56
57
57
5758
58
58
58
58
59
59
60
60
60
61
61
64
64
64
65
65
67
68
70
72
72
7576
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
7/478
3
4.2.3. Distinta formulacin
4.3. Por qu se incluyeron pasajes del SYen elDHy en elMH?
5. Comparacin con el texto hebreo
5.1. Estilo de la traduccin5.1.1. Omisiones
5.1.2. Ampliaciones o reelaboraciones
5.1.3. Formulacin diferente o alteracin del orden
5.1.4. Errores de traduccin
II.NUESTRA EDICIN
1. Metodologa
1.1. Criterios de edicin1.2. Sistema de transcripcin
1.3. Complementos
1.3.1. Glosario
1.3.2. Presentacin de variantes
1.3.3. ndices
1.3.4. Bibliografa
2. El Texto de Belgrado 1859
2.1. Portada
2.2. Introduccin del rabino autor
2.3. Prlogo de la edicin de Belgrado
2.4.Disputa entre el rey Alfonso y el sabio Toms
2.5.Nueva acusacin de asesinato ritual en la ciudad de cija
2.6.Falsa acusacin de asesinato de un nio en Ocaa
2.7.Nueva acusacin de asesinato en Francia
2.8.Nuevo caso de pseudo-mesas en Persia y otros relatos
2.8.1. Conversacin habida entre el Rey Pedro el viejo y el sabioNicols
2.8.2.Disputa delante del rey Alfonso de Portugal
2.9.Disputa de Tortosa
2.10.Dilogo entre el Papa Marco Florentino y Fray Pedro
2.11. Causas de los padecimientos de los judos
2.12.El sueo del rey Alfonso
2.13.Dilogo entre el rey Alfonso de Portugal y Don Yosef
2.14.Dilogo entre el rey y Don Enrique de Mendoza, el Salvaje
2.15. Carta de ra Meulam a las comunidades judas
78
80
82
8283
85
89
90
91
91
9192
93
93
96
97
97
98
99
100
101
107
141
150
155
160
163
176
182
204
217
219
237
243246
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
8/478
4
2.16.Indicaciones del rey al preceptor de su hijo
3. Variantes de la edicin de Salnica 1850
III. COMPLEMENTOSGlosario
ndice onomstico
ndice toponmico
Bibliografa
CONCLUSIONES
ABSTRACZUSAMMENFASSUNG
249
251
342342
404
412
417
438
IXVII
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
9/478
5
PRLOGO
Esta tesis doctoral es deudora de varios aspectos que queremos resaltar.
Por un lado, no hubiera sido posible sin la beca predoctoral I3P concedida por el
Ministerio de Educacin y Ciencia en el marco del programa I3P durante los aos 2004-
2008.
Por otro, se ha enmarcado y contado con el apoyo de los siguientes Proyectos de
Investigacin:
- Organismo financiador: DGI (PGC), Programas Nacionales del Plan Nacional de
Investigacin Cientfica, Desarrollo e Innovacin Tecnolgica 2000-2003 (referencia
BFF2001-0239). Instituto de ejecucin: Instituto de Filologa (CSIC), Dept. de Estudios
Hebraicos y Sefardes. Investigador principal: Elena Romero. Ttulo del Proyecto:
Sefarad siglo XXI: Edicin y Estudio Filolgico de Textos Sefardes. Convocatoria:
2000-2003 (fecha de inicio 28 dic. 2001; fecha de finalizacin 27 dic. 2004).
- Organismo financiador: DGI (MEC), Programas Nacionales del Plan Nacional de
Investigacin Cientfica, Desarrollo e Innovacin Tecnolgica 2005-2007 (referencia
HUM2005-01747/FILO). Instituto de ejecucin: Instituto de Filologa (CSIC), Dept. de
Estudios Hebraicos y Sefardes. Investigador principal: Elena Romero. Ttulo delProyecto: Sefarad siglo XXI (2005-2007): Edicin y Estudio Filolgico de Textos
Sefardes. Convocatoria: 2005-2007 (fecha de inicio: 31 dic. 2005; fecha de
finalizacin: 30 dic. 2008).
- Organismo financiador: DGI (MEC), Programas Nacionales del Plan Nacional de
Investigacin Cientfica, Desarrollo e Innovacin Tecnolgica 2009-2011 (referencia
FFI2009-10672/FILO). Grupo de Investigacin: Estudios Hispanojudos y Sefardes
(JuHyS), ILC Investigador principal: Elena Romero y Aitor Garca Moreno. Ttulo del
Proyecto: Sefarad siglo XXI (2009-2011): Edicin y Estudio Filolgico de Textos
Sefardes. Convocatoria: 2005-2007 (fecha de inicio: 01 ene. 2010; fecha de
finalizacin: 31 dic. 2012).
Finalmente, no hubiera sido posible sin la inestimable ayuda y apoyo de los tres
directores: Elena Romero, ngeles Navarro y Javier Castao, sin olvidar a Iacob
Hassn, artfice de este trabajo.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
10/478
6
En este sentido se quiere sealar, que la Dra. Elena Romero se ha encargado de
todo el trabajo correspondiente a la edicin del texto, edicin de variantes, del glosario,
como asimismo de parte de la Introduccin.
La Dra. ngeles Navarro, directora de la tesis de la Universidad Complutense de
Madrid, se ha encargado de la Introduccin, de su correccin, de la comparacin con el
texto hebreo, adems ha estado siempre pendiente cuando se precisaba alguna
aclaracin.
El Dr. Javier Castao ha sido de gran ayuda en los aspectos histricos que
enmarcan el texto original y la tesis aportando valiosos comentarios que han facilitado
la redaccin final del trabajo.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
11/478
7
AGRADECIMIENTOS
No es tarea fcil redactar en unas pocas lneas el apartado de agradecimientos, ya
que son numerosas las personas familiares, amigos, compaeros-, y lugares, que hanhecho posible que esta tesis vea la luz, y por tanto pueda llegar al final del camino;
tampoco lo es expresar y resumir todo lo que siento.
Por tanto esta parte carece de orden, los sentimientos brotan y no guardan ninguna
clasificacin. Para m sois todos muy importantes y queridos, sabis que os llevo en mis
pensamientos y en mi corazn. No os ofendis si os veis en algn u otro lugar, no
intentis establecer un orden donde no lo puede haber. Esta tesis doctoral es mrito de
todos vosotros y no mo.
Quiero empezar dando gracias a Dios, por haberme hecho tal como soy, slo l
conoce las razones, por regalarme esta maravillosa vida, por ayudarme a llegar donde
estoy, por levantarme cuando he cado en picado, y por dirigir mis pasos a esta tarea.
Gracias a mis padres por dejarme volar, por apoyar siempre mis sueos, por
ensearme que la vida est por encima de cualquier cosa; Mam siempre has sido un
ejemplo de superacin, esfuerzo, siempre incansable y con una sonrisa en la boca. Pap,
gracias por ensearme a valorar lo que tengo, gracias por tu apoyo incondicional, por
hacer de tripas corazn cuando no has podido ms.
A mi hermana Vane, por ser la mayor y abrir el camino.
A mi hermano Antonio, por ser el pequeo.
A mis abuelos, Pepe y Angelines, que en paz descansen, por estar siempre
pendiente de m, por llamar cada da y regalarme tan buenos momentos y consentirme
tantas cosas.
A mi abuela Seve, por su sacrificio, por su confianza, por su valenta y por su
ejemplo para superar las adversidades, por todos tus sabios consejos.Artu siempre cuidas de m, desde donde ests, no sabes la falta que me haces.
A mis queridas hijas, a Mayn, mi fuente de inspiracin y manantial de vida que
siempre me arranca una sonrisa y saca lo mejor de m da a da; a mi pequea Yael, te
fuiste muy pronto para convertirte en un Sternenkind, en un angelito, gracias por las 33
semanas de ilusin, de fuerza, an sigo sin palabras y con un vaco horrible difcil de
llenar; a mi querido Frank, sin ti no estara aqu, no habra llegado a ver terminada esta
tesis, junto con las enanas me das la fuerza diaria para levantarme, para mantener mi
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
12/478
8
sonrisa, por ensearme qu es el AMOR, sois el sentido de mi vida. Frank: Weil Du Du
bist.
Tambin quiero dar las gracias a Vabret por ser mi refugio, mi escondite, mi
fortaleza, gracias por tus robles, por tus castaos y tus fresnos, gracias por toda la paz
que encuentro all, gracias por hacerme parte de ti, gracias por ser el Reich der Zwei
terrenal, gracias por tu sencillez y tu belleza, gracias por tu historia. Bernard, gracias por
formar parte de este mgico lugar, por tu apoyo y complicidad.
Vado, gracias por tu amor incondicional, gracias por sacarme a pasear cuando la
casa se me caa encima. Gracias por tu mirada, por tu fidelidad, siempre ests con
nosotros. Juegas a la pelota otra vez?
Julie, qu voy a decirte que no sepas, gracias por ser mi pao de lgrimas, juntas
hemos superado muchas cosas. Gracias por confiar en m y dejarme estar a tu lado enlos momentos ms duros y difciles. Gracias por tu amistad.
Juan y Loreto, gracias por cuidar del guiri, gracias por quererme y por
adoptarme. Gracias por hacer de m la ta Nati.
Felisa, gracias por tus oraciones y por tu apoyo en los momentos ms duros que nos
ha tocado vivir en el 2012, en tus manos dejamos a Mayn mientras Yael iba al cielo;
siempre dices que nos debes mucho, pero es al contrario, siempre ests ah.
Elena, gracias, por dirigir esta tesis, por tu paciencia. Agradezco tambin a Iacob(l) y a Javier el confiarme esta tarea y el tema de esta tesis. Iacob, gracias por
ensearme a investigar, gracias por tus regainas tan edificantes, gracias por tu
peculiar sentido del humor. No sabes cunto te echamos de menos. Espero que esta tesis
no te decepcione, ya que el proyecto inicial y el final no tienen nada que ver. Nunca
olvidar el da que me echaste de tu clase en la Facultad, ni de tu cara al verme aos
ms tarde en el Consejo en Medinacelli y decirte que quera hacer la tesis contigo.
Ana (l), gracias por ensearme tu amor a lo sefard, gracias por animarme a
volver a casa. Sabes, an sigo preguntndome qu es lo que viste en m, an sigo
recordando las palabras que me dijiste en tu ltimo viaje a Madrid antes de irte.
ngeles, gracias por tu direccin y tus consejos, gracias por aceptar ser mi directora
de tesis en la Facultad. Gracias por apoyar este proyecto.
Gracias Aitor por darme una nueva oportunidad, por compartir tantos momentos
Crews, por tus consejos y por tu apoyo.
Mi estancia en Basilea ha sido una fuente de nuevas experiencias y sensaciones.
Quiero dar las gracias a todos los que me han ayudado, en especial a Beatrice Schmid,por tu cario, a Rosa Snchez, por toda la complicidad y amistad, por tus nimos. A las
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
13/478
9
Manuelas, por su apoyo y acogida. Y a todas las dems personas que dej all. Espero
volver pronto con vosotros, tanto para trabajar, como para disfrutar en vuestra
compaa.
Mi estancia en Israel, en la Universidad de Bar-Ilan, all encontr a mucha gente
querida y que me acogi como uno ms. Gracias Shmulik y Revital por vuestro cario,
gracias Esther por cuidar de m, por ayudarme con el hebreo, gracias Nivi y Yosi por
incluirme en vuestra familia, qu rica cuchara!! Tambin amenazo con volver a veros.
Este trabajo es tambin es resultado de un camino acadmico variado, que se inici
en el Departamento de Estudios Hebreos y Arameos al que me siento muy unida
gracias a Vero- de la Facultad de Filologa de la Universidad Complutense de Madrid,
continu en el Departamento de Estudios Semticos de la Facultad de Filosofa y Letras
de la Universidad de Granada, en donde me licenci. En 2005, el CSIC, me abri suspuertas, gracias a una beca predoctoral, que me permiti llevar a cabo la investigacin
que desemboca en el presente trabajo. En el CSIC me siento como en casa, gracias por
dejarme formar parte de este Centro.
Gracias tambin a todas las personas que quieren permanecer annimas, amigos y
colegas gracias por estar entre bambalinas, gracias por vuestro apoyo, por vuestra
comprensin y vuestros consejos, gracias por las correcciones y las sugerencias de
cambio, espero que no os enfadis por hacer referencia a vuestra presencia, pero hecumplido mi promesa de no revelar vuestros nombres. Gracias a varios compaeros de
LM por preguntar cada da por este trabajo. Gracias a LM por dejarme sus instalaciones
en mis tiempos de descanso, de esta manera he podido terminar con este proyecto.
Y finalmente, por raro que parezca agradecer a todas las personas que no han credo
en m, que me han puesto tantas trabas para que este trabajo no salga adelante, que han
hecho lo indecible para hacerme caer en lo ms bajo, por querer destrozar mis ilusiones
y mis sueos, queriendo cambiar mis prioridades, por alentarme a abandonar el barco,
no sabis que en lugar de hundirme me habis hecho mucho ms fuerte.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
14/478
10
ABREVIATURAS
abrev.: abreviatura
al.: alemn
aprt.: apartado
r.: rabe
arm.: arameo
cap.: captulo
cfr.: confrntese
constr.: constructo
DCECH = Corominas, Joan; Pascual, Jos Antonio (1980-1991):Diccionario crtico
etimolgico castellano e hispnico. 6 vols. Madrid: Gredos.
desus.: desusado
DFC = Dubois, Jean; Lagane, Ren; Lerond, Alain (1971):Dictionaire du franais
classique. Paris: Larousse.
DH.:Darj haadam
dimin.: diminutivo
DME
= Alonso, Martn (1986):Diccionario medieval espaol. 2 vols. Salamanca:
Universidad Pontificia.
DRAE
= Real Academina Espaola (1992):Diccionario de la lengua espaola. 21
edicin. Madrid: Espasa Calpe. 22 edicin, edicin electrnica, Versin 0.1. (1970 y
2001, adems de la versin electrnica) y en ocasiones el CORDE (Corpus Diacrtico
del Espaol en edicin electrnica).
EncJud =Encyclopaedia Judaica. Jerusalem: Judaica Multimedia, 1997 [CD-Rom]
ej(s). ejemplo(s)
esp.: espaol
fm.: femenino
hb.: hebreo
h(s).: hoja(s)
inf.: infinitivo
ing.: ingls
it.: italianojesp.: judeoespaol
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
15/478
11
ln(s).: lnea(s)
lit.: literalmente
m.: masculino
MH.:Musar Haskel
ngr.: neogriego
op. cit.:en la obra citada
p.: pgina
pl.: plural
pp.: pginas
pt.: portugus
sc.: serbocroata
sing.: singular
s.v.: sub voce
SY.: bet Yehud
TB.: Talmud Babl
tc.: turco
vid.: vase
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
16/478
PRESENTACIN
12
PRESENTACIN
Objetivos
Los objetivos generales propuestos para esta tesis son:
a) elaborar una edicin de texto segn el sistema de transcripcin normalizadaestablecido para las ediciones de la escuela espaola de filologa sefard (CSIC) para
transmitir al lector, entendido o no en la materia, un texto comprensible y coherente.
b) hacer un estudio comparativo de la edicin en ladino del Sferebet Yehud con
el original hebreo y determinacin del grado de fidelidad en la traduccin.
Planteamiento inicial
El plan inicialmente propuesto para la tesis doctoral cubra una triple vertiente. Por
una parte ofrecer una edicin filolgica de la versin del ladino del Sferebet Yehud,
por otra determinar la recepcin sefard de la obra examinando la edicin en ladino a la
luz de las latinadas de msterdam, y, finalmente, examinar la calidad de la traduccin
mediante la comparacin de las versiones sefardes con el original hebreo.
La edicin y el estudio en ladino se realizaron en tres etapas, no necesariamente
sucesivas:
a) localizacin de los materiales bilbiogrficos necesarios: edicin de Salnica 1850y edicin de Belgrado 1859. La copia de la edicin de Salnica proviene del Instituto
Ben Zvi, gracias a la ayuda prestada por el Dr. Dov Cohen en septiembre de 2004,
mientras que la edicin impresa en Belgrado est ubicada en la Biblioteca de Estudios
Sefardes del CSIC. En cuanto a las reproducciones de los ejemplares de las ediciones
latinadas de msterdam, stas provienen de la Biblioteca Nacional de Madrid y de las
microfichas de las ediciones en caracteres latinos del bet Yehudde la coleccin de
Harm den Boer, catedrtico de literatura de la Universidad de Basilea.
b) transcripcin y anotacin filolgica de la edicin en ladino de Salnica, con
indicacin de variantes textuales de la edicin de Belgrado; todo ello segn el sistema
de transcripcin normalizada.
c) estudio comparativo de la edicin en ladino con el original hebreo y
determinacin del grado de fidelidad en la traduccin.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
17/478
PRESENTACIN
13
Problemas metodolgicos
Queremos sealar que desde el mes de diciembre de 2005, en el que enferm el Dr.
D. Iacob Hassn, primer director de esta tesis, hasta su fallecimiento en el mes de abril
de 2006, estuvimos trabajando sin direccin, si bien en este periodo se continu con latranscripicn del texto de la edicin de Salnica, siguiendo las indicaciones previas del
Dr. Hassn. En el mes de mayo de 2006, la Dra. Da. Elena Romero, Profesora de
Investigacin del Departamento de Estudios Hebreos y Sefardes del Instituto de
Filologa (CSIC), se encarg de la direccin y tutela de nuestro trabajo.
En estas circunstancias, y a lo largo de las sesiones de trabajo con la Dra. Romero,
se plantearon varias cuestiones y nuevas hiptesis de trabajo, que nos hicieron
replantear los planes iniciales de la tesis. De ah que stos se modificaran del siguiente
modo:
a) transcripcin y anotacin filolgica de la edicin en ladino de la edicin de
Belgrado, con indicacin de variantes textuales de la edicin de Salnica, todo ello
segn el sistema de transcripcin normalizada establecido para las ediciones de la
escuela espaola de filologa sefard (CSIC).
b) estudio comparativo de la edicin en ladino con el original hebreo y
determinacin del grado de fidelidad en la traduccin.
c) estudio filolgico y literario de los dilogos humansticos.
d) elaboracin de complementos y conclusiones.
e) elaboracin de apndices con fragmentos textuales judeoespaoles del Sfer
bet Yehud descubiertos recientemente en el Darj haadam (Los caminos del
hombre) de Yosef ben Meir Sasn, el judeoespaol aljamiado, conservados en tres
ediciones de Salnica 1843, 1848 y 1892.
Contenido del trabajo
El presente trabajo es una edicin parcial de los dilogos renacentistas de la versin
aljamiada judeoespaola del Sfer bet Yehud, Belgrado 1859.
La tesis consta de cinco partes:
1) Presentacin, que abarca los objetivos, el planteamiento inicial, los problemas
metodolgicos y el contenido del trabajo.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
18/478
PRESENTACIN
14
2) Estudio Introductorio, en el cual se tratan los aspectos relacionados con la obra
como el marco literario, el gnero, el autor, las diferentes ediciones y sus traducciones,
la difusin yla comparacin con el texto hebreo original.
3) Nuestra Edicin, que recoge la metodologa usada, los criterios de edicin y elsistema de transcripcin; as como el Texto de Belgrado 1859, resultado de la
transcripcin del texto aljamiado y las variantes del Texto de Salnica 1850.
4) Complementos, que contienen el glosario, los ndices y una amplia bibliografa.
5) Conclusiones, que recogen un breve resumen y presentan los resultados
obtenidos a partir de los objetivos propuestos.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
19/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
15
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
1. El marco literario
A la hora de acercarnos al SY, es necesario tener en cuenta conjunto literario al que
pertenece.
En la literatura renacentista peninsular existan dos tendencias contrapuestas: por un
lado, la idealizacin de la realidad derivada de la lrica italianizante y de la novela de
caballeras; por otro, el realismo crtico materializado en la prosa de pensamiento, en la
novela picaresca y la prosa histrica. stas ltimas usan el dilogo como mtodo de
difusin del humanismo.
1.1. Historiografa juda
1.1.1. Introduccin
Para entender la historiografa juda debemos tener en cuenta la idea de un pueblo
que ha carecido de tierra propia, alejado de su tierra de procedencia, y sometido a
diferentes soberanas.
Los acontecimientos histricos que se narran en la historiografa juda, desde la
creacin del mundo y hasta que se instaure el reino mesinico, forman parte de la
Historia teolgica del pueblo elegido de Israel y de su relacin con Dios. De esta
manera, cada acontecimiento se explicar de un modo teolgico, incluyendo leyendas y
tradiciones antiguas, a veces inventadas o reelaboradas, ya que lo ms importante es la
transmisin de la enseanza que emana de esos textos.
Igualmente, durante la Edad Media se va creando la idea de una existencia tanto
individual como colectiva del pueblo judo en medio de un ambiente hostil, careciendo
de tierra propia y de independencia poltica, y en rgimen de inferioridad jurdica enrelacin con los restantes sbditos de la misma nacin1.
La identidad del pueblo judo se fue forjando a lo largo del tiempo, basada en el
recuerdo del pasado bblico que prescriba que los israelitas deban mantener vigente la
1Gaspar Remiro, M. (1920):Los cronistas hispano-judos: discurso ledo ante la Real Academia de
la Historia en el acto de su recepcin pblica el da 23 de Mayo de 1920. Granada: Tip. de El defensor,
pp. 30-108. Puede consultarse el texto completo como recurso electrnico en:
http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/catalogo_imagenes/imagen.cmd?path=1006661&posicion=1.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
20/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
16
alianza de Abraham con Dios, renovada en el Sina, segn se dice en Deut 22:72:
Acurdate de los das antiguos. Piensa en los aos de tantas generaciones (oh!, Israel).
Pregunta a tu padre y te lo dir. Pregunta a tus ancianos y te lo dirn.
En comparacin con la abundante produccin literaria juda de obras literarias,filosficas, teolgicas y cientficas, resultan exiguos sus escritos de carcter histrico.
Igualmente y en contraste con sus contemporneos cristianos3 y musulmanes4, se ha
conservado un nmero reducido de obras historiogrficas judas de poca medieval,
obras que difieren de las cristianas y musulmanas en caractersticas, mtodo, estilo y
finalidad, ya que el punto de partida de las mismas es diferente.
La necesidad y el empeo de los judos de mantener y transmitir los recuerdos y
tradiciones de su pueblo, desde tiempos bblicos5
y durante toda la Antigedad clsica,contrasta con la reducida produccin historiogrfica desde la poca de Flavio Josefo 6
hasta comienzos del siglo XIX, aunque encontremos un renacimiento de la produccin
de este gnero entre finales del siglo XVy la primera mitad del siglo XVI.
2Cantera Burgos, F. e Iglesias Gonzlez, M. (1974): Sagrada Biblia. Madrid: Biblioteca de Autores
Cristianos.
3Las culturas islmica y cristiana mostraron a lo largo de la Edad Media un especial inters por
narrar los acontecimientos histricos ms significativos, ya fuera de un reino en general o de un
determinado lugar en particular, adems de interesarse por la historia universal, generalmente desde la
creacin del mundo hasta la poca del autor.
4Nos referimos a los gneros del tarij y del ajbar . El primero de ellos est vinculado a
intereses propios y polticos, se ocupa de acontecimientos histricos, es la historiografa oficial, que
abarca desde la creacin del mundo hasta la poca del autor. Por el contrario, el segundo se basa en
relatos legendarios de temas diversos y generalmente las obras son annimas.
5Gaspar Remiro, M. (1920): op. cit. p. 3, advierte que una muestra de ello es la abundancia de
escritos bblicos con un fuerte componente histrico. Como ejemplo pueden servir las obras de carcter
histrico, cuyos ttulos se basan de forma indirecta en pasajes bblicos: El libro de las batallas del Seor
[Nm 21:14], el Libro de la rectitud o Sefer hayaar [Jos 10:13, y IISam, 1:18], las Crnicas del rey
David [I Cr 27:24], elLibro de los hechos de Salomn [IRe 11:41], elLibro de los hechos de los reyes de
Israel [II Re 1:18], y laHistoria del profeta Iddo [II Cr13:22].
6 Yosef ben Matityahu (Jerusaln, ca. 37 - Roma, ca. 100), conocido como Flavio Josefo, fue
historiador romano de origen judo. Escribi la Historia de la guerra de los judos contra los romanos y
de la ruina de Jerusaln (75-79 d.C) y las Antigedades judaicas. Para ms informacin sobre las obras
de Flavio Josefo consultar el artculo: Sen, F. (1999): Para una Bibliografa del estudio y ediciones de
Flavio Josefo en Espaa en Gerin, n 17, Madrid: Servicio de Publicaciones, Universidad Complutense,pp. 361-385.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
21/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
17
La mayor parte de las ms importantes obras de contenido histrico est vinculada
con momentos trascendentales para el judasmo europeo medieval como las Cruzadas y
la Dispora o la Expulsin de los judos de Espaa y Portugal. Estos ltimos
acontecimientos precisaban una explicacin, de ah que la mayor parte de la literaturahistrica juda fuera redactada por autores hispanohebreos a finales del siglo XVy a lo
largo de la primera mitad del siglo XVI.
La expulsin de los judos de Sefarad gener un sentimiento de nostalgia hacia la
tierra perdida, manifestado en composiciones poticas, que responde a una doble
motivacin: el orgullo del origen hispano, y el convencimiento de la superioridad
teolgica y cultural del judasmo sefard sobre el akenaz.
Los primeros escritos hebreos de carcter propiamente histrico desde los tiemposde Flavio Josefo, se deben a judos exiliados de Espaa y Portugal a fines del siglo XV y
principios del XVI: elom ibn Verga, Abraham Zacuto, el judeo-portugus emuel
Usque7, con su obra Conolao as tribulaoes de Israel (Ferrara, 1553), Yosef
Hakohn8, cuya obra fue el (El valle del llanto), el cretense Eliyahu
Capsali9, influido por los exiliados espaoles, adems de autores annimos que nos han
dejado sus obras10. Otros, que no pertenecan a un crculo cultural hispanohebreo pero
que escribieron obras historiogrficas, son los italianos Gedaliah ben Yosef ibn Yai
de mola, que en 1586 escribi la obra titulada alelet hacaal (Cadena de la
Tradicin -1578), que por el uso
que hace de las fuentes puede ser considerado historiador propiamente renacentista y
que escribi en 1573 el (Libro de la Luminaria de los ojos). A ellos
7Ediciones modernas de esta obra: Yerushalmi, Y. H. y de Pina Martins, J. de, (1989): C onolao
as tribulaoes de Israel, Fundao Calouste Gulbenkian.
8 Edicin moderna de esta obra: Len Tello, P. (1989): El valle del llanto (Emeq ha-Bakha).
Crnica hebrea del siglo XV. Barcelona: Riopiedras Ediciones.
9 Eliyahu Capsali redact en el ao 1523 su obra titulada Seder Eliyahu Zutta (Crnica de la
expulsin de Eliyahu), una historia del Imperio otomano en la que aparecen interesantes noticias sobre
las comunidades judas en diferentes lugares, principalmente de Espaa. Vid. las ediciones modernas de:
Moreno Koch, Y. (2005): El judasmo hispano segn la crnica hebrea de Rab Eliyahu Capsali /
traduccin y estudio del "Seder Eliyahu Zut" (captulos 40-70), Granada: Universidad de Granada;
Sultan-Bohbot, S. (1994): Chronique de l'expulsion: Seder Eliahou zouta / Eliahou Capsali; prsentation,
traduction et annotation par Simone Sultan-Bohbot, Paris: Editions du Cerf.
10
Por ejemplo, la crnica hagiogrfica annima Sfer David Hareuben (Libro de David de la Tribude Rubn), redactada entre los aos 1522-1527.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
22/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
18
se les aadira el historiador y astrnomo alemn David Ganz (1541-1613), que escribi
en 1595, en Praga, la obra titulada em David (Descendencia de David), una
crnica juda desde los tiempos bblicos de Adn hasta el ao 1592, que contiene listas
de autoridades rabnicas y ttulos de obras (siguiendo a Abraham ben David y aAbraham Zacuto), adems de una historia universal basada en crnicas generales,
principalmente alemanas11, aunque conoca las crnicas escritas por autores hispanos12.
1.1.2. Opiniones de los estudiosos respecto a la falta de produccin historiogrfica
Existen varias opiniones que tratan de explicar esta reducida produccin de escritos
judos historiogrficos.
Yosef Hayim Yerushalmi13aduce diversas razones: la primera es que el inters por
la historia no es el mismo para todos, al igual que la conciencia poltica y la memoria
histrica; una segunda sera la influencia que tuvo el judasmo talmdico, base
fundamental de la concepcin juda sobre la vida y la creacin del hombre en esta
poca. No obstante, esto no sera suficiente para explicar la merma del gnero
historiogrfico por los judos de la Edad Media, ya que encontramos de nuevo una baja
produccin historiogrfica en pocas ms tardas y carentes de una clara influencia
talmdica. Una tercera razn sera la vigencia del modelo histrico bblico, que seguateniendo validez para cualquier acontecimiento presente.
Para Amos Funkenstein14, la ausencia de obras historiogrficas se debe al carcter
poltico de stas y al inters de los gobernantes y sus acciones. A lo largo de la Edad
Media los judos no se consideraban un sujeto histrico, sino un mero objeto hasta la
llegada del mesas; por este motivo, el mencionado periodo los hechos acaecidos tanto
comunitarios como individuales no se consideraban dignos de memoria. Funkenstein
admite la escasa produccin historiogrfica hebrea en poca medieval, mientras niega
11 Boyer, A. y Hayoun, M-R. (2001): LHistoriographie juive, Que sais-je? Paris: Presses
Universitaires de France, 2001, pp. 36-40 y 46-53.
12Yerushalmi, Y. H. (2002):Zajor: la historia juda y la memoria juda, Barcelona: Anthropos, p.
80 y Moreno Koch, Y. (2005): op. cit. p. 16.
13Yerushalmi, Y. H. (2002): op. cit. 35-36.
14
Funkenstein, A. (1991): Percepciones de la historia juda desde la antigedad hasta el presente(hebreo), Am Oved Publishers, Tel Aviv, pp. 19-25.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
23/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
19
que los judos carecieran de conciencia histrica, pues encontramos en los comentarios
haljicos ancdotas e historias referentes al judasmo hispano.
Hayim Hillel Ben-Sasson15, defiende la existencia de una historiografa hebrea en
poca medieval, pero distinta en sus planteamientos y diferente a la elaborada porcristianos y musulmanes. Estas diferencias provienen de la propia concepcin teolgica
de la historiografa hebrea y de la falta de protagonismo poltico de la comunidad juda
a lo largo de toda la Edad Media.
RonBarkai16, piensa que la historiografa medieval estuvo ligada a los procesos
histricos de identidad poltico-geogrfica, es decir, el vnculo existente entre un pueblo
y su tierra. Debido a ello, la falta de un territorio propio judo sera la causa de la falta
de inters del judasmo medieval por el gnero historiogrfico.Francisco Cantera Burgos17, con las palabras siempre eterno husped y falto de la
posesin del sentimiento de Patria, indispensable para el conocimiento de la Historia.
Dispersos y vejados, entre perpetuos trabajos y persecuciones, circunstancias
desfavorables y adversas al cultivo de esta disciplina, justifica que la escasa
produccin historiogrfica hebrea de poca medieval se debe a las peculiaridades de la
historia del pueblo judo en general y a la dispora en particular.
Vista la opinin de varios autores, y antes de considerar los tipos de gneros
historiogrficos en particular, hay que decir que la elaboracin de escritos
historiogrficos durante la Edad Media se basaba casi exclusivamente en la recopilacin
de obras anteriores de similares caractersticas. En ocasiones se trata de copias casi
literales, aunque tambin encontramos referencias explcitas a las fuentes originales,
mientras que las variantes existentes entre una obra y otra se deben fundamentalmente a
pequeas correcciones de estilo y modernizaciones o adaptaciones del lenguaje.
15Ben-Sasson, H. H. (1988): Historia del pueblo judo. 2 vols.: vol.1, Desde los orgenes hasta la
Edad Media, vol.2, La Edad Media, Madrid: Alianza, D.L.
16En Moreno Koch, Y. (2005): op. cit. pp. 14-15.
17
Cantera Burgos, F. (1927):Chbet Jehuda(La Vara de Jud) de Salomn ben Verga. Traduccinespaola con un estudio preliminar, p. 3.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
24/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
20
1.1.3. Tipos de crnicas
Las obras de ndole historiogrfica que se han conservado, se pueden clasificar en
dos grupos, correspondientes a las dos modalidades histricas a las que hacen
referencia. Al primero pertenecen las crnicas que tienen por objeto mostrar la cadenade la tradicin y, al segundo, las crnicas que se centran en el relato de las
persecuciones sufridas por el pueblo judo a lo largo de la historia18.
Crnicas de cadena de la tradicin
Hemos de tener en cuenta que la mayor parte de estas obras historiogrficas
medievales, sobre todo las ms antiguas, pertenecen a un grupo de libros cuya intencin
es defender y apoyar el judasmo oficial, rabnico, frente a tendencias heterodoxas,
como el carasmo19. Este tipo de obras quiere conservar la transmisin de la Ley
mosaica, escrita y oral, de generacin en generacin a travs de los tiempos. En estos
escritos, que tienen un carcter ms religioso que histrico, podemos encontrar
referencias a la historia poltica sin que ello sea su propsito.
Hubo una gran produccin de obras en defensa de la tradicin oral en el siglo VIII
debido al cismaque se produjo en el judasmo, al iniciarse un movimiento religioso en
contra del Talmud y la Ley Oral, cuyo propulsor fue Ann ben David20(740-800 a.C.).
18Cantera Montenegro, E. (2002): La historiografa hispano-hebrea en Espacio, tiempo y forma,
serie III, H Medieval, n 15, Madrid: UNED, pp. 11-75. Califica al segundo grupo de crnicas como la
cronstica hebrea lacrimosa, p. 49. Puede consultarse el texto completo en:
http://e-spacio.uned.es:8080/fedora/get/bibliuned:ETFSerieIII2002/demo:Collection/view.
19El Judasmo Carata o Carasmo es una secta que rechaza la Ley Oral Rabnica, el Talmud.
20
Ann ben David, descendiente de la casa de David y heredero legtimo al gaonato, fue uno de losgrandes conocedores del Talmud. En el ao 760 el exilarca (probablemente Isaac Iskawi) muri, los
hermanos Anan y Josas fueron los siguientes en el orden de sucesin. Ann el mayor de los dos, tena un
mayor conocimiento teolgico que su hermano, por lo que era el candidato previsible para el cargo de
prncipe del exilio. Sin embargo la propuesta fue dada a este ltimo: Josas fue elegido exilarca por los
Gaonim y por los notables de las principales comunidades judas, esta eleccin fue confirmada por el
califa de Bagdad. Ann consideraba la nica autoridad a la Tor escrita, rechazando frontalmente el
Talmud (Min ms Guemar). Anan organiz diversos elementos anti-talmdicos y presion al Califato
para que estableciera un segundo Exilarcado para aquellos que rechazaban el Talmud. Puede consultarse
toda la biografa de Ann ben David en: http://www.jewishencyclopedia.com/articles/1460-anan-ben-david.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
25/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
21
Todas ellas tenan como objetivo comn legalizar la cadena de transmisin de la
Ley Oral.
A lo largo de la Edad Media las crnicas de transmisin de la tradicin (Sfer
hacaal) y los libros de genealoga (Sfer Yuasn) ocuparon un lugar relevante en laliteratura hebrea.
Una primera crnica es, el Sfer hacaal(Libro de la tradicin) de Abraham ibn
Daud21de Toledo, redactada entre 1160-1161, con un marcado carcter anticarata. Se
trata de la nica crnica escrita en Al-ndalus y una de las ms emblemticas de
cuantas se redactaron en Sefarad. Dice Abraham ibn Daud22: Este Orden de la
Tradicin lo escribimos nosotros para ensear a los discpulos que todas las palabras de
nuestros maestros [] han sidorecibidas por tradicin no interrumpida []. La obrahistoriogrfica de Ibn Daud se completa en el eplogo con dos tratados, el primero
titulado ijrn dibr Romi (Historia de Roma), y el segundo ijrn dibr malk
Yisrael bebyit en (Historia de los reyes de Israel durante el Segundo Templo). Ibn
Daud no se limita en los ltimos captulos a enumerar a los rabinos y notables del
judasmo, sino que suele componer bosquejos de la vida de los personajes e incluso
cuenta algunas ancdotas.
Un segundo grupo de obras son los escritos de emuel ibn ara, que nos detallanque en el ao 1360 el ejrcito de Enrique de Trastmara, tras asesinar a los judos de
Njera, extendi el ataque a las juderas de vila y de Segovia. En su obra Sfer Mecor
ayim(Fuente de vida), relata el sufrimiento de las aljamas judas de Castilla entre los
aos 1366 y 136823. Otro grupo son los escritos de Mo ben Yiac ibn Wacar, cuyo
tratado de retrica titulado (Dichos placenteros), compuesto a base de
versculos bblicos, termin el da primero del mes de elul del ao 1340 en Guadalajara,
y el opsculo Ner Yisrael (Antorcha de Israel), que narra las guerras que asolaron el
21Abraham- ben David Halevi ibn Daud (1100/10-1180) naci en Crdoba, de dnde proceda su
familia, y emigr a Toledo. Tambin sabemos que cultiv otros gneros como el de la filosofa. Para ms
informacin vid. Ferre, L. (1990): Libro de la tradicin: (Sefer ha-Qabbalah) / Abraham Ibn Daud;
introduccin, traduccin y notas por Lola Ferre. Barcelona: Riopiedras. Sobre la muerte de Abraham ibn
Daud vid. Cano, M. J. (1992):La vara de Yehudah, Barcelona: Riopiedras ediciones, pp. 27-28.
22Ferre, L. (1990): op. cit. pp. 30-40.
23
Baer, Y. (1998): Historia de los judos en la Espaa cristiana.Barcelona: Riopiedras, p. 431,nt.65.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
26/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
22
pas y de las penas y aflicciones del judasmo24. Adems perteneceran a este grupo los
escritos de Yosef ibn Wacar25, que escribi la versin rabe resumida de la Estoria de
Espaa de Alfonso X el Sabio.
Una tercera obra, redactada en 1482, sera el Sefer hacaal (Libro de latradicin) de Abraham ben elom de Torrutiel26, en la que el autor narra la historia de
los judos hispanos a partir del momento en el que lo haba dejado Ibn Daud con el fin
de completar su obra.
Otras obras son el captulo 50 del Quiur ejer aic de Rab Yosef ibn aic de
Arvalo27, el Sder hadorot de n28 y el Sfer Yuasn de Abraham
Zacuto.
Crnicas de expulsin
Un segundo tipo de crnicas son las que relatan de manera detallada las
persecuciones sufridas por los judos a lo largo de la historia. stas se redactan a raz de
una persecucin y tienen una doble intencin, por un lado servir de apoyo y consuelo a
los perseguidos, y por otro ser una justificacin de un supuesto ancestral derecho
judo a habitar en el lugar donde se haba producido la persecucin.
La idea que se extrae al leer este tipo de obras es que las persecuciones son
consecuencia directa de la no observancia de la Ley, de los preceptos dados por Dios.
Encontramos algunos escritos acerca de las persecuciones sufridas por los judos
residentes en diferentes localidades alemanas de la cuenca del Rin con ocasin de las
24Baer, Y. (1998): op. cit. p. 428, nt. 53.
25Baer, Y. (1998): op. cit. p. 408, sabemos que fue mdico de la corte del rey Enrique II de Castilla,
y fue enviado en misin diplomtica a Granada.
26Abraham ben elom de Torrutiel naci en Utiel (Valencia) en 1482, sufri la expulsin siendo
nio emigr con su familia a Fez. Para ms datos sobre su biografa y su obra ver Cantera Montenegro
(2002): op. cit. pp. 40-46. Edicin moderna de la obra de Torrutiel ver Moreno Koch, Y. (1992): Dos
crnicas hispanohebreas del siglo XV, Barcelona: Riopiedras D. L. (La primera crnica es el captulo 50
del Compendio Memoria del Justode Rab Yosef ben aic, y la segunda, el Libro de la Tradicinde
Abraham ben elom de Torrutiel).27Edicin moderna de una parte de la obra de Rab Yosef ben adic ver: Moreno Koch, Y. (1992):
op. cit.
28
Edicin moderna de del Valle, C. y Stemberger, G. (1977): El orden de las generaciones/ Saadiaibn Dann, Alcobendas (Madrid): Aben Ezra ediciones.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
27/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
23
expediciones organizadas para las primeras Cruzadas. Muchos de ellos son annimos,
persecuciones antijud
momentos previos a la segunda Cruzada29. Tambin existen otros tratados o libros de
memoria o de recordacin, donde se anotan el lugar y los nombres de los judos que
murieron sin renegar de su fe, que se lean en las sinagogas en las oraciones pblicas
por los difuntos30.
Constan de unos repertorios de persecuciones sufridas por los judos en diferentes
lugares. Ejemplo de este tipo de escritos es la crnica titulada Ma'amar Zijrn
haemadot (Recuerdo de persecuciones) de Profiat Duran de Perpin31, y de la que
nicamente conocemos algunas referencias indirectas, como las que aparecen en la obra
Yeu ot mei32(La salvacin de su ungido) (II, 22) escrita por Yiac Abravanel.
mec habaj (El valle del llanto),
de Yosef hacohn, y el bet Yehud (La vara de Jud), de elom ibn Verga, que
estudiaremos en el captulo siguiente con mayor detalle.
1.2. Los dilogos renacentistas
1.2.1. Introduccin
El trmino dilogoproviene de la palabra griega dialogos, que se traduce
por conversacin.
29 Encontramos un resumen de las consecuencias que tuvieron las primeras Cruzadas para las
comunidades judas de Europa occidental y central en el estudio llevado a cabo por Surez Bilbao, F.
(1996): Los judos y las Cruzadas. Las Consecuencias y su situacin jurdica en Medievalismo, n 6,
Madrid, pp. 121-146, y ao 7 (1997) pp. 41-75.
30Cantera Montenegro, E. (2002): op. cit. Remite para este tema al estudio de Neubauer, A. (1887):
Medieval Jewish Chronicles and Chronological Notes. Oxford.
31Conocido tambin como Yiac ben Mo Halevi o el Efodi, famoso apologeta hispano-hebreo de
la segunda mitad del siglo XIV(1350?-1415). Baer, Y. (1998): op. cit. en el captulo IX hay un epgrafe
dedicado a la figura de este autor, pp. 580-587.
32 Cantera Burgos, F. (1927): op. cit. p. 5, dice que el es una obra exegtica de
contenido mesinico; en ella encontramos mrtires judos desde la destruccin del Segundo Templo deJerusaln hasta la poca del autor.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
28/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
24
Segn el diccionario de la Real Academia Espaola de la lengua33, el dilogo es, en
su segunda acepcin, una obra literaria, en prosa o en verso, en que se finge una pltica
o controversia entre dos o ms personajes. En l, los personajes intercambian
argumentos mediante preguntas y respuestas. De esta manera el gnero dialogado secaracteriza por la argumentacin, sea cual sea su temtica: religiosa, poltica, cientfica,
filosfica, moral, histrica, etc., imitando la naturalidad de la conversacin.
Una de las primeras definiciones que tenemos sobre el dilogo en nuestra lengua se
encuentra en losDilogos de la vida del Soldado(1552) de Nez de Alba:
Dilogos... conforme al parecer de algunos quiere en espaol decir razonamiento de dos,
aunque conforme al mo lo que los griegos en su lengua dijeron dilogos es lo mismo que lo que
los latinos en la suya llamaron colloquium, que en espaol no sabra yo nombre que darle ms
propio que sabia y buena conversacin34.
El dilogo, como gnero35, es un texto autnomo, que se muestra como una copia
de una pltica real, siendo su principal elemento la exposicin de ideas, teoras,
opiniones y diferentes realidades mediante una argumentacin retrica e interactiva36.
Sin embargo, no se trata de una imitacin literal, ni tampoco de una mera copia del
lenguaje hablado, sino de una conversacin pensada y elaborada, en la que el autor ha
creado un espacio discursivo y argumentativo propio.
En el Sfer ebet Yehud abundan conversaciones o plticas que se podranidentificar como dilogos renacentistas descritos anteriormente, no solamente por su
contenido de controversia, sino tambin por su estructura. En este sentido habra que
tener en cuenta que la obra fue escrita en un momento de transicin entre la Edad Media
y el Renacimiento. La materia del libro es la narracin de las diversas persecuciones
sufridas por los judos en diferentes territorios y pocas, que componen el marco en el
que se desarrollan los dilogos.
3322 edicin, edicin electrnica, Versin 0.1.
34Prieto, A. (1986):La prosa espaola del siglo XVI. Madrid: Ctedra, p. 99.
35Vin Herrero, A. (1988): Fbula y dilogo en el Renacimiento: confluencia de gneros en el
Coloquio de la mosca y la hormiga de Juan de Jarava, enDicenda: Cuadernos de filologa hispnica, N
7, Universidad Complutense de Madrid. Madrid, pp. 449-494.
36Sobre la argumentacin retrica ver lo expuesto en Huizinga, J. (1972):Homo ludens. pp. 46 y ss.,
128-142 y 174-186, Kushner, E. (1982): Le role structurel du locus amoenus dans les dialogues de la
Renaissance en CAJEL 34, pp. 39-41, y Guern, M. Le (1981): Sur le genre du dialogue, enLautomnede la Renaissance (1580-1630), Paris: Librairie Philosophique J. Vrin, pp. 141-145.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
29/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
25
La estructura de dilogo aparece en el captulo 7 del original hebreo, el primero de
nuestra edicin [6a:21-24]:
Prec[captulo]377.Vika [conversacin, debate, disputa] hubo entre don Alfonso rey
de_la Epaa con Tom su sabio, que_le dio el rey:
de_los
idis.
Los dilogos poseen una jerarqua de unidades de diferente rango, siendo el orden
de las mismas y el mtodo esenciales, desde el inicio de la discusin hasta su
conclusin38. El dilogo sirve para conocer el pensamiento del autor a travs de las
palabras de los interlocutores. De esta manera, el dilogo proporciona un anonimato al
autor, lo que le permite disimular su propia opinin ocultndose, sin pronunciarsedirectamente dando a conocer lo que piensa a travs de los diferentes locutores. El
dilogo ofrece la posibilidad de hacer un autoanlisis, una crtica y dramatizar un
conflicto propio. De esta forma, como dice Antonio Prieto39: El autor pareca
despersonalizarse en unos personajes de cierta representacin objetiva que le concedan
una relativa autoridad de imparcialidad.
Para concluir con la definicin de dilogo citaremos lo expuesto por la profesora
Ana Vin
40
:el dilogo escrito y ficticio se concentra frente a la dilatacin, del dilogo oral. El dilogo
escrito es estilizado, pone en escena una conversacin. Su densidad depende de la narracin, a la
voz del narrador, al marco narrativo o al interlocutivo. Los dilogos novelescos (sobre todo
ellos) son inseparables del resto de la obra y de su proyecto. El dilogo ficticio mimetiza, pues,
el oral, pero es a la vez otra cosa, donde nada se deja al azar, todo est previsto y regulado. []
Las diferencias entre dilogos ficticios (de novela, de dilogo o de teatro) y dilogos comunes
nacen de las condiciones particulares del intercambio, donde todo est programado por un autor
o un narrador y depende estrechamente del gnero literario, de los temas y la intriga
desarrollados, de los personajes, sus funciones y papeles. A la vez se muestra que la
conversacin literaria es tambin un modelo de la conversacin comn, que hace visibles y
37Doy la traduccin entre corchetes de las palabras que no son comprensibles. stas tambin se
recogen en el glosario.
38Vin Herrero, A. (2001): Interlocucin y estructura de la argumentacin en el dilogo: algunos
caminos para una potica del gnero, en Criticn, N 81-82, 2001, Voces ureas. La interlocucin en el
teatro y en la prosa del Siglo de Oro, Toulousse: Presses Universitaires du Mirail, p. 180.
39
Prieto, A. (1986):La prosa espaola del siglo XVI, Madrid: Ctedra, p.10540Vin Herrero, A. (2001): op. cit. p. 147.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
30/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
26
legibles, intensifica y sistematiza, ciertos aspectos de formas y funcionamientos de los
intercambios verbales naturales.
1.2.2.El dilogo renacentista
El gnero del dilogo remite a Platn (Repblica41) y a Cicern (De republica42,De
oratore43, De amicitia44); estas obras son las que se tomarn de modelo para la
recreacin de un dilogo. Fue en el Renacimiento cuando este gnero alcanz su poca
dorada, extendindose esta recreacin perfecta entre los autores renacentistas 45.
Aunque no hay que olvidar la gran influencia y el peso que las disputatio
medievales46 ejercieron anteriormente, el gnero del dilogo tuvo mucho xito en la
Pennsula Ibrica en el siglo XVI, ejemplarizados por los coloquios erasmistas
47
publicados entre 1520 y 1530.
Josep Solervicens48 define el dilogo renacentista como un complejo artefacto
literario que pone en relacin el componente representativo la creacin de personajes,
el marco dialgico y la trama de ficcin- con el componente argumentativo,
caracterstico de los discursos oratorios.
41 Platn (2003): Dilogos 4, Repblica / Platn; introduccin, traduccin y notas por Conrado
Eggers Lan, Madrid: Editorial Gredos.
42Cicern (2002): Sobre la Repblica/ M. Tulio Cicern; introduccin, traduccin, apndice y notas
de lvaro DOrs, Madrid: Editorial Gredos.
43Cicern (2002): Sobre el orador/ Cicern; introduccin, traduccin y notas de Jos Javier Iso,
Madrid: Editorial Gredos.
44 Cicern (2002): La amistad / Marco Tulio Cicern; introduccin, traduccin y notas de Jos
Guilln Cabaero, Madrid: Trotta.45Gmez, J. (1988):El dilogo en el Renacimiento, Madrid: Ctedra, pp. 101-109.
46 Sobre las disputatio medievales ver las siguientes obras de referencia: Dovain, G. (2002):
Medieval forms of argument: disputation and debate. Oregon: Wipf and Stock Publishers; Tucker, G. H.
(2000): Forms of the Medieval in the Renaissance: A multidisciplinary Exploration of a Cultural
Continuum, Charlottesville, Virginia: Rookwood Press.
47 Bataillon, M. (1950): Erasmo y Espaa: Estudios sobre la historia espiritual del siglo XVI;
traduccin de Antonio Alatorre,Mxico: Fondo de Cultura Econmica, pp. 286-294.
48
Solervicens, J. (2005): Ficcin y argumentacin en los dilogos renacentistas de Vives, Despuigy Milln, enDer Renaissancedialog auf der Iberischen Halbinsel, Stuttgart: Franz Steiner Verlag, p. 12.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
31/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
27
El origen de este gnero est relacionado con las necesidades educativas del
Humanismo, como mtodo de estudio de la lengua latina. Ms adelante se apartar de la
mera prctica lingstica para introducir un contenido filosfico, moral y literario49.
Las funciones esenciales del dilogo son varias:a) configura escenas: presenta conflictos y diferentes situaciones de un modo vivo,
no as en el relato mediatizado por el narrador, el cual ensea al lector un conjunto de
verdades slidamente establecidas;
b) aporta informacin: una conversacin directa proporciona matices que en una
narracin pasaran desapercibidos. Son los locutores y sus parlamentos los que se
encargan de trasladar al lector toda la informacin y el mensaje del autor, para crear una
opinin posterior. El autor utiliza el dilogo para comunicar al lector acontecimientos
que han tenido lugar antes de que se inicie el relato;
c) forma parte de la trama del conjunto de la obra: los diferentes parlamentos
influyen y provocan determinados efectos en la constitucin y articulacin del
argumento;
d) define a los personajes: presenta de una forma clara y fcil los aspectos que se
desean destacar de cada locutor, exhibiendo al personaje como una entidad completa;
e) sirve de hilo conductor: los personajes cambian en el transcurso del dilogo y lo
demuestran mediante la serie de parlamentos;f) indica los nudos argumentales: resume la informacin principal, recuerda y
retoma los puntos a tratar a lo largo de la obra;
g) reemplaza, representa y complementa la accin: marca el ritmo, establece un
nivel dramtico, tensiona o relaja al lector y crea todo tipo de emociones, sensaciones y
matices;
h) impulsa el relato hacindolo avanzar;
i) da pistas al lector: advierte, provee y anticipa detalles creando una relacin de
complicidad con el lector.
La innovacin que se produce en los dilogos durante el Renacimiento, consiste en
que el lector recibe las opiniones contrastadas de los interlocutores, las cuales estn
argumentadas, y l mismo debe sacar una conclusin de la enumeracin de las distintas
49 Daz Ms, P. (2003): Vida cotidiana y literatura oral en dilogos humansticos para el
aprendizaje de lenguas vulgares, en Revista de Dialectologa y Tradiciones Populares (RDTP), LVIII,Cuaderno segundo, Madrid: CSIC, pp. 237-247.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
32/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
28
ideas. Se trata de una controversia en la que se debate acerca de dos o ms opciones y
que conduce a un cierto sincretismo.
Este es el motor argumental, que le permite intercalar preguntas y respuestas, al
igual que otro tipo de temas relacionados: religiosos, polticos, cientficos, filosficos,morales, histricos, etc.
En general, los locutores del dilogo aportan un intercambio discursivo de
razonamientos, ideas, ancdotas, conceptos, etc. con un propsito final, mientras que el
autor de los dilogos hace de moderador entre los diferentes personajes implicados 50.
Cuando se compone un dilogo, el autor del mismo ha pensado y presupuesto cada uno
de los elementos, adems que implica concebir unos personajes, crear e imaginar un
marco conversacional y construir una trama de ficcin que d forma y estructura a la
obra. Cada uno de estos elementos pasa desapercibido, pero en su conjunto son
esenciales para que la obra cobre sentido51y para que el mensaje que quiere transmitir
el autor llegue al lector, a travs de los parlamentos de los locutores.
La relacin que se establece entre ambos -autor (locutor ficticio) y el lector
(destinatario ficticio)- es la que determinar el tipo de dilogo a utilizar. El primero de
ellos sera el dilogo pedaggico oheurstico, cuya intencin es la de informar, instruir
y persuadir. Para lograr este fin se utiliza la tcnica de preguntarespuesta, cuya prctica
es persuasiva, seductora y cooperadora y ms elaborada52, en la cual los personajesaspiran a dar la mejor respuesta a la pregunta planteada. El segundo sera el dilogo
polmico oerstico, cuya prctica es violenta y conflictiva; la opinin propia se impone
y se emplea la tcnica delpro ycontra. Por ltimo, el dilogo dialctico, es aquel en el
que el autor reparte su opinin entre los personajes, y el mensaje es la suma de todas
ellas53.
Se puede decir que este gnero, al pertenecer a la oratoria, permite hacerle creer al
lector que se habla para l y con l. De esta manera, el autor lo lleva donde quiere, bien
convencindole con el razonamiento de las diferentes opiniones, o bien obligndole a
50Vin Herrero, A. (2010): Cooperacin y conflicto en el dilogo renacentista hispnico, en Der
Dialog im Diskursfeld seiner Zeit, Stuttgart: Franz Steiner Verlag, p. 246.
51Solervicens, J. (2005): op. cit. p. 28.
52Vin Herrero, A. (2009): Los paratextos dialgicos y su contribucin a la potica del dilogo en
los siglos XV a XVII, en Arredondo, M. S.; Civil, P. y Moner, M. (eds.), Paratextos en la literatura
espaola (siglos XV-XVIII), Collection de la Casa Velzquez (111), Madrid, p. 397.53Vin Herrero, A. (2009): op. cit. p. 425.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
33/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
29
reflexionar y a superar las ideas recibidas. El autor plantea un problema y
posteriormente lo razona y ofrece unos argumentos, suscitando dudas y confrontando
opiniones, pero al final es el lector al que le corresponde resolverlo.
Muchas veces, la recopilacin de varias opiniones de autores antiguos sirve paralegitimar y para dar autoridad a los argumentos del autor. Veamos unos ejemplos
tomados del captulo 7 del SYdonde aparecen Tito, Nicols de Lira, Salustio, Virgilio y
Cicern.
[7b:13-17] La segunda coa demenesteroa para guera es fuerza y baragana, y tanbin
dita coa ya fue topada en los idis, asegn escribi sus enemigo propio Titus 54, que_la
baragana de_los idis fue muncha y demaiada.
[7b:31-8a:2] Lacuartena coa demenesteroa para la guera es munchedumbre de ente, y
topamos que_los idis eran ente muncho, asegn escribi Nicoleo de Lira55que hubo en bet
Yehud 600mil devayinantes espada, y en resto de ebatim 800mil trabantes arco; y dita suma
es bastante de muncha lo_que non se topa entre todos los reis.
[14a:15-21] Y
[linaje] son; queSeliste56escribi que son de la mipa [familia] de Todianos y Virilio57
[18b:26-29] siendo el ajam [sabio] Timbio58escribi que 50aos antes que vinieran los
idis a_la Epaa hubo mauef [epidemia, plaga] grande en los epaoles, a carar que_se
ceraron las puertas de_las civdades grandes,ubifrat [y en particular] Crdoba, Toleda, Svilla.
54Se trata del emperador Tito Flavio Sabino Vespasiano (39-81), hijo mayor de Vespasiano, que
rein entre el 79 y 81 d.C. Tras la revuelta juda del ao 70, asedi Jerusaln durante cinco meses y,
vencido el asedio, destruy el Templo y arras la ciudad. Comienza entonces la dispora de los judos.55Vid. Baer, Y. (1947): Sfer bet Yehud lera elom n Verga. Jerusalem: Mosad Bialik, p.
161, Cantera Burgos, F. (1927): op. cit. p. 6, n. 1, Cano, M.J. (1992): op. cit. p. 39, n. 27: Todos ellos dan
unos datos biogrficos de forma breve. Sabemos que naci en Lyra (Normanda) en 1270 y muri en
Pars en 1340. Tom el hbito franciscano en Verneuil, estudi Teologa, recibi el ttulo de Doctor en
Pars y fue nombrado profesor en la Universidad de La Sorbona. Trabaj en la predicacin y en la
escritura para la conversin de los judos, siendo autor de numerosos trabajos teolgicos y de exgesis.
56Salustio.
57
Virgilio.58Marco Tulio Cicern.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
34/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
30
A veces se aprecia un cierto desorden, slo en apariencia, pero necesario para la
conversacin; esto se debe a que los dialoguistas se separan intencionadamente del tema
central para establecer encuentros de opiniones y de intereses a travs de otros temas
secundarios.En los dilogos se dramatizan los acontecimientos, narrados por uno de los
personajes que ha sido testigo de ellos. Los dilogos, a diferencia de las obras de ficcin
que recrean un universo imaginario, imitan la realidad vital de la conversacin. Muchos
autores presentan el texto escrito como consecuencia de un encuentro acaecido que, por
su inters, debe ser rememorado59.
En tales casos, el autor o interlocutor principal queda encargado de poner las
supuestas conversiones o discusiones por escrito, expresando su voluntad de imitar
conversaciones reales y presentando sus obras como una mera transcripcin de las
mismas.
De ello encontramos varios ejemplos; uno de ellos es Problemas60, escrito por el
Doctor Francisco Lpez de Villalobos (1543), que lo encabeza como el trasunto de un
dilogo que pas entre un Grande de este reino de Castilla, estando con el fro de la cuartana, y
el doctor Villalobos que estaba all con l, en presencia de sus hijos y de la noble juventud de su
casa. Tambin Bernardino Montaa de Monserrate (1551) explica de la misma manera
el origen de la ficcin onrica de su coloquio del Sueo del marqus de Mondjar61
.Fray Juan de Pineda (1589) en susDilogos de agricultura cristiana62, aade que parte
de estos encuentros estuvieron basados en una conversacin real. Anteriormente, Juan
de Valds (1535?) hace de la base real de la conversacin un procedimiento literario
artsticamente elaborado en el Dilogo de la lengua63, al igual que en su Dilogo de
Doctrina cristiana64donde dice:
59Vin Herrero, A. (2009): op. cit. p. 410.
60Lpez de Villalobos, F. (1543):Libro intitulado los problemas de Villalobos, que trata de cuerpos
naturales y morales, dos dilogos de medicina y el tratado de los tres grandes, una cancin y la comedia
Anphitrion. Zamora: Juan Picardo.
61Montaa de Monserrate, B. (1551):Libro de la Anothoma del hombre. En el qual se trata de la
fabrica y compostura del hombre, [] Valladolid: Sebastin Martnez. Incluye con propia portada, El
Coloquio del Ilustrisimo Seor don Luys Hurtado de Mendoa, Marques de Mondejar, con el doctor
Bernardino Montaa de Monserrate acerca del sueo que soo su Seora. [].
62Pineda, Fray Juan de (1589):Los treinta y cinco dilogos familiares de la agricultura christiana.
Salamanca: Pedro de Ardua y Diego Lpez.63Valds, J. de (1535?):Dilogo de la lengua. Puede consultarse el texto completo en:
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
35/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
31
[...] acord de escrevirlo todo, segn se me acord en esta breve escriptura, e porque fuera
cosa prolixa y enojosa repetir muchas vezes, Dixo el Arobispo, y Dixo el cura, y Dixe yo,
determin de ponerlo de manera que cada uno hable por s.
Ms tarde, fray Luis de Len (1583) remite a la realidad, en la dedicatoria de De los
nombres de Cristo65a Don Pedro Portocarrero:
Pues a este propsito me vinieron a la memoria unos razonamientos que en los aos
pasados tres amigos mos y de mi Orden, los dos dellos hombres de grandes letras e ingenio,
tuvieron entre s, por cierta ocasin, acerca de los nombres con que es llamado Jesuchristo en la
Sagrada Escriptura; los quales me refiri a m poco despus el uno dellos, y yo por su qualidad
no los quise olvidar.
Y podramos citar otros como el De re militari66, de Diego de Salazar (1536); el
Dilogo sobre la necesidad y obligacin y provecho de la oracin
67
de fray Juan de laCruz (1555); el Arte potica en romance castellano68 de Miguel Snchez de Lima
(1580); etc.
David benMo Alcalay y suhijo Mo ben David Alcalay editores de la versin
judeoespaola del Sfer bet Yehud, Belgrado 1859, reiteran en su prlogo el deseo
de elom Ibn Verga de transmitir su idea y reflexionar sobre lo acaecido a travs de los
dilogos de reyes y sabios, no slo judos, sino tambin del resto de las naciones ([IIa]
12-21):
Tambin en dito libro que es auntado de ra elom ben Verga que en l avia
acontecimientos de_la uderiya en tiera de sus enemigos (Portugal y Espaa y Aragn y Svilla y
resto de lugares). Y raonamientos que pas entre los melajim [reyes] y los sabios, tanto
sabios de_la um [nacin] yisraelit como sabios de resto de umot [naciones]non manca de
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
36/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
32
enear en l tanto musar [mora] y tanto drej ere [buen comportamiento] y Yirat
amyim [temor de Dios], y saber cmo ya se afirmaron en mootros palabras de muestros
nebim [profetas] ah [que sobre ellos sea la paz], asegn que declarar una chica partida
beH [con la ayuda de Dios].
Los dilogos, a menudo, dan un testimonio ms o menos fidedigno de la realidad de
la poca a travs de alusiones a hechos histricos, como guerras, conflictos religiosos,
conocimientos cientficos, o cuestiones de sociedad. Otra caracterstica es la mencin
literaria, que sin duda estaba viva en la oralidad de fines del siglo XVI: en los dilogos
encontramos insertos cuentos, refranes y dichos divertidos, fundamentales en la
comunicacin de la lengua de la poca.
En el SYencontramos un par de refranes en el relato del sueo del rey Alfonso a
Toms [91a:5-6 y 7-8] (Vid. infra. 2.3.)
Y dieron ajm Sefarad [sabios deEspaa]: El que es presuroo en amor es presuroo
en aorecer.
Estas son palabras de el pilosof: Un honbre que tom un amigo con livianez (presto) lo
depiedre con livianez.
Adems, en el captulo 32 de la edicin hebrea, el 5 en la nuestra [47a:33-47b:12]
(Vid. infra. 2.3.), en el cual se recrea la conversacin habida entre el rey Pedro, el viejo,
y el sabio Nicols, hallamos la inclusin de una versin del cuento de los tres anillos 69.
69 El cuento de los tres anillos se incluye en el libro tres del Decameron de Boccaccio (Il
Decameron, cognominato Prencipe Galeotto,1351). El cuento relata la historia del sultn de Babilonia,
Saladino, de cmo se arruin por todas las guerras que hizo y del compromiso que quedaba por pagar.Entonces se acord de un prestamista judo llamado Melquisedec de Alejandra. El sultn decidi pedirle
ayuda, pero quera obtener el dinero por medio de la trampa y el engao. As que mand a buscar al judo
y sentarlo cerca de su trono en el palacio. El sultn, astuto, creyendo que el judo era estpido, le hizo una
pregunta para atraparlo. Le pregunt: Cul de las tres religiones es la verdadera? El judo comprendi la
estrategia del sultn y para no caer en la trampa le dijo, que para contestar la pregunta, l le contara una
historia: Una vez viva un rey muy rico y poderoso, que amaba muchsimo a su hijo. Entonces este rey
mand hacer un hermoso anillo para que su hijo fuera su sucesor. As que le entreg el anillo en secreto y
muri. Su hijo subi al trono y cuando se hizo viejo pens en sus tres hijos, muy buenos, sabios, rectos.
Ya en su lecho de muerte pens en su sucesor, pero slo tena un anillo y l amaba a sus tres muchachos.As que decidi llamar a un maestro para que hiciera dos anillos ms y que slo ste supiera cul era el
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
37/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
33
Denpus de los 3diyas vino onde el rey y se amostr como si estaba rabioo.
Le djo el rey:
Por-qu tus caras demudadas?
Y dio:
Seor, que me dehonraron sin ningn pecado. Onde sabr que un veino mo se fue a
lugar leos y por afalagar a sus 2 3piedras precioas; y agora vinieron onde m
que les
vuestro padre non hay, siendo l vo_las dio. Sobre esto me dehonraron.
Dio el rey:
Tienes ran, merecen apenados.
Respondi el idi:
uno una piedra, qun puede preciar estas piedras afuera de el patrn que las dio, que es el Dio
de los cielos?
1.2.3.Aspectos literarios del dilogo
A la hora de elaborar un dilogo, el nmero de personajes no influye, ya que ste
vara segn los lmites que impone la propia conversacin. Hay una clara preferencia
por parte de los autores de elegir la conversacin entre dos interlocutores, que
representa el esquema ms sencillo; por otra parte tambin encontramos dilogos de tres
o cuatro personajes, donde uno de ellos desempea un papel central, mientras que los
dems giran en torno a l.
En cierto modo, los dilogos de dos interlocutores los sitan en una relacin
pedaggica, en la que el autor expone su idea y sus conocimientos; otras veces cada
personaje sostiene una idea y el dilogo resulta ser una confrontacin; y en otras lospersonajes se escuchan y se comprenden, al hacer uno las preguntas mientras que el otro
contesta.
original. El viejo rey le entreg a cada hijo un anillo en secreto. Cada uno de ellos pens que tena
derecho al trono, pero los tres presentaron sus anillos y no se saba cul era el original. El sultn se dio
cuenta de la sabidura del judo y le dijo la verdad. Le explic su situacin y el judo le prest el dinero.El judo fue cubierto de regalos, muy respetado en el palacio y se hizo amigo del rey.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
38/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
34
En cuanto al dilogo de tres interlocutores, el tercero suele desempear una funcin
de rbitro, de conciliador; aunque a veces encontramos que dos de los personajes se
oponen al tercero, sin que la discusin avance.
1.2.3.1.Principios de los parlamentos
Las palabras puestas en boca de cada locutor se justifican por varias razones: la
intencionalidad es la motivacin que conduce a una frase. Todo lo que dicen nuestros
personajes proviene de una intencionalidad determinada. Hablan para expresar algo ms
de lo que dicen y al hacerlo aportan informacin y diferentes matices. Cada una de sus
palabras est estrechamente ligada a su personalidad, al contexto. Una palabra puede
producir una variante en el curso de los acontecimientos.
Laprecisinse refiere a que las palabras han sido cuidadosamente pensadas por el
autor para cada uno de los locutores. Es decir, cada palabra empleada tiene un
significado exacto.
La naturalidad concierne a que los dilogos no resultan forzados, sino que son
absolutamente crebles.
Lafluidezes el ritmo propio de cada dilogo, este ritmo est ligado a la situacin
que se representa en cada momento.
La coherencia.
La sugerenciaes que el intercambio de parlamentos entre los interlocutores debe
plantear una incgnita.
La verosimilitud es la representacin de un dilogo de un modo claro. Es la
identidad entre la narracin y el tiempo del discurso, atendiendo de modo simultneo a
personas, accin, tiempo, lugares, causas, tema y lenguajes. La verosimilitud potica
hace que la accin no parezca fingida aunque lo sea, y ello implica tambin ajustarse a
la tradicin y a la auctoritas.La interaccin es la dependencia y el cambio de las palabras dichas por un
personaje en relacin directa con las del otro.
Lacontinuidades la progresin narrativa; cada frase es un mensaje enviado por el
locutor a su interlocutor, siendo la respuesta de este ltimo consecuencia de aqul.
1.2.3.2.El espacio
Cada dilogo se enmarca en un decorado espacial, aunque la mayora de las vecesno se especifique dnde. Esta referencia espacial sirve de punto de partida para el
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
39/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
35
desarrollo del dilogo. Cuando no se menciona podemos deducir dnde se encuentran
los personajes por alusiones o por el comportamiento de stos.
El lugar donde transcurre la conversacin nos permite ambientar la situacin,
aumentar el clima de expectativa y prometer un cambio o un suceso especial. Puede sernombrado o no por los locutores.
Las marcas retricas, tales como el tiempo, el espacio y las circunstancias de la
conversacin, tienen un papel estructural en la argumentacin. Son coordenadas no
imprescindibles en los dilogos, pero s muy provechosas desde el punto de vista
literario cuando estn desarrolladas. Lo ms frecuente es que los autores las introduzcan
o las desarrollen a medida que los interlocutores conversan y que el dilogo progresa,
bien en la frmula narrativa, con verbos de habla, o en la dramtica, sin ellos.
Los escenarios ms habituales, que se proponen como marco para los dilogos, son
los siguientes: lugares buclicos (jardines, huertas, prados), lugares de encuentro y paso
(calles, plazas, camino, iglesias, cementerios e infinidad de topnimos) y lugares
privados (casa, dependencias de las mismas, etc.). A continuacin entraremos en algo
ms de detalle en cada uno de ellos.
1.2.3.2.1.Lugares buclicos
En cierta manera responden a una intencin filosfica: la de celebrar la belleza de
este mundo creado por Dios y para el hombre, adems de crear un efecto tranquilizador.
Estos espacios, la mayor parte de las veces, crean el decorado donde se enmarcan los
dilogos.
Un ejemplo de este tipo de lugares lo encontramos en el captulo en el cual se narra
el sueo que tuvo el rey Alfonso [87a:8-11]:
Toms, con todo, mi corazn est aturbado; por tanto vamos al verel, el grande, y mos
paseyaremos y mos alegraremos porque pasen de m estos pensamientos y palabras de el sueo.
1.2.3.2.2. Lugares de encuentro y paso
Estos espacios suelen ser un alto en el camino, un punto de encuentro, de los cuales
no hay ejemplos en nuestros dilogos.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
40/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
36
1.2.3.2.3. Lugares privados
Estos espacios se corresponden con la casa o con cualquier dependencia de la
misma, lo que nos permite averiguar el carcter social del personaje.
En el SY encontramos varios lugares privados, como la casa y una de lashabitaciones de la misma en el captulo 4 de nuestra edicin, relativa a una nueva
acusacin en Francia [35b:31-33]:
inters] y toparon al idi que
saliya de la camareta con el cucho lleno de sangre en su mano.
Tambin encontramos un palacio y un cortijo en el citado captulo del rey Alfonso
[90a:30-32]:
El resto de los idis se fuyeron al palacio de el seor, y el seor non estaba en el palacio y
Existen ms lugares citados a lo largo de toda la obra, como por ejemplo pozos y
hornos en el captulo de la falsa acusacin de asesinato a un nio en Ocaa [30b:4]:
Modo de cantn por caas, por hornos, por poos.
1.2.3.3. El tiempo
Atendiendo al marco temporal podemos decir, que ste vara a lo largo de losdilogos, al igual que el decorado. No siempre encontramos alguna mencin al tiempo,
que cumple la funcin de situar la accin en el marco temporal real o vital del
personaje, a la vez que puede justificar la falta de conclusin del dilogo.
Veamos ahora unos ejemplos tomados del SYen los que se hace mencin de aos
concretos, acontecimientos histricos o precisiones con respecto al reinado de algn
monarca.
a) Disputa de Tortosa [56a:19-22]
Y esta es la copia de la carta que mand el se'[seor] ajam [sabio] a_Bonastruc a
b) Disputa de Tortosa [63a:29]
El orn hayit [destruccin del Templo] fue ao de 3828.
c) Causa de los padecimientos de los judos [75b:33-76a:1]:
Que por esta gaav [soberbia, arrogancia] aconteci en ao de el ger [expulsin] unpleito grande en noche de Kipur en el bet hakenset [sinagoga].
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
41/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
37
d) Relato del sueo del rey Alfonso [86b:1-2]
En tiempo de el rey Alponso de_la Epamia, en ao de 3 a su enreinar.
e) Dilogo entre el rey don Enrique de Mendoza y el Salvaje [96b:32-33]Prec isim vemone [Captulo 68]: Enao de dos a el rey don Anrique.
f) Nueva acusacin de asesinato ritual en la ciudad de cija [23a:1]
En ao cuarteno al rey Alfonso.
1.2.3.4.Personajes
Los personajes que encontramos en los dilogos deben ser tratados de igual maneraque los interlocutores de los diferentes gneros literarios. stos, a priori, estn de forma
equitativa, dotados de razn y portadores de ideas. La caracterizacin ideolgica de los
personajes en los dilogos es muy elevada70 y cada uno de ellos expone su punto de
vista, su opinin.
Cada locutor posee un turno de palabra para participar, mientras que la duracin de
ese turno vara de un locutor a otro. Esto se debe, a veces, a la posicin social o
jerrquica del mismo, siendo el de mayor rango el que habla en primer lugar y por ms
tiempo71. Los diferentes interlocutores son necesarios y se complementan entre s para
poder estructurar el dilogo y hacer progresar el argumento, as como asegurar el
intercambio de la palabra, conducir el relato y abrir y cerrar las conversaciones. Todos
se contradicen y todos tienen razn, mientras que es el lector el que debe zanjar la
cuestin. Los participantes admiten toda variedad de estados y condiciones y por ello
son escogidos por el autor con esmero y cuidado, ya que cada uno de ellos se
corresponde con un elemento del dilogo. Los interlocutores son personajes de ficcin,
aunque lleven nombres identificables con personajes reales, y no confrontan opinionesdiversas sino que complementan desde pticas diversas un nico discurso72.
Se pueden distinguir varias clases de personajes: los novelescos, cuya realidad es
ficcional o histrica, los simblicos, los prototipos de un estado o de una condicin
social y los alegricos y los mitolgicos, que veremos a continuacin.
70Solervicens, J. (2005): op. cit. p. 29.
71
Vin Herrero, A. (2010): op. cit. p. 247.72Solervicens, J. (2005): op. cit. p. 30.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
42/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
38
1.2.3.4.1. Los personajes novelescos
Generalmente son casi siempre de sexo masculino. En la mayor parte de los
dilogos son personajes urbanos; usan el Don y conocemos su profesin, tales como
mdicos, militares, sabios, etc. Tambin encontramos personajes pertenecientes a larealeza como reyes o prncipes y personajes nobles, como condes o duques. Otros
personajes son comerciantes, artesanos, sastres, zapateros, etc., adems de aparecer
personajes eclesisticos, como Papas o sacerdotes. La funcin de estos personajes es la
de ser portavoz de una temtica concreta, ya que hacen una exposicin completa del
tema, reflexionan sobre la vida y nos permiten conocer su manera de pensar y de
razonar.
En los dilogos del SY, cuya edicin presentamos, se encuentran los siguientes
personajes: de la realeza el rey Alfonso, el rey Don Pedro, el rey de Francia y el rey
Manuel; Personajes eclesisticos son el Papa Marco Florentn, Fray Pedro, Jernimo de
Santa Fe y otros; como sabios aparecen Toms, Nicols de Lira, Abravanel y numerosos
rabinos.
1.2.3.4.2. Los personajes simblicos
Son aquellos que encarnan un punto de vista, una idea, y normalmente el autor los
identifica y define con un nombre que indica un rasgo caracterstico o un
comportamiento. As encontramos a Don Enrique de Mendoza, apodado el Salvaje,
cuyo tipo de personaje es un hbrido, su funcin es representar simblicamente una
actitud y un comportamiento moral. Son los portavoces de una filosofa.
1.2.3.4.3. Los personajes prototipo
Son los que se representan como la encarnacin de un estado o de una condicin
social y por lo tanto carecen de nombre. Los encontramos como un hombre mayor, un
joven, un campesino, un rico, un pobre, una criatura, etc. Estos personajes son
representativos de una situacin y permiten enfrentar puntos de vista diferentes sobre un
mismo tema desde su propia condicin. En nuestra obra aparecen artesanos, zapateros,
sastres, nios pequeos, etc.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
43/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
39
1.2.3.5.Estructura
Existe un variado repertorio de dilogos: los hay que son una mera sucesin de
preguntas y respuestas y los que son conversaciones entre dos o ms personajes, entre
otros.Carolo Sigonio73hace una clasificacin de los dilogos en su obra De dialogo liber,
escrita en latn y publicada en Venecia en 1562. En ella distingue dos momentos
principales en el dilogo: la preparatio o kataskeu (preparacin) y el contentio o
agn (debate). La preparatio tiene lugar al principio del dilogo y su funcin es
reforzar el debate, adquiriendo el mismo valor que un prlogo. En ella se introducen los
personajes, el espacio, el tiempo, el motivo y las circunstancias de la pltica. El
contentio es la contienda, donde se discute, se confirma o refuta, siendo el alma del
dilogo. El contentiose divide a su vez en dos partes: la prepositio(proposicin) y la
probatio(demostracin o prueba).
Hay una constante presente en todos ellos: el anuncio del tema que se va a tratar,
independientemente de que posteriormente se le aadan otros. Una manera de hacerlo es
manteniendo una conversacin preliminar, en la que los personajes aluden a un hecho
concreto; otra es la de presentar al personaje principal preocupado, para que cuando
aparezca otro le pregunte el motivo de su preocupacin; otras veces se recurre al sueo
y a veces el autor explica sus intenciones como una argumentacin.
1.2.3.6.Forma del dilogo
En las obras con dilogos, el proemio contiene indicaciones tiles para comprender
la obra, su tema, a los interlocutores, el tiempo, el espacio y las circunstancias en los
que se desarrolla74.
En cuanto a la forma, podemos seguir dos clasificaciones; correspondindose la
primera al esquema propuesto por Asuncin Rallo75, en el cual se diferencian tres tipos
de dilogo:
73 Carolus Sigonius (1524-1584), humanista italiano de Mdena, curs medicina y filosofa en
Bolonia. Estuvo al servicio del Cardenal Marino Grimani en 1545; en 1546 obtiene una ctedra en la
Universidad de Mdena y posteriormente en Venecia, donde ensea letras en 1552. En 1560 se traslada a
Padua y all ensea retrica, para finalmente trasladarse a Colonia en 1563. Carolo Sigonio escribi
grandes obras jurdicas e histricas. Vid. Vin Herrero, A. (2009): op. cit. p. 399. y Gmez, J. (1988): op.
cit. pp. 43-47, donde expone con detenimiento la estructura del dilogo segn Sigonio.74Vin Herrero, A. (2009): op. cit. p. 397.
8/21/2019 Estudios hebreos e arameos
44/478
I. ESTUDIO INTRODUCTORIO
40
-Dilogo platnico: en el que hay un equilibrio armnico entre las intervenciones,
con la consiguiente variedad de perspectivas.
-Dilogo lucianesco: en el que lo principal, ms que la bsqueda del conocimiento,
es el desenmascarar la realidad, desnudando la apariencia. Permite el uso de la fantasay de la ficcin.
- Dilogo aristotlico-ciceroniano: muy cercano al gnero del tratado, ya que no
hay dialctica, sino que prcticamente consiste en el monlogo de un maestro, de vez en
cuando interrumpido por las preguntas de uno o varios discpulos.
La segunda clasificacin es la propuesta por Jacqueline Ferreras76, en la que se
distingue cinco tipos:
- Dilogo cerrado: en l no hay ninguna discusin. Es una exposic